Celos ¿el plan perfecto? | Jaemin / Jeno

Fase 2 coqueteo II

Era probable que el color de mi rostro se hubiese esfumado. Intenté seguir caminando los pocos pasos que quedaban hasta llegar a mi mesa pero era imposible, no podía apartar mi vista de la escena que se estaba desarrollando frente a mí. Jaemin estaba sentado en su silla mientras que el cuerpo de Momo estaba sentado sobre sus piernas. Ella le miraba a la cara y le acariciaba el pelo mientras intentaba darle algo de comer. Estaba coqueteando con Jaemin y él le sonreía. La bilis estaba provocando dolor en mi garganta. Noté como apretaba los puños agarrando cada vez más fuerte la bandeja. Tenía que salir de aquí. Comencé a andar hasta llegar a mi mesa, dejé la bandeja bruscamente y mis amigos me miraron con cara interrogativa.

-Me encuentro mal voy a ir un rato a la cabaña, luego os veo.

Seguí mi camino, necesitaba irme de allí, estar sola un rato. Intentaba borrar la imagen de mi cabeza pero como una pesadilla se repetía una y otra vez. ¿Pero que me importaba a mí sí Jaemin estaba o no con Momo o si se liaba con ella o si coqueteaban? No me gusta Jaemin eso está claro porque mi corazón sigue pensando en Jeno pero entonces ¿por qué estoy celosa? No, no pueden ser celos. Llegué a la cabaña y me tiré en la cama. No puedo estar celosa, nunca me han gustado los celos. Pero verlos ahí tan juntos me da coraje, pensar que puede tener la misma confianza con ella que conmigo me molesta. Además siempre me dio a entender que la gente como ellas y en concreto ese grupo no les gustaba. Quizás soy yo que le estoy dando demasiadas vueltas a la cabeza. Pero me gustaría tanto poder olvidar lo que he visto. En ese momento la puerta de la cabaña se abrió y dos figuras humanas entraron dentro. Renjun y Doyeon se colocaron al lado de la cama.

-¿Qué te pasa de repente?

-No se, me he mareado un poco y he decidido acostarme un poco.

-Ya, y ese mareo repentino no tendrá nada que ver con la escenita que estaban montando Jaemin y Momo en la cafetería.

-¿Qué? No los he visto.

-Arrugas la nariz cuando mientes. Estás celosa.

-¿Cómo voy a estar celosa de Jaemin? Estáis locos. Lo digo en serio.

-Vale yo solo me remito a los hechos. Veremos en que acaba esto.

La tarde pasó entre actividades. Tuvimos que hacer una búsqueda del tesoro y otras cosas más típicas de campamento. No estuve demasiado concentrada e intenté evitar cualquier contacto con Jeno o Jaemin. Quizás lo mejor era dejar todo este juego y alejarme de todos para evitar cualquier problema más. Pero no quería eso en el fondo. Las actividades acabaron y después de ir a ducharnos y cambiarnos nos reunimos todos en el comedor para cenar. Nos sentamos juntos el grupo prácticamente entero incluyendo a Jaemin y quitando a Jeno. Intentaba parecer normal con él, como si nada me hubiese dolido pero apenas me salía. Cuando la cena terminó como el día anterior la gente se quedó charlando y yo también lo hice. Me lo pasé bastante bien pero no puedo negar que estaba un poco incómoda a veces. Llegó la hora de ir a la cama y los cuatro nos acostamos pero mi cabeza no paraba de pensar y le era imposible quedarse dormida. Bajé de mi cama después de dar treinta vueltas entre las sábanas y decidí que aunque estaba prohibido quizás me vendría bien un paseo. Salí de la cabaña, fuera todo estaba bastante oscuro, caminé un poco relajándome gracias al silencio de la noche. Llegué a la piscina que era la zona más iluminada ya que había varios focos en la zona. El movimiento de las ondas en el agua me tranquilizaba así que me senté en el borde mojando mis pies. Un ruido detrás mía me asustó y casi me hace caer al agua hasta que me di cuenta de que era Jaemin.

-Me has asustado.

-Parece que se me da bien asustarte.

-Sí. Quiero estar sola un rato, por eso he venido.