His Fangirl - Namjoon / BTS 💣

E p i l o g u e

10:10 pm

Sungmin se revolvió en su asiento, desviando la vista de reloj de pared y envolvió sus manos en torno a la taza humeante de café frente a ella.

«Esto es una locura.»

Se mordió el labio inferior, girando el rostro hacia el ventanal a su lado, en un vago intento de distraerse a si misma de todas las cosas que habían estado rondando en su cabeza desde que había recibido su llamada; obligándose a perderse entre las luces de los altos edificios, los autos y las personas que aún caminaban por las calles pese al increíble frío que hacía.

Hasta que escuchó la campanilla de la puerta.

«¿Es él?»

Estiró es cuello, buscándolo entre las personas que habían entrado y se murmuró una reprimenda a si misma al recordar que lo único que habían acordado al hablar esa tarde era la hora y el lugar dónde se verían. Ninguno de los dos le había dicho al otro que estarían usando ni cómo lucirían al igual que en las películas.

«Seguramente esté buscando a la chica que vio anoche.»

Sungmin se encogió en su asiento, bajando la vista a su taza de café negro; A diferencia de la Sungmin que había visto la noche pasada, la verdadera no usaba ropa tan ajustada o corta, ni mucho maquillaje o tacones tan altos como esos. En su lugar prefería los pantalones de talle alto, alguna camiseta holgada y sus favoritos pero desgastados converse.

Tal y cómo estaba haciendo en ese preciso instante.

«No pienses en idioteces. —Se recriminó— Él es una súper estrella, lo que sea que uses hoy no importará en lo absoluto. Sólo eres una chica corriente, una fanática más entre millones.»

—¿Sungmin?

Ella dio un brinco al escuchar su nombre de pronto, siendo lo suficientemente torpe cómo para tirar el café en el proceso. Ensuciándolo todo al mismo tiempo que se ensuciaba a si misma de líquido caliente.

—Mierda, mierda, mierda. —Chilló, sacudiéndose— Quema, quema mucho.

El hombre frente a Sungmin se echó a reír, doblándose en dos mientras sus carcajadas llenaban la cafetería. Llamando aún más la atención de todas las personas que se habían girado a ver el escándalo que ésta había provocado con sus gritos.

«Tierra. Trágame. Ahora.»

Volvió a morderse el labio inferior, usando varias de las servilletas que le habían dejado sobre la mesa cuando llegó a la cafetería y comenzó a secarse el pantalón, murmurando malas palabras conforme se iba dando cuenta que en lugar de arreglar las cosas sólo las empeoraba aún más al notar que la mancha café sólo se expandía.

—No creo que eso sirva de mucho.

—¿En serio? —Ella bufó— Vaya, si nunca lo dices no me hubiese dado cuenta.

Él alzó una ceja, llevándose una mano al pecho y la miró indignado, consiguiendo que un revoltijo de emociones se formará dentro de su pecho al tenerlo allí, sentado frente a ella. Usando ese suéter negro de mangas extremadamente largas que últimamente usaba tanto y suspiró. Lo viese como lo viese, simplemente no podía enojarse con Kim Namjoon.