Capítulo <8>

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La pequeñez que cuelga entre sus piernas

---Hae, Hyuk. Ustedes tienen en sus manos un tesoro muy valioso; equiparado con: sus vidas, su pasión por la música y sus familias---.habló nuestro mayor, usando un tono más conciliador y amable, que el de antes--- Y lo están malogrando de forma irresponsable. No los juzgo, por que los entiendo perfectamente, por que estamos en el mismo medio, bajo las mismas presiones, con políticas laborales absurdas, como la de prohibir tener relaciones amorosas entre hombres y mujeres. Ahora, siendo ustedes dos hombres, con una relación secreta, en esta sociedad terriblemente; homofóbica, hipócrita y doble moralista, es casi suicida. Eso me hace deducir que sus constantes conflictos, donde se hieren mutuamente; son más por descargar sobre el otro, esa pesada carga de inseguridades, que por la situación dada en el momento. Todo en la vida tiene su lado bueno y malo al mismo tiempo. Para muchos, nuestra vida de idols, es perfecta, y, hasta no la envidian, sin siquiera imaginar el infierno que es vivir calculando cada movimiento, como un robot programado exclusivamente para complacer a todos; y al no lograrlo, ya que todos esperan algo diferente de estos robots; entonces nos destruyen como si fuéramos un producto en mal estado. Es imposible e injusto, vivir solo para complacer a los demás. ¡Por Dios, no lo hagan!, por que acabarán destruyendo todo aquello que les ha costado tanto esfuerzo construir, su relación, que más que eso, es un vínculo de: amor, apoyo y comprensión mutuos. Si deciden terminarlo háganlo, pero que sea por que se dieron cuenta, que ya no hay sentimientos del uno por el otro, comparados con los que sentían antes. Si son conscientes de que ya no hay nada por lo que valga la pena luchar, entonces pueden acabarlo, de otra forma no. No empoderen a los que son malditamente infelices, y así mismo quieren ver a los demás. Su relación es valorada siendo un ejemplo para muchos, sin importar; fronteras, idiomas, géneros, por que han logrado mostrar con hechos, que el amor lo puede todo, y no exagero al decir que ustedes son una pieza muy importante del monumento que se erige por encima de cualquiera conocido hasta ahora; el amor, el real, el de los hechos, más que el de las palabras. No en vano han: llorado, reído, caído, levantado, siempre juntos, en las buenas y en las malas. Se conocen mutuamente más, de lo que los puedan conocer sus propias familias, ya que se aman desde que eran casi unos niños, han crecido juntos siendo; hermanos, mejores amigos, compañeros de trabajo, amantes y más que eso, si eso es posible. Si lo arruinan el sufrimiento no será exclusivo de ustedes, lo será también de todos los que los queremos y apoyamos. Ese, es el tesoro del que les hablaba al comienzo. Un tesoro que desearía tener hasta un millonario. Incluso Donald Trump, con gusto le vendería su alma al diablo y hasta la Pequeñez que cuelga entre sus piernas, por tener un ápice de felicidad con su esposa, como la que tienen ustedes dos juntos---una estruendosa carcajada por cuenta de Hae y mía inundó la habitación; por lo de la Pequeñez a la que se refería, Teukie. Hae se me tiro abrazando mis piernas de la risa y yo lo abracé por la cintura. Creo que las palabras del líder comenzaron hacer efecto. Luego de pasado el burlesco momento. Tomé la palabra.
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--Hyung, gracias por esas sabias y acertadas palabras. Pero es que últimamente--- miré de soslayo a Hae, pensando bien lo que iba a decir para evitar incomodarlo---, nos descontrolamos con mucha facilidad y aunque el sentimiento por mi parte sigue intacto e incluso, es más fuerte cada día, en ocasiones no sé....---entiendo tú corazón muy bien, Hyukki--- interrumpió Hae, entrelazado nuestras manos---.Y, yo también te amo cada día más, de hecho siento que mi corazón es pequeño para albergar tanto amor por tí, Pero de igual manera que tú, aveces no encuentro como lidiar con tantas presiones externas. Claro que de ninguna forma, eso excusa mi actitud contigo, pero realmente no sé cómo actuar cuan...--- no lo dejé continuar, lo atraje hacía mí, estrechandolo entre mis brazos. Mi amado bebé Hae Hae. Él es mi vida, mi mundo, mi todo.

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