Capítulo diez.

475 13 0
                                    

-Jesús cielo,¿esta aquí Sara?

-Sí Ma,¿Por qué?

-Veras,es que tiene que volver a Dos Hermanas,la abuela falleció,dile que se valla preparado.

Jesús me miró con los ojos bañados en lágrimas y al verme llorando,se abalanzó a mis brazos llorando.Yo no podía verlo así,me dolía mucho asique,de alguna manera,intenté calmarlo.

-Eh mi niño,no pasa nada.

-Soy gafe Sara,desde que estas conmigo te a pasado de todo,lo siento mucho,no valgo para nada.

-Pero,¿Qué dices?eres perfecto,es mas,no te merezco siquiera,eres lo mejor que hay,lloras por algo que no debes,mi abuela ya era mayor,no pasa nada,anda va,sonríe,saca esa sonrisa con la que me enamoraste esta mañana,te quiero mi pequeño.

Jesús me miró,le sequé las lágrimas y lo besé.

-¿Cómo demonios se te puede querer tanto?

-No sé,dimelo tu,que eres la que en un minuto me hizo parar de llorar.

Justo nos íbamos a volver a besar, cuando mi madre entró para decirme que nos ibamos.Jesús empezó a hacerme pucheros con la boca,estaba tan adorable,que decidí reaccionar por impulsos de mi corazón.

-Mamá,este es Jesús,mi novio,vendrá con nosotros a casa a pasar el verano empezando por hoy.

Mi madre me miró pensando que era una broma,pero al ver que no,accedió.

-Jesús,haz la maleta.Sara,salimos en media hora,ayudalo.

Mi madre salió del cuarto y Jesús me dió un abrazo.

-Eres muy grande,pequeña.

-Te quiero,espera,tengo que avisar a Marina.

Fui a decírselo a Marina,y ella decidió pasar el verano con Dani. Ya estaba todo aclarado,así que volví a la habitación de Jesús para ayudarle a hacer las maletas.

Amor doble.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora