Camera [Cashton]

2.0

Ashton. 

Un nuevo día comenzaba y eso significaba una sola cosa. 

Tratar -como lo había hecho durante estos días- de acercarse a Calum, claro que falla miserablemente en cada intento pero mantengo las esperanzas, ya que, cada intento es menos miserable cada vez. (Aunque insisto, sigo fallando)

Mi madre dice que tengo un encanto natural con las personas, claro al parecer él es la excepción  de caer a mis dichos encantos. Conclusión, las madres mienten. 

7:15 am y debo salir de inmediato para tomar el autobús, y allí está él, la persona que se ha convertido en mi crush. (Lo conozco hace apenas unos días, pero a quien le interesa)

- Hey- 

- Hola niño- 

Bufé, y fruncí el ceño al mismo tiempo que hablaba. - No soy un niño, tenemos literalmente la misma edad- 

- Pero tu te ves más inocente y menos jodido- oh, eso es nuevo. 

-  No creo que tú en realidad, estés jodido- mencioné - yo creo que eres más bien, una gran persona escondida en una gran muralla, para protegerse, tal vez- 

- Eres muy bueno observando y analizando gente, ¿verdad?- asentí- Y también te gusta la fotografía. - Oh cielos.

- Creí que lo habías olvidado, para ser sincero- escondí mi rostro entre mis manos y, claro, la sangre subió a mi cara. 

- ¿Cómo crees que olvidaría el día en el que mi vecino me tomó una foto, semidesnudo? Que si me permites mencionar, fue el día que nos conocimos y fue un día genial. - 

- ¿No me odias?- 

-Claro que no, ¿quién sería capaz de odiarte? Te lo dije, te ves muy inocente y eso te hace tierno-

Tú, claro, según mi yo desesperado porque no me hablabas pero ignoremos eso. 

- Oh, creí que lo hacías, ya sabes, no hablas mucho conmigo y sinceramente esta es la conversación más larga en esta semana- 

- Tú hablas mucho, por eso se te hace raro, pero por mi lado soy alguien más del silencio- eso explica muchas cosas, la verdad- Sube- 

Parpadeé un par de veces y me di cuenta que el autobús estaba al frente de nosotros. Calum estaba dejándome pasar para subir y yo aún no reaccionaba. 

- Uhmn sí, claro gracias- me senté y comencé a mirar por la ventana el paisaje de camino a la escuela, de pronto sentí como a mi lado se hundió el asiento por unos momento, miré a mi izquierda y Calum estaba junto a mí. 

Quizás este día no fue un miserable intento fallido.