Solo es un perro [ Yaoi ]

Capítulo 5 (Parte 1)

La luz del sol se asomó por la ventana anunciando que ya había amanecido, aún que casi no se podía divisar ya que las cortinas se encontraban cerradas. En circunstancias normales despierto a causa de alguna alarma o por el canto de los pajaros, pero esta vez fue debido a una respiración en mi cuello. Abrí lentamente los ojos mientras apretaba algo a lo cual estaba abrazando. Poco a poco fui despertando, y al comprender de que se trataba, o mejor dicho de quien se trataba, me sonrojé a tal punto en que sentía mis mejillas arder. Lancé inconscientemente un grito que despertó a Derek, el cual comenzó a gritar también mientras se sonrojaba peor que yo. A los pocos segundos llegó Lucy a la habitación, asustada, sosteniendo una bate de béisbol con ambas manos.

- CHICOS NO TEMAN YO LOS PROTEJ-... ¿Eh? -Dejó caer el bate al suelo, sorprendida-. Vaya, esperaba que se llevaran bien, pero jamás creí que sería tan rápido..

- N-No es lo que parece! -Me levanté rápidamente-.

- P-Perdón! J-Juro que no fue a propósito! -Grito el pelinegro a la vez que cubría su sonrojado rostro con sus manos-. E-Estaba dormido y me confundí de cama después de ir al b-baño por la noche..

- Y-Ya lo escuchaste, solo fue un mal entendido. -Dije rascando mi cabeza con una leve sonrisa-.

Lucy solo reía mientras se apoyaba en el marco de la puerta para no perder el equilibrio, incluso podría afirmar que lágrimas empezaban a brotar de sus ojos por tanto reir.

- Okey, okey! Les creo, les creo! -Recogió su bate y secó sus lágrimas con su manga-. Pero si un día de estos los encuentro sin ropa no sé como me van a convencer de que fue un accidente eh! -Se notaba que hacía un gran esfuerzo por aguantar la risa-.

Antes de que le pudiera responder algo, se retiró hacia la cocina. Di un pequeño suspiro y me acerqué a la venta para abrir las cortinas.

- L-Lo lamento.. -Quitó sus manos de su cara e infló sus mejillas mientras miraba hacia el lado-.

- No te preocupes, los accidentes pasan. -Voltee a verlo, sonriendo. Nuestras miradas se cruzaron por un segundo haciendo que se sonrojara un poco mas-.

- No volverá a pasar, lo prometo..

Se levantó y salió de la habitación, yo me quedé unos minutos viendo por la ventana y luego me vestí. Justo cuando terminé se escuchó la voz de Lucy desde otra habitación.

- Alex! Está listo el desayuno, ven a comer!

Obedecí yendo hacia donde estaba ella, en otras palabras, me dirigí al comedor y posteriormente me senté en una de las sillas.
En la mesa habían tres platos con waffles, tres vasos con jugo de naranja y cosas para agregarle a los waffles como mermelada o miel. Todo se veía y olía delicioso.

- Wow, no sabía que eras tan buena cocinera. -Dije mientras probaba mi plato-.

- Wow, no sabía que tu y mi hermano se amarian ran rápido.

Escupí el jugo, el cual recién estaba probando. A los segundo después escuché la risa de Lucy.

- ¿Dijeron algo sobre mi? -Justo llegó Derek y se sento a mi lado a comer-.

- No era nada, no te preocupes. ¿VERDAD? -Miré a Lucy con cara de asesino. Creo que logré mi objetivo de darle miedo porque dejó de reir.

- Ehh.. Si! No era nada importante hermanito! -Sonrío, y se sentó a comer con nosotros-.

- Si tu lo dices.. -No levantó la vista en ningún momento-.

Al terminar de comer, aleje un poco mi plato, apoyé mis codos sobre la mesa y suspiré.

- Ya pensaste en que harás con respecto a tus estudios? No quiero presionarte ni nada.. Solo me interesa saberlo. -Se le notaba preocupada-.

- No lo sé, supongo que contrataré a un profesor privado porque no creo que me acepten a estas alturas en algún Instituto. Además no me falta mucho para que tenga que entrar a una universidad.

- No suena como una mala idea. Así aprovecharias de quedarte a cuidar la casa. -Sonrío-. A mi solo me queda un año para despedirme de todos esos vejetes.

- ¿Y a qué universidad piensas ir? -La miré con curiosidad-.

- Hay una que no queda muy lejos de aquí, y dicen que los profesores son excelentes así que.. Sería genial si logro quedar ahí.

- Tienes excelentes calificaciones, dudo que te cueste mucho. -Bostece, cubriendo mi boca-.

- Si, supongo -Se encogió de hombros-. Si quieres te puedo ayudar a encontrar un profesor, dicen que llegan nuevos de otras ciudades todos los años.

De repente sonó la puerta como si alguien la estuviera rasguñando, iba a levantarme para ver de que se trataba pero Derek se adelantó así que me quedé sentado. Tiempo después el pelinegro volvió sorprendido.

- Que pas-..? -Iba a preguntar hasta que vi que en sus brazos traía un perro-.

- Lo encontré sentado en la entrada, se ve bastante cariñoso. -Decía mientras el pomerania le lamia la cara, luego lo dejó en el suelo y este caminó hacia Lucy. La cual estaba tan sorprendida como yo-. ¿Nos lo podemos quedar?