VI: Oculus Reparo.

152 13 0
                                    

Querido Ron, y Harry, si estás ahí:

Espero que todo saliera bien y que Harry esté estupendamente, y que no hayas tenido que saltarte las normas para sacarlo, Ron, porque eso traería problemas también a Harry. He estado muy preocupada y, si Harry está bien, te ruego que me escribas lo antes posible para contármelo, aunque quizá sería mejor que usaras otra lechuza, porque creo que ésta no aguantará un viaje más.

Por supuesto, estoy muy atareada con los deberes escolares y el próximo miércoles nos vamos a Londres a comprar los nuevos libros. ¿Por qué no quedamos en el callejón Diagon?

Cuéntenme qué ha pasado en cuanto puedan. Un beso de

Hermione

Hermione se encontraba más preocupada que nunca, saber que había una gran posibilidad de que Harry se metiera en problemas le angustiaba. Solo le quedaba esperar.

Y así fue, pasaron los días y aún no tenía respuesta al respecto. Hasta que una noche mientras terminaba sus deberes escucho como algo tocaba su ventana. 

— ¡Hedwig! — Hermione salió corriendo abrir su ventana y dar paso a la lechuza. — Ven, toma. — Le dio un poco de comida mientras cogía la carta.

Querida Hermione:

Todo salió bien aunque un poco complicado. Te contaré cuando nos veamos el próximo miércoles, así que disculpa la tardanza pero es que Ron y yo hemos estado haciendo muchas cosas.

También me gustaría que me dieras un resumen de todas esas cartas que me enviaste y no pude recibir, esa es otra historia, para resumirlo un elfo domestico llamado Dobby las robo y no pude recuperarlas.

P.D: Por cierto, debes darme otro regalo ya que el que me enviaste no lo recibí.

P.D.2: ¡¡ES BROMA!!

Con amor,

Harry.

Fue un alivio para ella que Harry no hubiera recibido la última carta que le llego a enviar pero a la vez un poco triste que no le haya llegado el regalo que le envió para su cumpleaños. 

Pasaron los días y llego el miércoles, Hermione se fue con sus padres a Gringotts. No podía calmar mucho la alegría que tenía al volver a ver sus amigos. De camino a Gringotts Hermione pudo ver a un hombre muy grande, barbudo y con muchas greñas y sin dudarlo sabía que era Hagrid pero el corazón se le detuvo al ver quién se encontraba a su lado, aquel chico azabache se encontraba ahí frente sus ojos y sin dudarlo decidió llamarlo. 

—¡Harry! ¡Harry! ¡Aquí!

Harry vio a Hermione  en lo alto de las escaleras de Gringotts. Ella bajó corriendo a su encuentro, con su espesa cabellera castaña al viento.

—¿Qué les ha pasado a tus gafas? ¿Necesita que te los reparé? — Y sin esperar repuesta Hermione simplemente dijo el hechizo. — Oculus Reparo.

— Definitivamente necesito recordar eso. —Harry se quedo sin aliento.

—Hola, Hagrid. ¡Cuánto me alegro de volver a veros! ¿Vienes a Gringotts, Harry?

—Tan pronto como encuentre a los Weasley —respondió Harry.

—No tendrás que esperar mucho —dijo Hagrid con una sonrisa.

En caso de duda ve con Hermione.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora