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Segundo día

Jimin se estremece al sentir en su espalda un frío punsante, gruñe y lentamente abre sus ojos dándose cuenta que esa no era su habitación.

—oh, buenos días— Jungkook termina de colocarse la camiseta y se acerca al mayor poniéndose de cuclillas al lado de la cama quedando cerca de la cara de éste, el cual, aún se encontraba acostado— creí que anoche te irías.

—¿Que hago aquí?— pregunta con la voz ronca algo desorientado.

—¿No te acuerdas?— Frunce el ceño.

—¿De qué hablas? ¿Que hemos hecho, Kook?

Imposible que hayamos tenido sexo. Lo recordaría— piensa Jimin.

—malpensado, te conozco lo suficiente para saber lo que estás pensando, y no, no hemos tenido sexo— dice seguro.

Jimin asiente y se queda pensando unos segundos hasta que se acuerda del reto.

—ah, cierto— sonríe— lo siento, pero sabes que cuando me despierto no pienso muy bien.

—descuida— sonríe mostrando su tierna dentadura y el mayor se queda admirándolo por largos segundos— ¿cariño?— definitivamente Jungkook lo mataría de ternura.

Sin poder evitarlo abraza al menor haciendo que éste cayera sobre él en al cama y riera.

En unos pocos segundos Jungkook ya se encontraba con su cara entre el hombro y cuello del otro mientras que con sus dedos acariciaba sus pectorales.

—¿ya pensaste que haríamos hoy?— pregunta y deja un suave beso sobre el cuello de Jimin.

—sí, se me ocurrió hacer una acampada, ¿que te parece, bebé?

—me encanta, cariño.

Al rededor de las 6 p.m ya estaban cargando todos los bolsos en el auto de Jimin, tenían como una hora de viaje.

—nunca he acampado— dice como un niño emocionado mientras saltaba tiernamente en el lugar mirando a Jimin entrar al auto.

—¿o sea, que es la primera vez que acamparás?— dice el mayor cuando frenaron en un semáforo.

—sí, me alegra que sea mi primera vez contigo— lo mira con un brillito en los ojos.

—y a mí me alegra que tu primera vez sea conmigo— dice sincero.

Al llegar al lugar donde acamparían Jungkook baja corriendo pero se detiene al ver nada.

No había nada más que árboles, árboles grandes y altísimos, con suerte se podía ver el cielo, las hojas secas cubrían el suelo y se encontraban algo húmedas debido al rocío.

—¿a-aquí hay anim-males salvajes?— pregunta el menor algo aterrado.

—claro que los hay— dice tranquilamente pero se preocupa al ver la cara de susto que tenía Kook en su rostro por lo que se pone de frente y toma al menor por los hombros— pero tranquilo, son inofensivos— acaricia el brazo de éste hasta llegar a tomar sus mando con las suyas y acariciarlo con sus dedos, mintió, pero el menor no se daría cuenta.

Unas horas después ya estaba el cielo completamente oscuro, lo único que ellos iluminaba a ellos era la pequeña fogata que habían armado.

Jungkook se sienta cerca de la fogata para tratar de calentarse un poco.

Jimin toma asiento a su lado y al notar al menor temblando paso su brazo por los hombros de éste. Jungkook comenzó a sentirse tranquilo y protegido entre sus brazos, además que el frío se le estaba pasando gracias al calor corporal que el mayor le transmitía.

Se quedaron en silencio, en un silencio en el que solo se escuchaba las ramas de los árboles romperse a lo lejos, las lechuzas y grillos, o el sonido de las ramitas quebrándose en la fogata.

— Volviendo al tema de que nunca has acampado— Mira a Jungkook— ¿Que otras cosas nunca has hecho?

— Un montón, ¿Por qué?

— Me encantaría hacer esas cosas que  nunca has hecho contigo— dice seguro mirando en un punto muerto.

—¿Enserio?— mira el perfil de Jimin.

—sí— lo mira— Jeon, ¿por qué eres tan bello?— dice asombrado.

Jungkook se sonroja pero no se notaría por lo tanto no bajó la cabeza.

Jimin con cuidado toma de la nuca a Jungkook, éste lo mira a los ojos y poco a poco comienzan a acercarse, ya no había ruidos, parece como si todo se callara abruptamente solo para que ellos puedan besarse, estaban a solo centímetros de juntar sus labios con los del otro, sus respiraciones se chocaban, Jungkook sentía el aliento mentolado de Jimin chocar con su boca, cuando estaban a punto de juntar sus labios la alarma del auto de Jimin comienza a sonar de la nada haciendo que Jungkook salte en su lugar y miren rápidamente en dirección al automóvil.

No había nada, Jimin le pidió silencio a Kook con una seña para ver si escuchaba algún ruido, pero no había absolutamente nada.

—Q-qué raro...— dice el menor nervioso y con miedo.

—sí, demasiado— contesta algo extrañado— ¿bebé, que te parece si nos vamos a dormir?— cambia de tema.

Jungkook asiente con su cabeza, y algo vergonzoso se adentra a la tienda de acampar. Jimin entra también y deja un espacio considerable entre ellos.

—p-podrías...?— dice jugando con sus dedos algo nervioso.

Jimin entiende a lo que Kook se refería, por lo que voltea quedando frente al menor, lo abraza por la cintura y comienza a tararear una suave canción.

—¿Mejor?— susurra.

Jungkook hace un sonido en forma de asentamiento.

— descansa, cariño— cierra los ojos.

—hasta mañana, bebé.

Planta un beso en la nariz de Kook y ambos caen dormidos.

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Ay ella (mi amiga de la que hablé en el capítulo anterior)  ya me seguía y yo ni enterada jsjsjs :')

Truth or Dare? >JiKook<Donde viven las historias. Descúbrelo ahora