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Llegué a mi trabajo mientras intentaba evitar a mis compañeros de trabajo quienes me invadian de preguntas del porque estaba golpeado y ese tipo de cosas.

Emma entró y me saludó alegremente pero su expresión cambió de repente cuando vio mi estado, ella era amiga del jefe del local por lo que le rogó por una llamada que me dejará este día libre y aunque yo me negará ella siguio insistiendo y terminé comiendo helado con ella.

-_¿Qué pasó...?-_Me dijo después de un breve silencio.

Sabía que negarlo todo iba ser inútil, Emma insistiria hasta que le contase la verdad.

Sin más remedio le conté todo lo sucedido, ella me miró mientras hacía una mueca de expresión.

-_¿Y si te vas conmigo?-_Su pregunta me sorprendió y le miré confundido.

Me removi en mi asiento y hablé-_ ¿De qué hablas?-_Ella sólo sonrió.

-_Antes de tener está vida...-_Suspiró-_Tenía otro nombre, otra familia, todo era diferente... Había mucho sufrimiento en mi vida, mi hermana me odiaba y me hacía una vida imposible... Entre otras cosas, tenía a una persona que amé demasiado-_Sonrío-_No en el modo romántico pero si en cuanto amistad, yo tenía a Alexander y tú tienes a Sandra, ven conmigo y te deja de vivir con tú padre, yo misma me encargaré de tud gastos y...-_Negué rápidamente.

-_No, no quiero molestarte y además...
No quiero dejar sola a mi madre, viviré un infierno si así puedo protegerla, no dejaré a mi madre con ese sujetó...-_Emma me miró con tristeza.

-_Está bien, pero...-_Sonrió nuevamente-_Al menos, piensalo. Me iré en unos dos meses...-_Se paró de su asiento-_Ahora vayamos al doctor para que te curen tus heridas, ¿Vale? -_Emma era increíblemente amable.

Tal vez...
Sólo tal vez, esa noche pensé en irme con ella y dejar todo esto atrás.

¡Hey, Idiota!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora