♡♡Amor Real♡♡

Capítulo <2>

La piedra en el zapato

Después de la ya rutinaria y agradable mañana, nos despedíamos porque teníamos agendas separadas por buena parte del día, pero, nos volveríamos a ver mucho antes de las ocho de la noche, para grabar una entrevista de nuestra subunidad, D&E.

---Cielo, te voy a extrañar las horas que vamos a estar separados---Decía Hae, haciendo uno de sus hermosos y acostumbrados pucheros. Le di un corto pero sustancioso beso.

---Yo también te voy a extrañar, cariño. Te amo, lo ¿sabias?

---No, dímelo mucho, mucho...

---Te amo, te amo, te amo---,ahora fue él quien me beso con mucha más sustancia---luego de separarnos por falta de aire, habló.

---Yo también te amo muchísimo, mi bello Hyukkie---.Lo dijo con esa tierna e infantil sonrisa que me vuelve loco, a veces literalmente. Usé todo mi auto-control, para no caer en la tentación de hacer cosas locamente deliciosas. Así, que lo mejor era alejar al tentador.

---Ya casi es la hora de irnos nene. Cuídate mucho y escríbeme tan pronto llegues, ¿ok?---,le di un pico de despedida.

---Ok. Tu también cuídate mucho y agárrate bien de los árboles, no sea que te vayas a caer y lastimar, mono loco---.Dijo esto acompañado de una sonora risa y aplaudiendo para celebrar su supuesta, genial broma.

---Mira que eres un pez tonto y más tonto, has acabado de arruinar un perfecto y romántico momento---mientras decía esto lo quitaba fingiendo enojo, pero él seguía pegado a mí abrazándome y besando mi mejilla sin parar de reír. En esas estábamos cuando fuimos interrumpidos por una voz fuerte y conocida.

---¡EY!, par de tórtolos ridículos, a trabajar, que a ustedes no les pagan por intentar ser la versión de Romeo y Julieta, gays, Asiáticos---,todos reímos por el comentario sarcástico muy propio de la diva. Heechul y Shindong habían venido en mi busca para avisarme que ya debíamos irnos. Nos despedimos de Hae, y cuando ya había dado como cinco pasos, escuché que me llamaba.

---¡Hyukkie...! Te, amo---,dijo sin emitir sonido, solo gesticulando la frase, y me envío un beso en el aire, hice un movimiento con mi mano como si atrapará el beso en el aire, y luego lo llevé a mis labios y de la misma forma le devolví el te amo, para luego salir corriendo y alcanzar a mis compañeros.

Siete y cuarenta nueve. Miraba de manera ansiosa la hora en la pantalla de mi teléfono móvil mientras le marcaba de manera insistente a Hae, y este, simplemente no respondía.

---¡Puf! ¡Donghae, por Dios!, responde tú bendito teléfono--- llevaba un atraso de casi media hora, cosa extraña en él ya que siempre es muy responsable con su trabajo y sabe perfectamente que debemos estar mucho antes por el tema del maquillaje, vestuario, cuadrar las dinámicas que se implementaran, junto con todo lo concerniente al programa. Seguía insistiendo con las llamadas y mensajes cuando fui informado por alguien del staff, que Hae, ya había llegado y se encontraba en la sala de maquillaje, algo que ya había adelantado yo, al igual que todo lo demás. Respiré aliviado. Entré a la sala de maquillaje y lo vi a través del espejo, él también me miró tímidamente. Le pregunté con la mirada.<¿Todo está bien?>

<Sí, tranquilo>respondió de la misma forma no verbal y compartimos una sonrisa tonta. Todo esto, solo quedó entre nosotros, ya que el resto de personas en el lugar, ni lo percibieron. Luego, mientras esperábamos para empezar a grabar, me contó el motivo de su retraso.

---Lo siento Hyukkie, es que justo antes de salir, dejé caer sin querer mi teléfono móvil y perdí tiempo intentando hacer que funcionara y...---por que no me sorprende---le interrumpí de manera irónica la explicación.

---¡Ay, mi Hae¡ eres la torpeza y el despistamiento personificados. Es algo que ya forma parte de tu esencia, ¿no?---,me dio una mirada con aparente enojo y dijo.

---Y tú, imbécil, ¿qué, don perfecto?---para luego sacarme la lengua. Le devolví el gesto, y los dos reímos de manera divertida hasta que nos avisaron que empezaríamos la grabación.

La entrevista inició todo normal. Lo de siempre, hablamos sobre nuestra reciente producción discográfica, algunos juegos para probar cuanto nos conocemos, respondimos algunas preguntas de las fans nacionales e internacionales, previamente seleccionadas por el equipo de producción del programa. Nada diferente a lo acostumbrado. Y, de repente, llegó como piedra en el zapato, la molesta pregunta que derrumbaría como efecto dominó, el perfecto castillo.