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-Bájame ahora!!- Grite, lo más fuerte que pude. Mi garganta estaba ardiendo, por tratar de gritar y no poder. Me quedaría afónica pero no importaba. -¡Mierda que me bajes de una puta vez!- Comencé a golpearle la espalda, pero solo recibí una nalgada y esta fue más fuerte que la anterior. Ivan carcajeo y siguió caminando sin importarle el silencio y las miradas que se producían en la cafetería.
Al llegar al estacionamiento, el cual estaba solo. Ivan me bajo y lo primero que hice fue darle una buena cachetada, dejandole mi mano marcada en su mejilla...
-¡Uy! Que gatita- Dijo sobando su mejilla
-Te mereces eso y mucho más ¿Qué piensas? No tienes derecho sobre mí Ivan, no puedes hacer algo que yo no quiera. No eres nada mío.
-Pero bien que compartiste "Sexo Secreto" conmigo.
-¡Cállate! ¿Me recordaras todos los días de mi vida?
-No me digas que te arrepientes.
-Pues... si!! Si me arrepiento- Ivan levanto una ceja sinicamente y me tomo por la cintura pegándome a él..
-Pues eso no lo decías cuando estabas gimiendo de placer. Y aceptemoslo ________- Se acerco a mí oído y con voz ronca dijo. -Te mueres porque entre en ti una vez más- Lo mire asombrada. ¿Dónde estaba el Ivan del fin de semana? "Patan, es como los demás!"
-Pues no, fíjate que no
Me pego a él y pude sentir su gran erección. Gemí al instante y me aventure a mirarlo a los ojos. Verde esmeralda con un toque de pasiónal . Sus labios estaban tan cerca de los míos, solo con acercarme un poco y podía sentirlos. Pero no, yo no daría el primer paso.
-Te mueres porque en este mismo momento te bese- Murmuro diciendo toda la verdad
-Si- Murmure. Ivan sonrío. -No cantes victoria, es solo que Neels me a dejado un mal sabor de boca- Levante mi ceja y Ivan me soltó bruscamente. Casi aventandome.
Lo mire sorprendida, él estaba furioso. Llevo sus manos a su cabeza y despeino su cabello, como si estuviese frustrado. Luego se acerco a su carro y golpeo el vidrio. El sonido del vidrio quebrado me hizo tapar mis oídos. Lo mire confundida. ¿Qué mierda le estaba pasando? Luego mire su mano, estaba ensangrentada. Mi corazón se acelero más de lo normal.
-¡Dios mío Ivan!- Corrí hasta él y tome su mano. La respiración de Ivan estaba a agitada, pero seguro que no era por dolor
-Déjalo así
-¿Qué? No me pidas eso. Vamos inmediatamente a la enfermería.
-No- Murmuro seco. -No queremos que las porristas ni mucho menos Neels nos vean juntos. ¿O sí?- Mi estomago se retorció al escuchar eso. Había estado mal lo que dije.
-Mierda, Ivan,  no seas infantil ¿Quieres? Anda- Trate de moverlo pero fue imposible. Seguía con su actitud. Bufe estresada lo mire fijamente. -Por favor,Ivan- Suplique y dicho esto, con delicadeza junte nuestros labios. Era un cálido beso, mis manos se enredaron atrás de la nuca de Ivan, dio una leve mordida en mis labios. -Por... favor- Susurre sin dejar de besarlos. Esos labios eran perfectos. Suaves y tan deliciosos.
-Bien- Susurro. Me separe de él lentamente para verlo a los ojos. La furia se había ido, y un lindo brillo había aparecido en estos. Le sonreí y este me devolvió la sonrisa.
* * * * * * * * * * * * * * *
-Bien, hemos llegado- Dije mientras me estacionaba frente a la casa de Ivan, Lo había ido a dejar a su casa, ya que su mano derecha estaba fracturada y su auto sin vidrio. -Quiero que te cambies las vendas de acuerdo a como te dijo la enfermera.
-Si _________, ya te he dicho que así lo haré.
-Bien- Sonreímos.
-Oye, ¿Por qué no te quedas a comer?
-¿Qué? ¡No, no!- Negué rotundamente.
-Anda ________... Solo es una comidita
-No Ivan.... No, yo no puedo
-¿Por qué no? ¿Tienes una cita con Neelsito?- Reí ante sus "celos".

-No, pero.. tengo algo de pena...
-Anda ________, mi familia te agradara.... Porfiss..-Hizo un puchero fingido. Lo mire algunos segundos, dude pero al fin acepte
-Solo a comer..-Dije poniendo mis ojos en blanco. Ivan sonrió.
