Capítulo 25

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Luego de unas horas llegamos al mismo pueblo aburrido de siempre, Erick me dedicó una sonrisa y un abrazo cuando llegamos a mi casa.

—Supongo que es el fin de la aventura del fin de semana —dijo mientras se cruzaba de brazos, reí.

—Supongo, y creo que es tiempo de confiar en mis instintos y...

—¿Tratar de definir la gravedad? —lo miré con los ojos bien abiertos, como lo sabía?— Aunque no lo creas me gustan los musicales —y luego de haber dicho eso camino hasta su carro, hizo una despedidaza con la mano y desapareció por la calle. Recostada en la puerta mi mente comenzó a hacer todo tipo de pensamientos, creo que era tiempo.

Tal vez todos ustedes conocen una historia, El Mago de Oz, que narra como Dorothy terminó en el extraño mundo de Oz, luego de haber sido arrastrada por un tornado, como al llegar su casa mata a la bruja mala de Este, y como la bruja buena del norte le da las zapatillas de la pobre bruja muerta y la guía al castillo del mago de Oz, quién la ayudará a volver a casa siguiendo el camino el amarillo. Y ahí el papel antagonista lo hacela Bruja Mala del Oeste, Elphaba. Bueno, pues otros conoceran el musical Wicked, el cual nos deja ver la historia desde otro ángulo, por que Elphaba tenía que ser la mala? Todo lo que ella quería era recuperar las zapatillas de su hermana muerta.

Ahora se preguntaran, que tiene que ver este musical conmigo, con mi historia. Bueno, el musical narra la historia desde antes de que Dorothy llegara a Oz, narra como Elphaba era rechazada en al escuela por tener piel de color verde, y como ella estaba enamorada de Fiyero, pero el era el más popular, y tenía que ser novio de Glenda, la bruja buena del norte, quien también era la más popular. Ya ven la coincidencia?

Bueno, solo que Gwen y yo nunca seremos amigas, al contrarió de Elphaba y Glenda, que al final terminan siendo mejores amigas, al parecer ya me alejé un poco de la historia. Pero ya regresando a mi, a mi historia, a la historia donde yo soy Elphaba, Gwen es Glenda y Zabdiel es Fiyero. Creo que es tiempo de liberarme, de dejar de seguir las reglas del juego de otros, por que no puedo hacer algo? Solo por que alguien dice que no? Pues ya no lo permitiré, trataré de definir la gravedad si yo quiero, y nadie, absolutamente nadie, me hará cambiar de opinión.

Es tiempo de que deje todos los prejuicios, los límites, los temores, las torturas, que deje todo lo malo atrás y que al fin...

—Sea libre... —dije y corrí, corrí a un lugar donde siempre tenía paz, donde tarde o temprano terminaría. Pasé frente a la casa de Yocelyn, creí haberla oído gritar mi nombre y haber salido de su casa con intención de detenerme, corrí aún más rápido. Pude oír las voces, eran Richard y Yocelyn quienes seguían corriendo detrás de mi, no me detendrían no ahora.

Llegué al parque, ahora solo era llegar al otro lado... Seguí corriendo y los gritos seguían detrás de mi. Frente a mi por fin estaba el lago, a un lado la banca de siempre, la banca donde pasé tarde junto a ella, donde descubri la verdad, donde fui feliz. Lágrimas comenzaban a juntarse en mis ojos, no podía permitir que cayeran, no ahora, no ahora que por fin me liberaría. Corrí a esa banca de siempre, a esa banca donde siguen nuestras iniciales en una esquina, me subí a ella.

—_______ —oí a Yocelyn y a Richard decir luego de llegar detrás de mi, les hice una señal con la mano para que callaran, tenía que hacerlo, era ahora o nunca. Recordé todos esos momentos con ella, todos esos momentos de felicidad, como me contó su sueño, como fue ella la que ayudo que yo creara ese sueño de cantar, como fue y siempre sera ella mi ejemplo a seguir. Recordé la letra, la música y simplemente canté....

