El rico y el marginal

Capitulo 4

pero luego recordó q el de rastas se habia deshecho la coleta y se había quotado las gafas, no sin antes pedirle q no lo mirase. A Fudou le picaba la curiosidad y dos grandes dudas le vinieron a la cabeza «¿Me giro y lo despierto y me comporto como el q soy sin importarle su peticion? o ¿Soy sumiso y obedezco.» . Al dinal tomo la decision de...

Pov Fudou:

Me gire lentamente y vi q Kidou estaba dado la vuelta. Tenía las rastas sueltas. No se por q lo estoy haciendo. Creo es por q espero ver algo horrendo para poder humillarle. Me acerque sin hacer ruido. Povo a poco sentia mas ganas de verlo. Justo cuando estire la mano para darle la vuelta...:
-No, porfavor, no lo hagas.-me rogo. Debi haberlo despertado.
- ¿Por que no quieres te vea?
- Hace mucho que nadie ve mi aspecto y ahora me da vergüenza.
- Ya veo...
Me volvi a alejar y me quede dormido.
Pov Narradora:
A la mañana siguiente, cuando Fudou se desperto, Kidou ya estaba vestido.
-Buenos dias- dijo el de rastas alegremente. Fudou solo hizo unmovimiento con la cabeza en señal de saludo.
- Ten.- dijo Kidou dandole un unuforme.- Es un poco pequeño, pero creo q te servira.
- Gracias.
Lo cogio bruscamente y se dirigio hasta ka puerta del baño a estaba en la habitacion.
-¿Te vas a cambiar ahí?
- Como comprenderas no quierilo q me veas desnudo.
- A claro, perdona- dijo Kidou entre carcajadas.
Una vez desayunaron y estuvienron listos, se subieron a la limusina.
A Fudou le gusaba. La limusina y parecia disfrutarlo. Cuando llegaron al colegio, laa chicas al ver q Kidou se bajaba de la limusina comenzaron a chillar. Fudou sintio q allí no pintaba nada, asi que aprobechó la multitud y la distraccion de Kidou para escapar. Se dio cuenta de q Kidou se divertia, y eso hizo q pensara mal de el:«Primero se hace el niño bueno, pero luego anda restregandole a todo el mundo su riqueza y popularidas, q covarde».
Al llegar se ebcontro con Hiroto, q estaba entrando en clase. Se veia algo triston.
-¿ Q te pasa?
-Buenos dias. Fudou no pasa.- Fudou sabia q tenia q ver con Midorikawa. El no creia en el amor, pero aun asi queria ayudar, por q en lo q si creia era en la amistad.
- No soy idiota, se q tiene q ver con Midorikawa.
- Como lo... no importa.- giro su rostro para ocultar el sonrojo.
- Dime, q pasa.- le ordeno el mohicano.
- Nada, es solo que he empezado a sentir cosas por el y... No creo que el sienta lo nismo.
- Eso no lo sabras hasta q no lo intentes.- «¿Por q sieto como si me lo dijera a mi mismo?» penso para si.
- Supogo q tienes razon.
- Siempre la tengo.- dijo con una sonrisa de maldad.- Y como siempre tengo razon te voy a decir q seguro q le gustas.
- ¡¿EN SERIO?!¡¿COMO LO SABES?!.
-Pues por q ayer estaba: Que si Hiroto esto, q si lo otro.
- Gracias Fudou, eso me deja mas trabquilo. ¿Hay algo q pueda hacer para compensarte?
- Declararte.
-¡¿QUEEEEEEE?!- dijo con un leve.sonrojo.
- Lo q oyes, y deja de gritar,q me.vas a dejar sordo.
- Pero, ¿por q quieres q lo haga?
- Una, por tu bien y otra, por q quiero verlo y reirme un rato.
Antesnde q pudiera quejarse por las palabras de Fudou aparecio Midorikawa dando saltitos.
- Holiwis.
Hiroto se puso super nervioso. No era capaz de mirarle la cara, asi q se limito a entrar en el aula cabizbajo.
- ¿Que le pasa?- Pregunto preocupado.
- Perdonale, es q no se encuentra vien.- dijo Fudou intentando encubrir a su amigo.
- Ya veo...
« Esto va ser mas complicado de lo q creia» penso Fudou rascandose la nuca.
Pasaron las horas y llego la hora del entrenamiento. Entre Midorikawa y Hiroto, haciendo q cometieran errores muy tontos. El entrenador termino por sacarlos del campo.
-¿ Q les pasa? - prrgunto Endo acercandose a Fudou.
- Pues q los dos se gustan y no se lo consiguen decir.
- Ya veo. Q complicado es esto del amor.- Dijo el d la banda cabizbajo.
- Y es por eso q no creo.- dijo entre susurros
- ¿ Que dijiste?
- Nada- contesto Fudou de mala gana. Metio laa manos en los bolsillos y se alejo lentamente hasta su posicion para continuar el entrenamiento.
Al terminar, estaban tan sudados q fueron a los vestuarios para usar las duchas. El entrenador hizo parejas para ducharse.
Endo y kazemaru.
-Bueno... Parece q nos toca juntos.- Endou estaba muy sonrojado.
- Si, eso parece.- Kazemaru tb estaba muy sonrojado. Entraron en la ducha y se desnudarob dandose la espalda. Abrieron el grifo y se alejaron lo suficiente para no tocarse. « Pero q estoy haciendo. Se supone q no tendria q estar nervioso, los dos somos chicos.» pensaba Kazemaru. « Es mi mejor amigo, ¿ por q me escondo?» Penso Endo. Los dos se gira ron lentamente. No pidieron evitar bajar sus miradas. Se dieron la vuelta rapidamente con un gran sonrojo. « Madre mia» pensaron los dos. Terminaron lo mas rapido q pudieron y se fueron a toda velocidad.
Goenji y Fubuki.
- Quieres q te ayude a lavarte mi amor?- Susurro Goenji al oido de su novio, haciendo q este se sonrojara.
- Si porfavor.- Le respondio el peli plata con picardia.
Hiroto y Fudou.
Los dos se quedaron completamente desnudos en la ducha y Hiroto miro la entrepierna de Fudou con sorpresa y este se dio cuenta.
-¿ Quieres tocarla?- pregunto el marginal sorprendido.
- No gracias...
-Por cierto, ¿Ya sabes lo a le vas a decir a Midorikawa?
- No... De hecho no se si lo voy a hacer.
- Claro q lo haras, si no me debes una cena.
-¿Por?
- Por q te he orgabizado una cena hace unos segundos, ya lo he reservado yo y lo he pagado.
- MALDITOOOOOO.
-¿Por q me gritas?, te hice un favor. Ahora solo tienes q proponerselo a tu novio.
- Te odio
- No hay de q.
Kidou
A Kidou le toco bañarse solo, ya q el entrenador conocia sus problemas. Ademas de su rostro, tb le daba vergüenza mostrar su cintura de fertil.
Al bañarse solo no tenia con quien charlar asi q termino pronto. A parte no queria soportar los gemidos provenientes de Fubuki y Goenji q estaban en la.ducha de alado.
Cuando salio del vestuario de encontro con Endo apoyado en la pared con el pelo humedo.
- ¿Te ocurre algo? ¿No te secas el pelo?- Preguno preocupado.
- Bueno, es q se me olovido- dijo intentando evitar la primera pregunta.
- Tiene q ver con Kaze?
- Si...- Kidou le conocia bien, asi q no erecia la pena intentar ocultarlo.
- Tranquilo, seguro q no le habra dado importacia a eso de verte desnudo.
- Si tu lo dices...
Con Fudou
Fudou se escondio detras de un arbusto y Hiroto espero a Midorikawa a las puertas de los vestuarios. Cuando el pelu verde salio Hiroto no lo dudo un segundo y se acerco a el.
- Esto... Mido.
- Si...- En el rostro de estos dos chicos apareció un leve sonrojo.
- Tienes algo q hacer el sabado?
- No...¿por?
- Me.preguntaba si querrias venir a cenar conmigo.
- Cla- claro.
Los dos sintieron por igual una inmensa alegria y Fudou desde su arbusto lo disfrutaba a risas y le.asqueaba a la vez.
Los dias pasaban y tanto el peliverde como el pelirrojo estaban super nerviosos. Tanto el uno como el otro no dejaban en paz a Fudou por privado con cosas como «¿ Q me pongo?, ¿q le digo?, etc.». Esto hacia q Fudou se arrepintiera de haberse metido. Por fin llego la noche. El restaurante era muy umilde, razon por la cual Hirolo maldijo a Fudou, por q se creyo q era un sitio caro como el mohicano le habia dicho.
Se sentaron en una mesa y pidieron. Mantuvieron una larga y entretenida charla. De repente,Hiroto recibe un mensaje de Fudou « DECLARATE DE UNA VEZ Q HACE FRIO». Hiroto se sonrojo y para ocultarlo giro su cabeza hacia la ventana. Vio algo moverse en el arbusto y en segida supo q era su amigo marginal.
- Oye Mido.- Dijo el pelirrojo rendido ante la insistencia de Fudou. -Quiero contarte la razon por la q te invite a cenar.
- Y-y cu-cual es.- Horoto no eravel unico q estaba nervios.
-Bueno pues... la razon es... q... Mido tu me... Mido tu me gu-gustas- dijo entre tartamudeos.
-¡¿ EN SERIO ?! Hiroto tu a mi tb.
Lo dis se miraron con un hermoso destello en sus ojos y un leve sonrojo. Hacercaron sus rostros lentamente a la vez q cerrabanlos ojos. Los dos se fundiero en un largo beso.

Fudou se alejo de alli sintiendose satispecho por haber hecho algo bueno. Por el camino se encontrp con Kidou.
- Lo e visto. Me sorprende mucho q lo ayas hecho. Pense q no creias en el amor.- Kidou lucia una hermosa sonrisa.
- Y no creo en el amor. Simplemente ayude por q me dio la gana.
Las frias palabras de Fudou se clavaron en el corazon de Kidou haciendo añicos su corazon.