Destiny

Capítulo 8.

Esta vez si Artemisa paso sus manos por el pecho desnudo de Draco y sus brazos, soltó un leve gemido al sentir como la boca del chico se apoderaba de sus pechos. Draco comenzaba a mover su lengua por el pezón de la chica y a morderlo moderadas veces, todas las chicas de Hogwarts (mas que nada las Slytherins) querían creer querian creer que Draco era virgen cuando no era así, ese año había perdido aquella pureza que toda persona llega a tener y también experimento varias experiencia con distintas chicas.
Era bueno en lo que hacia y el cuerpo de Artemisa lo sabía, cada vez que la lengua de Draco pasaba por su cuerpo o cada vez que sus dedos recorrían su piel soltaba al menos un gemido, parecía muy experimentado en todo aquello que hacia y lo era.

Artemisa ya no aguantaba mas y Draco tampoco, el chico fue pasando su mano por debajo del pantalón de la chica hasta poder retirárselo por completo y dejarla simplemente en bragas, Artemisa hizo movimiento son sus caderas apegando su feminidad a el miembro de Draco sacando del chico un gemido rasposo.
Sonrió de lado y comenzó a besar el cuello del mismo mientras el rubio bajaba ya las bragas de ella.

Ninguno podía aguantar más, se deseaban, Artemisa no había visto en ningún momento a Draco de aquella forma tampoco pensaba o tenia en sus planes acostarse con el, eso simplemente había sucedido y sin mas, no se arrepentía, Draco bufo apenas, estaba deseando ese momento desde que aquella sexy profesora había cruzado la puerta de su casa, la erección entre sus piernes lo demostraba, era simplemente ganas de sexo con ella, era demasiado atractiva nadie podía negar eso y el famoso príncipe de Slytherin se acostaría con la profesora que todos deseaban, eso si seria algo para contar.

Artemisa bajo los boxers de Draco encontrándose con aquel miembro erecto que para tener 15 años el tamaño estaba mas que perfecto, se notaba que el chico ya no podía aguantar más y Artemisa tampoco lo soportaba mas, así que empujo con sus caderas a Draco golpeando su feminidad nuevamente con el miembro del chico.

Artemisa agarro el miembro de Draco causándole un gemido bastante sonoro y lo posiciono en su entrada dándole así el permiso al chico.
Draco estaba mas que excitado y cada toque que su profesora le hacia le provocaba aún más placer, cuando sintió que su miembro ya estaba en la húmeda entrada de la mayor la penetro de una sola estocada.

---Mierda, Draco.---Soltó un gemido produciendo que el chico de 15 años se sienta aun mas excitado de lo que ya estaba.
Cada estocada y movimiento que el rubio hacia era un golpe de inmenso placer para ambos cuerpo, estaban calientes, se estaban besando y ambos se sentían seguros uno con el otro, tañían confianza a pesar de que solo llevaban unas tres semanas conociéndose.
Artemisa siento como Draco se venia dentro de ella y el posaba su cabeza en el hombro de la chica, Draco estaba cansado pero sastifecho.

•••
Ambos volvieron al castillo haciendo como si nada había pasado, Artemisa camino hasta encontrarse con Potter y sus amigos en la biblioteca que en seguida la llamaron para completar aquella charla que en la mañana habían tenido.

---Chicos ¿Que sucede?---Pregunto Artemisa mientras se sentaba y escuchaba lo que decían.

---¿Como podemos confiar en ti? Hasta hace unos años era la mejor mortifaga en las filas de Voldemort.---Granger siempre hablando de ello y buscando cada detalle.

---Y lo sigo siendo, soy la mejor en defensa contra las artes oscuras y si me necesitan estare a su disposición.---Suspiro apenas y se levanto para irse de allí, los niños dudaron un poco ante ello.

---Espera...---Era la voz de Potter, Artemisa freno y los miro.---Te necesitamos y queremos que nos ayudes pero si sabes algún lugar donde podremos hacer las clases sin que se enteren seria mejor.---

---Yo se donde...En la sala de manesteres.---Soltó mientras se cruzaba de brazos.---

---¿La que?---Preguntó Weasley.

---La sala que viene y va..---Cuando noto que los niños no sabia de que hablaba les explico mejor.--- es una habitación que una persona sólo puede entrar cuando tienen una necesidad real. A veces está ahí, y a veces no lo está, pero cuando aparece, siempre está preparada para las necesidades del buscador.

Los tres niños asintieron y ella les saludo para despedirse mientras comenzaba a caminar se choco con otra cabellera pelirroja, uno de los gemelos Weasley, para algunas personas seria difícil identificarlo pero para ella no lo era.
Weasley no había notado quien estaba delante de el pues venia con su libro de bromas, hasta que había chocado con su profesora favorita.

---Weasley, que raro siempre distraído...---Sujeto el libro que había caído y lo miro..."Libro de bromas."---Podría ayudarte en algunas cosas de estas...

Fred no pudo evitar soltar una sonrisa, ahora tendría una compañera de bromas...