Me eh despertado con sueños que me hacen llorar.
Son las cuatro de la mañana y me miro al espejo, analizo bien mi figura. No es que yo sea ególatra, simplemente que acepto que soy atractivo o tal vez lo era. Aquello que veía en el espejo era la figura de mi padre después de que mi madre se había marchado. Parezco muerto.
Mi cara está pálida, ojeras, mis labios están secos y partidos. La belleza que ella solía halagar se había ido poco a poco y tal vez ello estaba bien.
Ya no quiero seguir con esto. Las pesadillas son demasiado para mi, quiero parar.
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Olvido.
Short StorySolemos imaginar que hay una persona que encaja con nosotros a la perfección. Que nos entienda y nos conozca más que a nosotros mismos. Sin embargo, cuando sientes que ya la tienes junto a ti es difícil poder soltarla. Aferrarte a algo que ya no es...
