Danger Line

Capítulo 8. Peligro.

Taehyung y Suga salieron a esquiar. Compraron los trajes de esquiar en una tienda cerca del hotel. Uno amarillo para Taehyung y uno verde para Suga. Y luego fueron hacia la cima de la montaña.

Yoon Gi iba nervioso. Nunca había esquiado en la montaña y le daba un poco de temor, sin embargo, Taehyung lo llevaba fuertemente abrazado, haciéndole sentir seguro y protegido. En verdad ese chico había nacido para dirigir y proteger. Su cuerpo emanaba confianza y determinación y él se contagió de esa sensación.

Dos chicos japoneses, homosexuales también, los miraron y se acercaron a hablarles. Los atrajo la belleza de ese par de chicos coreanos que parecían tan enamorados.

─ Buenos días. – Les hicieron una reverencia, la cual correspondieron los otros dos.

─ Buenos días. – Saludaron.

─ ¿Primera vez? – Preguntó el chico más alto.

─ Sí. – Contestó Taehyung, observando con desconfianza a los otros dos.

Su vida en los últimos meses, escondiéndose y refugiándose en cualquier lado, le había hecho sentir desconfianza de todo y de todos. Los miró observando con atención por lo que dijeran.

─ Somos Kami y Keiki. Somos de Kioto y también es la primera vez que venimos. Kami nunca ha esquiado y yo he esquiado en otros lugares, pero nunca aquí. – Les explicó el chico más alto.

─ Nosotros somos... Ju Hon y Heechul. – Dijo Suga señalándose a sí mismo como Heechul. – Y vinimos para ver y aprender. –

─ Ah, pues si quieren, podríamos subir los cuatro y apoyarnos. Kami tiene mucho temor y no me gustaría que le pasara nada malo. –

─ Quizás sería mejor que subiéramos los cuatro y que observen como nos deslizamos Heechul y yo. – Propuso Taehyung. – Yo si he esquiado antes, y pueden ver como se le enseña a alguien. – Le dijo, tomando a Suga de la mano y subiendo sin esperar ninguna respuesta.

Sin embargo, los otros dos los siguieron. Cuando llegaron a la cima, Tae ayudó a su hyung a ponerse los esquíes y luego él mismo se puso los suyos. Luego lo tomó de la mano y le dijo:

─ No me sueltes. No te pasará nada si te quedas conmigo, hyung. –

Éste lo miró y solo asintió sonriendo, pensando que a Taehyung le confiaría su propia vida, si fuera necesario.

─ Entonces vamos. – Y se fueron deslizando poco a poco. Taehyung iba primero y ayudaba a Suga quién poco a poco y con la confianza que le daba estar apoyado en Tae, fue moviéndose con mayor rapidez.

Los dos chicos japoneses los miraron y luego los imitaron.

Después de dos horas, los cuatro se deslizaban más rápido, pero estaban en la ladera de caída suave, donde los novatos siempre esquiaban.

─ Quiero ir a mayor velocidad. – Interpuso Keiki.

─ No, yo no iré más rápido. Me da miedo. – Le dijo el otro chico con miedo.

─ Ju Hon puede ir contigo y yo me quedaré con Kami. – Propuso Suga. Sin embargo captó en la mirada de Taehyung que la idea no le agradaba nadita.

─ Buena idea. – Y Keiki comenzó a caminar haciendo que Taehyung lo siguiera. Pero antes le dijo a Suga:

─ No te muevas de aquí, hyung. Por favor. – Le pidió.

─ No lo haré. Ni Kami ni yo nos moveremos. Los esperaremos. ¿Verdad? –

Y el otro chico, que casi era un niño, asintió con timidez.