Everything has changed [Dramione]

Australia.

Habían pasado dos dias de lo que pasó con Ron y, apesar del mal rato, no me sentía tan mal, Draco era la mejor compañía junto con Cissy y honestamente nunca había estado tan cómoda pero justo en aquel momento estaba empacando para irme.
-Mione- Escuche la voz de Draco atravez de la puerta de mi cuarto- puedo pasar?
-Claro, Draco- al pronunciar aquello el entró y miro mi maleta con nostalgia, camino hacia mi y me abrazo con ternura.
- Déjame ir contigo- suspiro y se aferró a mi- No estas segura haya afuera.
-Estare bien- Me paré de puntillas para darle un beso tierno- tu madre te necesita más, aparte yo tendré ayuda del Ministerio para encontrar a mis padres.
Me separe un poco y cerré la maleta, Draco se apresuró a tomarla y me acompañó hacia el vestíbulo donde Cissy nos esperaba, apenas me vio y se apresuró para abrazarme de un modo maternal.
-Recuerda enviarnos cartas con las noticias que tengas, cariño- se separó un poco para mirarme y sonrio- te extrañaré muchísimo, no tanto como Draco pero lo hare.
Mire a Draco de reojo y levantó sus hombros en modo de resignación.
-Gracias por todo, Cissy no te preocupes los mantendré informados- le sonreí a la mujer y abracé por última vez a Draco.
- Te quiero, Dragon
- Te quiero, Herms
Me dirigí a la chimenea con mi maleta en mano tome un poco de polvos flu y dando un último vistazo a la mansión dije claramente- Al Ministerio.
En cuanto sali de la chimenea del Ministerio un chico se apresuró hacia mi.
-Buen día,señorita Granger- Mire a el chico y le sonreí- Soy Gerry, me encargo del departamento de cooperación mágica internacional.
-Buen día, Gerry- Le tendi mi mano y el la estrechó gustoso, mire sus ojos castaños atravez de sus gafas- Un gusto conocerte.
-Lo mismo digo- el chico me dedico una linda sonrisa haciendo que notará los hoyuelos en sus mejillas- Como le informamos previamente, dentro de unos momentos la enviaremos a Sidney pero antes me han solicitado verla.
-Puedo saber quién?
-El jefe del departamento de autores, sigame- hice lo que el chico me pidió aún desconcertada por no saber lo que aquella persona quería de mi.
- Hemos llegado, señorita- El chico señaló  una puerta y me sonrió- Tengo unos asuntos que atender pero en cuanto termine pidale al señor que llame a mi oficina.
-Gracias
Mire a todos lados en busca de Harry o Ron pero no pude encontrarlos, la puerta estaba libre de una placa que pudiera decirme a quien encontraría pero al abrir la puerta mis dudas se aclararon.
-Harry- El azabache se encontraba sentado en el escritorio el cual estaba enmedio de la enorme oficina, al notar mi presencia Harry se puso de pie y vino hacia mi para abrazarme.
-Mione, oh por Merlín estos días sin ti han sido horribles- de pronto me soltó bruscamente- y ahora me entero que te vas, así sin decirme nada- el chico se cruzó de brazos y me miraba molesto.
- No me vengas con reproches, Potter tu sabías que me iría, me dijiste que me visitarías y nada.
- Igual pudiste decirme que te irías hoy, Granger-me crucé de brazos y lo mire- pero claro ahora que sales con Malfoy te olvidas de que tienes un hermano.
Ambos no aguantamos más y comenzamos a reír.
-Tienes que prometerme que en cuanto vuelvas hablaremos, herms- Mire a Harry sin entender- Hablo de Ron, Malfoy y tu.
-Lo prometo Harry
- También prometeme que te cuidaras allá.
-Estare bien Harry
- Si pasa algo sólo envía una lechuza de acuerdo?
- Lo hare-lo mire con una deslumbrante sonrisa- pero cuéntame que tal las cosas en la casa?
La plática con Harry fue tan amena que no me di cuenta en que momento había transcurrido una hora
- Harry como se te ocurre- dije riendo y de pronto mire al reloj- Demonios es tarde, tengo que irme.
-Le enviare un memorándum a Gerry- Escribió un papel y al terminar este se volvio un avioncito el cual salio disparadohacia donde gerry- Trata de no tardar, hermi. 
- Lo intentaré, Harry- Me puse de pie y abrace a Harry por última vez- Cuidate, Harry te quiero
- Yo tambien te quiero- me solté de su abrazo y fui hacia la puerta- cuidate.
Al salir me topé con un par de ojos azules ninguno dijo nada por un momento pero finalmente el hablo.
-Hermi.....-parecía algo apenado-... ya te vas?
-Si, voy de salida-dije un tanto incómoda.
- Oh ya veo- dudo un momento pero finalmente dijo- Espero y encuentres pronto a tus padres, cuidate.
-Gracias, Ron
En ese momento Gery llego y me dedico una sonrisa, mire a Ron y ambos nos abrazamos sin decir nada, supongo que después de todo nuestra amistad podía mas que cualquier cosa.
-Mantente en contacto- dijo al separarnos.
- Lo haré
Después de aquello seguí a Gerry hacia una chimenea.
