8. La llegada

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Pasaron las 5 horas y media de vuelo restantes, y aterrizamos en Orange County.
Bajé mi equipaje y me dirigí hacia la salida, buscando alguna referencia que me indicase cómo llegar al internado.
Busqué entre la gente con carteles y ví uno que ponía: Cassandra Cacciatore. Mi nombre.
Me acerqué.
- ¡Hola! , Tú debes de ser Cassandra, ¿No?.- dijo una chica animadamente.
- Sí, ¿Eres del internado?.- me atreví a preguntar.
- ¡Claro!, Soy la transportista. Me encargo de transportar a los nuevos al internado, y a los que terminan sus estudios para devolverlos a su lugar de origen.- dijo con simpatía.
- Por cierto, soy Brinn.- dijo extendiendo la mano.
- Encantada.- dije con una sonrisa estrechando su mano.
- Bueno, creo que este año solo entras tú. Y sino, se habrá encargado mi compañero de llevar a los demás nuevos.- dijo.
Metió mi equipaje en el maletero de un mini-bus típico de internado.
Tomé asiento en la parte trasera para observar mejor el paisaje de California.
El internado estaba a 75km del centro de Orange County.
Llegamos y me ayudó a bajar la maleta.
Yo me dirigí hacia la recepción para que me indicasen mi habitación.
- Bienvenida Cassandra, te estábamos esperando. El internado es unisex, por tanto compartirás habitación con dos chicos y una chica.- dijo la directora.
- ¿Cómo?, ¿Dos chicos?.- pregunté indignada.
- Sí, pero hay habitaciones separadas dentro de la propia habitación. Tendréis intimidad.- dijo la directora en respuesta.
Lo que me faltaba. Tener que compartir habitación con dos tíos.
Me despedí de la directora y crucé el internado hasta llegar al Ala Oeste, donde se encontraba mi habitación, la 514.
Llamé a la puerta antes de introducir la llave.
Abrí y me recibió un chico de pelo castaño, 1'75 de altura aproximadamente y unos ojos verdes profundos.
- Hola.- dijo con una sonrisa.
- Soy Ashton.- añadió sin perder su sonrisa.
- Encantada, soy Cassandra.- dije también sonriendo.
- ¡Qué, Ash!, ¿Ya ligando con la nueva?.- dijo una voz a su espalda.
Ashton se apartó y pude ver a un chico moreno, con ojos oscuros y un físico que parecía haber sido sacado de una tienda de Abercrombie & Fitch.
Cuando me vió, abrió los ojos como platos y se puso rojo como un tomate.
Se acercó corriendo y me ofreció su mano.
- Encantado, soy Ethan.- dijo con una mirada de poseso.
Le estreché la mano y sonreí.
- Me llamo Cassandra.- le dije.
- Mira quien liga ahora.- dijo Ashton vacilante.
Comencé a reir.
- ¡Dejad de atosigarla, bichos!.- gritó una voz femenina.
Una chica de pelo castaño claro y ojos negros se abrió paso entre ellos para saludarme.
- ¡Hola!, Me llamo Carter.- dijo sonriente.
- Yo soy Cassandra.- dije con una amplia sonrisa.
- Ven, pasa.- me dijo animada.
Entré en la habitación. Había un salón con dos sofás y una mesa de esas bajas en el centro. Al fondo, había un escritorio con ordenador, y frente a los sofás había una televisión de plasma.
En la parte derecha de la habitación, frente al escritorio, había dos puertas que daban a las habitaciones. Había una habitación más grande que la otra.
- Entra en la grande.- me dijo Carter.
Hice caso a sus órdenes.

Breath Before The KissDonde viven las historias. Descúbrelo ahora