─;; viviendo con vampiros | ✓ editando.

006

Ese chico llevaba una daga en la mano y no quitaba la mirada de esa torre. Me escondí atrás de un árbol para poder observar.  ¡Wow!, pero que chico, ahora que lo veo un poco mas, es muy lindo, ahora que lo pienso todos son muy lindos.

Intenté verlo más cerca lo malo es que fui tan idiota que me caí.

─Chchchchchch...─Caí sobre mis rodillas.─ Auch. ─Dije en voz baja pero adolorida.─

No quería que se diera cuenta de que yo estaba ahí que tal si se enoja como hace rato, por suerte caí en el rosal no me pudo ver, pero como dije... ¡Es un rosal!, y tenía espinas, me hice varias heridas en el brazo, como estaba con jean no me hice mucho daño en las rodillas... no mucho, pero en los brazos y manos, si que fui torpe. Solo espero que no se de cuente.

─¿Ah?... ─Abre el rosal.─ ¡¿Qué haces ahí Idiota?!

─¡D-Disculpa! ¡Pero no te alteres!

─¡Pero como no quieres que me altere si estás lastimada!

¿Eh?... ¿Está preocupado por mí? 

─Ya  ─Apoye mi mano en el suelo. ─ Y-Ya sé... 

Me dolía la palma de mi mano izquierda, me había raspado.

─¿Huh?  ─Mira a la chica.─ Te duele mucho, ¿No?

─Si, Disculpa... es que me molesta esto, no quería ni pensaba que pasaría algo así.

─¡Tch! Que molesta eres, ahora mis hermanos olerán tu sangre.

─¿Qué?

─¡Tonta! Tu sangre huele demasiado fuerte y con solo eso notarán que es deliciosa, Ven. ─Extiende su mano.─

Tomé su mano y la sentí fría. Al sacarme del rosal, puso una mano en mi espalda y la otra en mis piernas, en otras palabras me cargo como tipo "Princesa".

─¡O-Oye bájame! Puedo caminar sola. ─Le miro.─

─Lo hago por que tienes las rodillas lastimadas.

─¿Eh? Pero no es mucho.

─¿No es mucho? Están todas de tierra y con un poco de sangre.

─¿Así?... Ni siquiera lo sentí.

─¡¿No lo sentiste?! ¿Quieres que te baje para que lo sientas y sufras? ─Le mira.─

─Si lo dices así, claro que no. ─Suspire.─

─Bien, entonces deja de quejarte... 

─Está bien. ─Dije algo desanimada.─

*  *  * 

Subaru me llevo rápido a su habitación, lo primero que vi... ¡Un ataúd! ¡Dormía en un Ataúd! Quién duerme en algo tan incómodo.

Me sentó en un silla, "Lo único cómodo que tenía" pensé.

Me dijo que esperara ahí y que si entraba alguien estaba jodida.

Espere unos minutos y regreso Subaru. Por suerte nadie llegó a entrar.

─¡Aish! ─Lo dije porque me ardía las heridas.─

Sentía que dolía y ardía terrible.  Terminó de curar mis heridas de mis piernas y se levantó, pensé que se iba a ir y le pregunte:

─¿A dónde vas?

─¿Qué? A ningún lado. ─Se sentó al lado de la chica.─ Ahora, dame tu brazo. ─Extiende su mano.─

Lo miré y le acerqué mi brazo, comenzó a limpiarlas y otra vez volvía el dolor, estaba casi apunto de llorar.

Después de todo eso pensé en irme a mi habitación cuando el me dijo algo.

─Te doy tres opciones. La primera te quedas conmigo está noche aquí. La segunda es que te acompañe a tu habitación y pase la noche ahí o la tercera te vas y corres el riesgo a que alguien te muerda. Decide. ─Dijo cruzando sus brazos.─

─Le miré confundida.─ ¿Y por qué haces esto?

─Esa herida que tienes en tu pierna. ─Señala.─ Se podría abrir mientras duermes. Tu sangre mancharía tu cama y mis hermanos vendrían por ti.

─Pero nosotros... tu sabes tendríamos que dormir en la misma... es que yo... bueno yo...

─Si te preocupa dónde voy a dormir, no hay problema, puedo dormir en el mueble o la camilla de la ventana.

─Si ese es el caso, está bien, acompáñame.

─Bien, vamos.

*  *  *

Al llegar a mi habitación, le dije que me esperara un rato afuera ya que me cambiaría de ropa, acepto pero dijo algo que me molestó "Como si te quisiera ver." y le respondí con un "Ya te oí."  y cerré mi puerta. El es muy enojón, extraño y algunas veces suele ser amable... Es un Tsundere.

[Abre la puerta]

─Ya, pasa...

─La mira.─Tch!, que estúpida pijama. ─Entra a la habitación.─

─Cállate y ponte cómodo. ─Dije en un tono amargo.─

─Bien yo me quedo aquí. ─Señaló la ventana.─

─¿Cómo vas a dormir en una ventana? ¿No tendrás frío?.

─¡Idiota! ¡Duermo en un ataúd! No voy a tener frío en un ventana.

─¡Ya cállate! ¡No es necesario que me grites! 

─¡Tú también me estás gritando! 

─¡Yo no estoy gritando! Solo me alteré un poco.

─Tch, de todos modos cállate o alguien vendrá.

─Pero si tu ere─

¡Weieieieieieieieieie! ¿Qué con esa mirada?, Antes que terminara de hablar me dirigió una mirada que me paralizo por un momento, hizo que me callara, caray este tipo me saca canas verdes...  Pero no lo odio... creo que le tengo un pequeño aprecio hacia su persona.