-Por eso me encantas- Dicho esto dio un beso tronado en mi mejilla, y bajo. Sonreí bobamente y después baja yo.
Nos detuvimos frente a el gran portón y Ivan introdujo una clave. Estaba de espaldas, y aún así se veía perfecto. Las ganas de abrazarlo por atrás me invadieron. Y no pude evitarlo, así que mientras Ivan insertaba la clave, lo abracé por atrás. Me miro sobre su hombro y sonrió. Luego el portón se abrió y pudimos entrar.
-De día es más hermosa- Dije observando la casa, diciendo totalmente la verdad, ya que la primera vez que había estado allí, no la había apreciado tan bien. Caminamos por un pasillito lleno de piedras y flores y luego llegamos a una gigante puerta, la cual Ivan abrió. Al entrar sentí un cosquilleo en mis estomago, y mis mejillas se sonrojaron Recordando la noche del viernes pasado.
-¿Lo recuerdas?- Me dijo, mientras se volvía a mí con una sonrisa picarona
-Si- Murmure y agache la cabeza
-Hey!! Que no te de pena, preciosa gatita- Fruncí el ceño, y poso su mano izquierda en mi cintura, lo mire sorprendida. ¿Me besaría en su casa? Y mis dudas se aclararon cuando sus labios se posaron en los míos. Al instante le seguí el beso, y cerré mis ojos. Me dejé llevar por la sensación de tener sus labios junto a los míos. Su respiración era lenta, al igual que el beso. Mis brazos fueron atrás de su cabeza, mientras comenzaba a jugar con su cabello. Sentí como me pegaba más a su cuerpo, y mis pezones se hincharon al sentirlo tan cerca. Aunque llevara camisa, sentía como su cuerpo me quemaba por dentro. Mordí su labio inferior, y este me lo impidió, luego su miembro bucal entró al encuentro del mío, donde tuvieron una pelea entre ellos.
Estaba tan perdida en el beso, que no me percaté de que su mano estaba en una de mis nalgas. Rápidamente la subí a mi cintura de nuevo y el soltó una risita.
-¿Ivan?- Escuhe como lo llamba, una voz femenina. Rápidamente me solté de él algo brusco, y acaricié mi frente agachando mi cabeza. Ivan se giró.
-¡Mamá!- Dijo entusiasta. -Mira ella es ___________- Dicho esto levanté mi vista hacía él, con terror. Me sonrió cálido y me tomó de la mano, luego me acercó a él y me encontré con una señora realmente muy hermosa. Era de baja estatura, su cabello castaño y liso, sus ojos azules y tenía una sonrisa dibujada.
-¿_______?- La chica a la que le hablabas a Rose y a Dylan, hace unas semanas??- Alargo. Mire a Ivan confundida, y su cara estaba pálida.
-Si- Murmuro. - Bien, __________, ella es mi madre Marisol
-Un gusto señora- Sonreí, dándole mi mano.
-El gusto es mío, ________, Me alegra conocerte al fin.
-¿Por qué?- Pregunté confundida.
-Mamá, ________ se quedara a comer- Interrumpió Ivan
-¡Perfecto!- Sonrió. -¿Y son novios? Porque Ivan, ya te he dicho sobre las relaciones en libertad- Lo miro furiosa y Ivan abrió los ojos a tope, luego me miró nervioso.
-Si- Intervine, Ivan & Marisol, me miraron sorprendidos. - Somos novios desde hace una semana.
-¿En serio? ¡Me alegró tanto! Después de que Ivan habló tanro de ti, al fin se le hizo!!- Tapó su boca incrédula. -Dios, y eres tan hermosa como el lo mencionó
-Gracias- Sonreí, mientras brincaba por dentro. ¡Habia dicho que era hermosa! Y lo que era mucho mejor. ¡Habia hablado de mi! A su familia!!
-Bien, bien, iré a terminar la comida, Ivan, lleva a ________ a tu cuarto, los llamo cuando la comida este lista- Me estremecí por completo. Iríamos a su cuarto solos
-De acuerdo- Dijo sonriendo. Marisol salio de ahí, y Ivan me tomo de la mano. -Anda "novia"- Comenzamos a subir las escaleras.
-Debía salvarte de un castigo, Ivan...- Llegamos a su habitación y este la abrió.
Me dio el paso para entrar primero, luego entró él y seguido cerro la puerta. Lo primero en mirar, fue su cama. Y al instante el rojo tomate, invadió mis mejilla.
-Amo cuando te sonrojas.
-¿Qué? Que decís pero si no estoy sonrojada.
-Vamos te sonrojaste al ver la cama- Se acerco hacía mí, y me abrazó por detrás
-Ivan- Murmure. -Ivan....., no

Secret 》Ivan MartínezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora