Recuerdo a verlo visto, sus gruesos labios, sus ojos penetrantes sobre mi, las facciones de su rostro, algo había en él que hacia que me quedara inmóvil, pareciera como si me hubiera congelado frente a la puerta del aula, comienzo a hiperventilar, m...
Alex No me separo de él, llevamos varios minutos así a pesar de que estemos mojados y en la calle, me siento tan bien estando con él. Levanto un poco mi cabeza, observó su rostro, sus ojos están cerrados, escuchó como su corazón late con calma, sonrió sin dejar de admirar su bello rostro.
-Damon- apenas se alcanza a escuchar mi voz.
-Dime- me dice abriendo sus hermosos ojos azules y regalándome una pequeña sonrisa. Puedo ver un hermoso brillo en aquellos ojos que tanto me encantan.
-Siempre te quiero a mi lado- le digo por lo bajo aunque se que el me escucha perfectamente, me da un pequeño beso en la frente.
-Vamos a casa, ya es tarde y estamos todos mojados- me dice con una sonrisa de lado, me toma de la mano y caminamos unos minutos para llegar al inicio del bosque.
-Me trasformare para llegar más rápido a tu casa, estamos muy lejos de tu manada- y era cierto, mi manada esta a varios kilómetros de este pueblo.
-Yo también lo haré- le digo sonriendo.
-Claro que no, un rouge casi te mata y tu quieres transformarte?, anda te subirás a mi lomo- lo miro con una ceja alzada y una mueca en mi rostro, me alejo un poco para que pueda transformarse, no me gusta ver su cara de sufrimiento en ese momento. Doy pequeños pasos para llegar a aquel majestuoso lobo negro, lo observo detalladamente. Sus ojos son igual de hermoso que los de Deamon, con una de mis manos acaricio su suave pelaje hasta quedar enfrente de él, sus ojos no dejan de mirarme, sonrió y acaricio con ternura su cabeza, nunca lo había apreciado de tal manera, le doy un pequeño beso y de un salto subo a su lomo.
-Ten cuidado Akela- le digo sujetandome muy bien. Escucho un aullido a lo lejos, ambos nos ponemos alerta, mi cuerpo se tensa por completo al escuchar un rugido proveniente de Akela, aún qué no lo parezca por dentro estoy que me muero de nervios por lo que paso con aquel rouge. Akela comienza a correr despacio.
-Sujetate bien Alex, todo estará bien- lo puedo escuchar en mi mente gracias a la conexión, hago caso omiso a lo que me dice, cierro los ojos y aprieto mi agarre, siento como el viento choca con mi rostro. Aun se escuchan aullidos, sera que nos estará cazando, muevo un poco mi cabeza dejando que esa idea se vaya.
-Alex no es por asustarte pero alguien nos esta siguiendo- me dice Damon un poco preocupado.
-Que hacemos?, cuando nos falta para llegar a la manada?- lo lleno de preguntas.
-Tranquila, aun nos falta la mitad del camino así que tratare de acelerar el paso- cierra la conexión de una. Abro los ojos, observo a los lados y como el me lo dijo un lobo nos esta siguiendo, es un poco más pequeño que Damon, de color café oscuro, puedo ver sus grandes colmillos a lo lejos, cierro los ojos de una, me siento temblar, lo más probable es que sea gracias a la persecución. De una aquel lobo salta por encima de nosotros quedando del lado derecho, veo sus ojos, me quedo perpleja, yo conozco a ese lobo.
-Akela detente- le grito, siento como se detiene de apoco, me bajo de un salto y corro hacia el lobo que esta a unos metros atrás de nosotros.
-Alex no lo hagas- me grita Damon por la conexión, lo ignoro por completo y sigo a paso seguro, estoy a unos cuantos pasos de él, su mirada esta fija en mi, sus colmillos se asoman, me detengo cuando comienza ha cambias, parpadeo, me quedo helada al ver a la persona que esta enfrente de mi.
-Alex que haces con el?-.
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