-Esta chimenea te llevará al Ministerio de Magia de Sydney, Australia- dijo acomodando la corbata de su traje- ahi te encontrarás con Monse y Victoria, ellas te ayudarán a encontrar a tus padres y también te protegeran, tienes alguna duda?
-Creo que no.
-Bien- tomo un poco de polvos flu y me los dio- Sólo Di Sidney
- Gracias por todo, Gerry- dije dedicándole una sonrisa.
- Por nada
- Sidney- dije mientras lanzaba los polvos al suelo y era consumida por las llamas, al salir de la chimenea me encontraba en otro lugar muy parecido al que había dejado, frente a mi se encontraban dos chicas ambas un poco mayores a mi.
-Buenas tardes, señorita Granger- dijo la chica castaña a mi izquierda- Mi nombre es victoria y soy jefa de departamento de cooperación mágica internacional.
-Mucho gusto- dije tendiendo mi mano para que la estrechace con la suya.
- Yo soy Monserat pero puede decirme monse- dijo la chica pelinegra- soy jefa del departamento de aurores, mientras usted este aquí victoria y yo la ayudaremos.
- Muchas gracias- dije estrechando su mano y sonriendo hacia ambas.
-El ministro personalmente nos ha encomendado su caso y cree pertinente que, al menos por este tiempo, usted se hospede en un departamento cerca del Ministerio- hablo Monse - yo vivo un piso abajo asi que estaré al pendiente de su seguridad.
-De acuerdo, Monse
-Bueno si no tiene alguna otra duda dejare que Monse la acompañe a su departamento y mañana temprano las veré a ambas para comenzar la investigación.
- Sigame, señorita-dijo Monse
- Gracias- dije a victoria y seguí a la otra chica hacia afuera del Ministerio.
A juzgar por la apariencia del cielo oscurecer la a mas tardar en una hora, había una diferencia de nueve horas entre Londres y Australia.
-Le molesta si caminamos, señorita Granger?- dijo la chica- solamente son dos cuadras.
- No, me parece bien caminar- dije en tono amable- y puedes llamarme hermione si quieres.
-Esta bien, Hermione.
Seguimos caminando por cinco minutos hasta que llegamos a un edificio de alrededor de 20 pisos y entramos en el.
- Según se soy la única bruja en el edificio- Subió al ascensor y yo la seguí, una vez dentro presionó el botón número 18 y espero pacientemente a llegar al piso, al salir del elevador nos encontramos con un pasillo de dos metros el cual conducía a una puerta de roble.
- Este es tu departamento- dijo tendiendome una llaves- déjame ayudarte con tu maleta en lo que entras.
Tomo mi maleta y abrí la puerta del departamento, era un lugar pequeño pero lujoso, no habia separaciones de paredes ni puertas salvo para el baño  y estaba lleno de aparatos muggles.
-Bueno, señorita Granger dejaré su maleta aquí e ire a mi apartamento abajo-vi como se dirigía a la puerta- mañana pasaré por usted para comenzar la investigación en el ministerio.
Dos semanas después.
-Vamos, herms- dijo Monse a unos metros delante de mi- ya casi llegamos.
Mi corazón latia a mil por hora pero mi cerebro trataba de mantenerse tranquilo, era la decimo septima vez que íbamos a visitar la casa de una pareja que cumplía con la descripción de mis padres, las primeras veces me había ilusionado bastante pero me llevaba unas terribles desilusiones asi que opte por mantenerme tranquila.
Pero nuevamente al timbrar la puerta mi corazón se rompió al ver a la pareja la cual no eran mis padres.
- Herms- Monse me abrazo al llegar al Ministerio- tranquila aún falta mucho por buscar.
- Gracias Monse- toque mis sienes y las masajee un tanto frustrada- Me iré al departamento a descansar.
- Claro hermi- la chica me miraba con algo de tristeza- yo me hare cargo del papeleo aqui.
Me fui de ahí sin decir nada más, llegue al departamento con los ojos llenos de lágrimas, mis manos temblaban mientras tomaba un pergamino  y decidía escribirle a Draco.
Querido Draco:
Los días han pasado sin noticias de mis padres y no quiero darme por vencida asi que posiblemente tendré que estar acá un par de semanas más. No se si suene tonto pero te quiero y me encantaría irme para Londres lo más pronto posible para presentarte a mis padres, se que será raro pero en poco tiempo me acostumbré a tu constante presencia que este tiempo sin ti ha sido extraño.
Un beso hasta el otro lado del mundo.
Te quiere
Tu Leona
Doble la carta y llame al Halcón de Monse,  le puse la carta en el pico y salió volando hacia el pasaje del Ministerio para Londres, sentí mis párpados pesados y me dirigí a la cama para tomar una siesta.
Desperte un tanto aturdida por un ruido que invadía toda la casa, baje por las escaleras y me percaté que era el timbre asi que me apresure a abrir.
- un momento- dije corriendo y abrí la puerta- Draco.....
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Perdónenme si es  malo pero he estado teniendo muchísimos problemas familiares y la inspiración me abandona en estos días.
Los amo un mundo gracias por leerme
Sólo he mencionado a 3 personas pero seguiré agregando mas y saldrán mas veces
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