Autor Desconocido (Pausa)

Capitulo 2: Una historia que contar

Parte 1: El principio del fin

"El destino nos rompe como si fuéramos de cristal u nuestros pedazos nunca más vuelven a unirse"
- Al-Ma'arri.

Está historia se trata sobre mí, Wyatt, no es una historia feliz, es mi pasado, es todo lo que trato de olvidar y ocultar, es lo que tengo miedo de mostrar, pero ya no, ya no más. Es hora de hablar, es hora de escribir.

Mi historia no es el típico cuento cliché, no es solo una historia de dolor, es de un sufrimiento que va más allá de lo físico y lo emocional. No trato hacer que nadie me tenga lastima, escribo únicamente esto para desahogarme, y además no hay sentimiento que me parezca mas repudiable que la lastima o la falsa compasión, esta es mi historia, es mi pasado y presente, no quiero que un día morir y ser recordado como un mártir.

¿Por qué hago esto?
Supongo que un día moriré y alguien vera esto, o se lo daré a alguien de confianza para que preserve mi legado, y no quiero que se den malas interpretaciones.

Ahora sin más preámbulos les relatare mi historia, desde sus inicios, desde cuando todo comenzó, desde que la luz de mi alma por fin se apagó.

Me levante temprano en la mañana el día, era un día como cualquier otro, ese día iba a la escuela, me apresure rápidamente a bañarme para posteriormente vestirme y tomar el desayuno que mi abuela me había hecho.

-. Buenos días hijo. – Dijo mi abuela con una sonrisa, ella era ya una señora de edad, pero muy bien conservada, su cabello de un tono de negro brillante con algunas canas que se mostraban entre sus cabellos, su rostro el cual mostraba solo unas pocas arrugas, y esos ojos de color miel que me miraban como si fuera el más bello tesoro.
-. Buenos días mami. – Le dije con una sonrisa, para posteriormente darle un beso en la frente.

Mi abuela siempre había cuidado de mi desde que era muy pequeño, mi mamá trabajaba muy duro todos los días para traer la comida a la casa, igual que mi padre, ambos pasaban trabajando la mayor parte del tiempo. Mi abuela se había encargado de cuidarme, ella me acompañaba a la escuela y luego iba traerme.

-. Es hora de irnos. – Me dijo ella. – ¿Llevas todo?
-. Si.
-. Está bien vámonos.

La escuela no quedaba muy lejos de mi casa, eran alrededor de 10 a 15 minutos caminando. Cuando al fin llegamos a la escuela ella me despidió.

-. Nos vemos hijo. – Acto seguido me dio un beso en la frente.
-. Nos vemos. – Le dije para después darle un abrazo y luego adentrarme a mi lugar de estudios.

La escuela en la que estaba no era muy grande, pero era acogedora, el ambiente era agradable, solo un profesor nos daba algo de terror pues era muy estricto, nada del otro mundo. Me llevaba bien con la mayoría del salón, como es costumbre siempre hay unos que son más amigos con unos que con otros, yo también tenía un pequeño grupo de amigos, o eso creía, para ser sincero siempre creí que me excluían, siempre sentí una especie de rechazo de ellos hacia mi persona, pero nunca le prestaba atención a eso.

El día transcurrió con regularidad, llego la hora de salir y espere a que llegara mi abuela para irnos y cuando llego caminamos juntos a casa, yo le iba contando detalles de mi día a ella y entre otras cosas e ideas, faltaba un poco más de un mes para navidad y eso me emocionaba.

Al llegar a la casa me doy con la sorpresa de que mis padres estaban, yo estaba un poco extrañado, pero de igual forma fui a saludarlos con abrazo.

-. Hola madre. – le dije con una sonrisa.
-. Hola hijo. – Me dijo y por su tono de voz pude notar como algo no estaba del todo bien.

Luego fui corriendo a mi padre y simplemente le di un gran abrazo, el cual el me correspondió, podía notar que algo estaba raro entre ellos, desde pequeño siempre he sido muy receptivo con las emociones de los demás, siempre he notado cuando alguien está mal en su estado de ánimo o cuando había algo que causaba un tipo de conflicto o tensión en el ambiente y esta era una situación de ese tipo, pero la ignore en mi "hogar" habían constantemente todo tipo de discusiones o problemas y esto no era nuevo para mí, simplemente fui a mi habitación y permanecí ahí el resto de la tarde.

Oscuro, todo era oscuridad todo al mi alrededor estaba muy oscuro tenía miedo, mucho miedo, algo no estaba bien en esa oscuridad me sentía observado, odiaba la oscuridad, siempre le he tenido mucho miedo.

*Desperté*

Al parecer todo había sido un sueño, creo haber tenido ese sueño antes, pero al decir verdad no le daba importancia, pensaba que era solo una pesadilla.

Después de que la rara sensación de ese sueño se fuera, escuche unos gritos, al parecer mis padres estaban discutiendo de nuevo, eso me deprimía mucho, pero trataba de estar lo más feliz posible para alegrar el ambiente, intentaba sonreír para que los demás lo hicieran.

Salí de mi habitación para dirigirme a la sala de estar, ahí se encontraba mi abuela y mi hermano viendo televisión, ellos trataban de no mostrarle atención a la discusión de mis padres y yo me les uní.

Luego todo paso muy rápido, mi mamá salió de su habitación y dijo algo, pero no lograba entender nada, en ese momento para mí todo era muy surreal, me sentía en una especie de limbo, veía como se comenzaban a llevar unas cosas y nos íbamos, nos íbamos, pero ¿A dónde?, no entendía que pasaba, pero mi padre, ¿Dónde estaba el?, no había salido de la habitación, él no iba con nosotros, ¿qué estaba pasando?

Llegamos a otra casa, la cual era más grande, y se comenzó a incorporar todo al instante, yo estaba sin entender nada, pero no preguntaba, algo me decía que no debía de hacerlo y solo me callé y ordenaba mis cosas, dentro de mi había mucha tristeza, algo me decía que no volvería a ver a mi padre en mucho tiempo.

Una vez ya incorporados mi madre nos presentó a alguien, alguien que no mencionare ya que su existencia no me importa en lo más mínimo.

Este es el comienzo de mi historia, mientras escribo estas palabras mi mente se llena de recuerdos, muchos de los cuales quiero olvidar, ese fue el inicio de mi fin, era un niño que siempre sonreía, era algo que siempre admire y al mismo tiempo odie de mí, no me explico cómo a pesar de ser un niño era tan fuerte, el mundo podía estar cayendo a mi alrededor, pero yo siempre buscaba una razón para sonreír y casi siempre era la misma, lo hacía por los demás, no quería que nadie estuviera triste, no me importaba que por dentro estuviera a punto de llorar, iba a sonreír, iba a mostrarme lo más alegre posible para que los que quiero también lo estén. Me gustaría hablar con aquel niño por un segundo y decirle que estaba bien llorar, que estaba bien preguntar el porqué de las cosas, que no se guardara todo aquello, que eso le ocasionaría mucho daño, pero no puedo hacer nada, el fin comenzó.

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Tus miedos te controlan,
tus nervios te envuelven
pides a gritos una explicación
pero solo puedes sonreír.

La tristeza invade tu ser,
el frío abraza tu piel,
sé que hoy quieres llorar,
pero a tu lagrimas no dejas escapar.

¿por qué no te dejas ser?
¿por qué no te puedes liberar?
en tu mente un extraño serás,
y preso de tu sonrisa siempre estarás    

– Autor Desconocido.

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Hola amigos de wattpad, hoy iniciamos con el segundo capitulo de Autor Desconocido, "Una Historia Que Contar", espero que les guste, espero traerles pronto la segunda parte de este capitulo.

Como siempre quiero agradecerles mucho el apoyo que me dan, de verdad lo aprecio mucho, les mando un gran abrazo y hasta el próximo capitulo, los quiero.

  – DanielJ. Fajardo