—I'M THROUGH ACCEPTING LIMITS CAUSE SOMEONE SAYS THEY'RE SO.

SOME THINGS I CANNOT CHANGE, BUT TILL I TRY, I'LL NEVER KNOW!

TOO LONG I'VE BEEN AFRAID OF LOSING LOVE I GUESS I'VE LOST

WELL, IF THAT'S LOVE, IT COMES AT MUCH TOO HIGH A COST!

KISS ME GOODBYE, I'M DEFYING GRAVITY, I THINK I'LL TRY DEFYING GRAVITY AND YOU WONT BRING ME DOWN!

Y luego de cantar eso me deje caer, a la grama, en un golpe seco, todo comenzó a dolerme y las lágrimas por fin salieron de mis ojos, pero lo había logrado, había prometido a mi misma internarlo, de alguna manera le había hecho una promesa también a ella, era mi momento, ahora era mi turno, y yo lo lograría.

—_______ —dijo Yocelyn y me ayudó a sentarme en la grama para sentarse luego junto a mi— sabemos que no fuiste tú... —dijo en un susurro, la miré.

—Nunca pensé que dudarían de mi...

—¡PERO ES QUE ERA MUY LÓGICO! Creeme que yo... yo no quise creerlo al principio pero ella metió la duda en mi cabeza y ¡OH _______ PERDONAME! —me pidió apunto de llorar.

—No te preocupes, te perdono —le dije y la abraze, puede que ella haya dudado de mi, pero no puedo culparla, yo era una persona débil, manipulable, pero ahora todo se acabó— Y necesitaré tu ayuda, su ayuda —dije y miré a Richard, el se sentó al lado mío.

—Simpre cuentas con nuestra ayuda _______.

—Quiero decirle la verdad a Zabdiel... —dije de un solo, sin suavizar mis palabras, directa. Richard no entendió nada, pero Yocelyn entendió todo.

—¡OH POR DIOS! Pero no puedes decirselo así nomas, tienes que retomar esa amistad que estaban comenzando a tener y y... y le tienes que explicar quien es ese tal Emanuel, ya que enfureció al saber que estabas con él —miré a Yocelyn con ojos de asombro, había sido Zabdiel el que había llamado, al que Emanuel le había contestado, el debe de saber ya, que no fui yo quien revelo el secreto.

Y asi nos quedamos durante una hora, Yocelyn y yo planeando la mejor manera y el momento en que al fin le diria a Zabdiel la verdad, y Richard, el no entendió ni siquiera que verdad.

Ahora sé que en el fondo, siempre tuve este valor escondido, lo único que necesitaba era alguien que...que me digera que podía. Me creerían si les digiera, que creo que en el fondo fueron Emanuel y Erick los que me hicieron abrir los ojos, a ellos les debo todo lo que haré, y creo que incluso todo lo que lograré...

NARRA ESCRITORA

Mientras tanto, a unas cuadras del parque, en una casa que con tan solo verla sabías que adentro vivían personas frías y superficiales, se encontraban Zabdiel, tratando de encontrar el valor para decir lo que diría a continuacion.

—Entonces Zabdiel, que querías decirme- dijo Gwen mientras jugaba con su tonto cabello rubio.

—Gwen, quieres ser mi... mi novia? —dijo Zabdiel a regañadientes, y nervioso, Gwen por un momento no supo que decir, lo había logrado, Zabdiel le estaba pidiendo ser su novia.

—¡CLARO ZABDI! —gritó y se abalanzó sobre el, lo besó... "LABIOS FRÍOS, QUE SIMPLEMENTE NO SE ADAPTAN A LOS MÍOS" dijo una vocecita en el fondo de la mente de Zabdiel.

Pero ahora de que servía, Gwen y Zabdiel eran novios..

Mi Cenicienta Dezcalza |Zabdiel De Jesús| [adaptada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora