Cierro los ojos escuchando los primeros acordes de esa canción y puedo sentir que estás junto a mi manejando, puedo ver aún la madrugada y la carretera vacía, puedo oírnos cantando rumbo a mi casa donde besos tuyos recargado en tu auto me esperaban. Cierro los ojos mientras la escucho y puedo sentir la emoción de las madrugadas contigo oyendo esa canción a todo volumen en repeat, amas esa canción y la pusiste hasta el cansancio hasta que me la aprendí y terminé amándola. El coro, la voz del vocalista, las guitarras, todo, todo me hace cerrar los ojos y sentir que vamos rumbo a casa en la madrugada.
Vamos sin platicar, cantando y en el último semáforo antes de mi casa quiero besarte pero no me atrevo, prefiero esperar hasta llegar a casa, a que te desates el cinturón de seguridad y bajes del carro para abrazarme y besarme recargado en la puerta del carro, no importaba el frío, no importaba la hora, no importaba si llovía, todas las despedidas eran iguales. Pasaba mis brazos por tu cintura y me recargaba en tu cuello. Nos reíamos de cosas estúpidas y nos quedábamos un rato así fueran las tres de la mañana, éramos la madrugada la lámpara del poste junto a mi casa, tus besos y mi felicidad.
Escuchar esa canción me hace sentirte cerca, me hace sentirte vívidamente junto a mi si cierro con fuerza los ojos, apenas puedo sentirte a mi lado.
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Relatos a ratos de un corazón roto
Romantik--esa realidad ya no existe, lo que viviste con el ya pasó. Hoy, la realidad es que estás aquí sentada en terapia diciéndome que se fue.
