Andree
Había sangre por todos lados. En las paredes, el techo; en todo el cuerpo de Carrie.
La fiesta que antes había estado en bullicio ahora está en silencio. Todos están mirando horrorizados a Carrie, y una chica no tarda en gritar de horror. La gente comienza a correr de la casa y al final los que quedamos somos Carrie, Jolene, Wade y yo.
Nos acercamos corriendo al lugar donde estaba Carrie y no pudimos evitar salpicarnos también. Hubiera gritado, si no hubiera sabido al instante que era falsa.
—¿Que ironía, no? Carrie, sangre... ya sabes —dijo Wade, señalando todo el cuerpo de Carrie.
—¿Puedo tomarte una foto? —pregunto Jolene —. Esto se verá épico en un futuro
—Una palabra más —sentenció Carrie, con su dedo índice —, y todos se mueren, ¿entendido?
Prefería no decir nada. Esto era totalmente mi culpa, estaba segura. Ahora iban a ir contra todos nosotros.
Después de que la casa se hubiera vaciado completamente, Jolene y yo ayudamos a Carrie a limpiarse. Wade había salido corriendo a avisarles a los demás y claro, enseñarles las fotos de que tomó Jolene.
Llegamos a las 2 am a casa de Carrie. Dimos pocas explicaciones a su madre -que por suerte, su padre estaba de viaje- y nos quedamos a dormir ahí.
****
Lunes.
El receso acababa de comenzar y me encontraba con todo nuestro grupo, excepto Alex; el no había aparecido en toda la mañana. Jolene, Wade y yo habíamos contado la fiesta con lujo de detalle a los demás.
—¿La sangre era falsa entonces? —preguntó Moon, por quinta vez.
—No. Había cabras sacrificadas al rededor y Carrie estaba parada en un pentagrama —dijo Jolene, a punto de golpearlo.
—Yo sacrificaré a la persona que hizo eso, ¡arruinó mi vestido negro! —exclamó Carrie.
—Corazón —le dije, presionando su hombro —: tienes cinco iguales.
—¡Era mi favorito! —Carrie se paró de la mesa gritando.
Mike y Wade la tomaron de los hombros para que se volvieran a sentar. Me masajeo las sienes. Esta situación se estaba saliendo de control y más, los exámenes, era la cosa más estresante que había vivido.
Seguimos conversando de un plan para saber quién estaba detrás de todo esto, pero literalmente, no sabíamos nada, sólo teníamos la evidencia de Maggie, quien había sido chantajeada. Era una persona que nos conocía a todos, pero vamos, ¿a quién conocíamos nosotros?
El receso pasó y los chicos llegaron a un acuerdo. Ellos no tenían clases a partir de las 10:40 am, así que, en lugar de irse, irían a buscar pistas mientras jugaban pokemon go.
Eran las diez de la mañana y nosotras estábamos en nuestro respectivo salón.
—Compañeras —Chloe nos llamó a todas.
Todas la miramos. Se veía un poco sería.
—¿Qué sucede? —preguntó Jolene.
—Me tiré un gas.
Todas bufamos. Y cada quién le proporcionó un golpe. Habíamos creído que se trataba del tema del que todas estábamos pendientes.
—No mames —dije, en español.
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Frikis, ¡al ataque!
HumorClases sociales. Todos vivimos de ellas, son elementales en cualquier lugar en el que estamos, pero sobre todo en la escuela. Ese lugar donde lo más importante para todos es ser popular, pareciera que su único labor es dividirnos como humanos. Los d...