Caminaban por el pasillo Estela y Lyon, esta última tenía una muy sonrojada Yali en brazos que les indicaba el camino hacia la enfermería.
–Cruzas a la derecha y la primera puerta a la izquierda, allí me puedes bajar–dijo está señalando con la mano.
–No ha cambiado mucho–dijo en un susurro estela mientras miraba el piso que años atrás caminaba a solas.
– ¿antes estudiabas aquí?
Estela volteo su mirada a la niña y sonrió al ver su interés: – Sí.
– ¿en serio? ¿Eras muy popular y bonita como ahora?
–deberías de dejar de hablar tanto niña.
Estela soltó una carcajada y volteo a ver a Yali: – eres muy curiosa ¿no?
–perdón.
–no tienes que disculparte y respondiendo a tu pregunta no, no era popular ni bonita, solo era yo y mis estudios, es mucho mejor que llenarte de enfermedades veneras.
Lyon sonríe y se para frente a la puerta indicada para bajarla delicadamente, tocar y abrirla, luego entrar y encontrarse con una señora un poco mayor sentada en un escritorio escribiendo algo en un papel.
–disculpe…–
–pase joven ¿qué le trae por aquí?
–bueno le trajimos a una herida.
La doctora mira y ve a Yali, le hace una señal para que se acerque y la sienta en la camilla, mira minuciosamente la herida y luego va hacia un estante donde saca algodón, agua oxigenada, alcohol y una curita.
–bueno muchacha ¿Cómo se hiso eso? No es nada grave pero si no se cura se podría infectar y doler más.
–bueno…–miro a estela en modo de súplica y esta solo la alentó a dijera lo que viera conveniente. –me resbale y me caí golpeándome con la mesa.
Estela bajo la mirada pensado todas esas veces que también tuvo que mentir cuando la molestaban, se puso la mano en la frente y luego restregó un poco, le tanto la mirada y vio una foto en la pare mostrando a una viejita sonriente con una bata de doctora y su estetoscopio alrededor de su cuello.
– ¿la señora Morrison donde esta?–dijo mientras caminaba hacia la pared donde estaba la foto.
– ¿La conocías muchacha?–pregunto la doctora mientras levantaba una ceja y volteaba a ver a estela
–algo así.
–murió el año pasado, con 70 años no se había retirado y uno de esos pre-infartos la termino de maltratar.
Estela bajo la vista y sonrió mientras tocaba la foto: –vieja impertinente nunca hacia caso a lo que le decían.
–veo que la conocías muy bien.
–más de lo que creen todos.
*
Después de unos minutos salieron otra vez rumbo a la dirección donde se encontrarían con la directora. Estela solo quedo pensativa todo el camino como era de costumbre, hundida entre las más profundas lagunas que podían existir.
–Estela.
– ¿ah?
–llegamos.
Miro de nuevo hacia el frente y leyó en la puerta Srta. Logson, toco la puerta y un «pase» se escuchó desde adentro.
Entro como si nada y camino hacia la silla para luego cruzar las piernas, Lyon entro tras de ella y cerró la puerta, luego camino y se sentó en la silla que estaba al lado de estela.
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Se arrepentirán©
Teen Fictioncada minuto y cada segundo que pase en ese maquina mirando desde arriba como todos caminaban, corria lo mas que podia por que sabia que pronto llegaria el momento en el que el se vengaria por destruirle el corazon a esta ballena de ojos verdes.