Capítulo Diecinueve. (Parte Uno)

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Los días, las semanas continuaron así, Jimin y yo nos hacíamos más unidos, Tae y yo éramos dos extraños, todos viviendo en una misma casa. Woo nos vio besándonos a Jimin y a mi en la cocina, yo preparaba una sopa, Jimin un postre que incluía helado, comenzamos a jugar con la comida, hacía tanto que no me reía, a pesar del dolor que me provocó el aspirar tanto aire, comencé a toser, Jimin se me acercó para sobarme la espalda, me abrazó y comencé a llorar, mi vida no sería la misma, la que algún día fue, ya no podría divertirme, me sentía triste, por breves momentos me había sentido feliz con Jimin jugando, pero todo lo bueno duraba poco, después de abrazarme Jimin me besó, me lo comí a besos, estaba muy necesitado de amor, Woo nos vio, fue discreto, pero al salir de la cocina, su celular sonó, por lo que Jimin y yo nos separamos, los dos miramos a Woo, no dijo nada, de hecho quien le llamaba era Tae.

-Woo.

-...

-El Doctor Park está en la cocina, preparando algo de comer para Jungkook.

-...

-¿Jungkook?

Woo me miró, mis piernas temblaron, me agarré de la barra de la cocina con ambas manos, Jimin me sujetó de la cadera, pero ninguno de los dos dejaba de ver a Woo.

-Él está durmiendo en su cuarto.

-...

-Si, lo acabo de ver, y aquí estoy con el Doctor Park.

-...

-De acuerdo, te veo mañana.

Woo colgó el teléfono

-Tae no llegará hasta la madrugada y yo saldré a menos que necesites algo Jungkook.

-...Gracias Woo, no, no necesito nada.

-Bien.

-Woo...

-Dime Jungkook.

-...De verdad. Gracias.

-Jungkook... Intenta buscar tu felicidad, tal vez no puedas salir de esta prisión,  pero inténtalo, después de todo la felicidad está más cerca de lo que creías. Nos vemos mañana.

Woo se fue, Jimin y yo nos abrazamos, terminamos de hacer la comida y Jimin estaba comiéndose el postre que preparaba.

-¿No deberías comer el postre después de comer?

-Nho mhe molehstes.

-Deja de hablar con la boca llena.

-¿Quhieres?

Jimin se acercó y me besó con los labios llenos de helado, un beso frio,  pero sin duda muy rico, combinación perfecta helado y Jimin.

-Jungkook, ¿Qué es ese cuarto?

-...ve a verlo.

-¿No prefieres mostrármelo tu?

-Prefiero no entrar ahí.

-¿Por qué? ¿Qué hay?

-... recuerdos, mentiras...

Jimin me m2iro, había tristeza en su mirada, pero intentó sonreírme.

-¿Ya está la comida?

-Puedes ir a ver.

-No si a ti te afecta tanto. No me interesa.

Suspiré, sabía que Jimin tenía curiosidad, tal vez solo estaba aburrido, estar las veinticuatro horas del día, siete días de la semana encerrado no era para él, para mi era usual, pero para él era cansado, antes de que Tae me golpeara Jimin salía, ahora se queda encerrado conmigo todos los días tratando de cuidarme, me lavé, me sequé las manos, lo tomé de la mano y lo llevé al cuarto que Tae había construido para mí.

-Wooow es bellísimo

-Si, lo es.

-Jungkook... entiendo que tus recuerdos pueden ser buenos o malos, pero ver el sol, las estrellas... eso podría ayudar a tu salud.

-¿A cuál? ¿A la física o a la moral?

-Ambas, puedes crear nuevos recuerdos en los mismos lugares. ¿Tae te pegó en esta habitación?

-No.

-¿Lo hicieron aquí?...

No pude evitar reírme por la cara que puso Jimin.

-¿Estás celoso?

-¿En verdad crees que me causa un poco de alegría que Tae te folle?

-...No. Discúlpame, no lo pregunté con esa intensión, pero No, Tae y yo nunca follamos aquí, pero si la pasamos muy bien, de hecho fue uno de los mejores momentos que viví con él.

-Es un bello lugar.

-Lo es.

Jimin se fue a sentar a un sillón y miró el cielo, lo seguí e hice lo mismo, realmente el cielo se veía hermoso, era un día soleado con pocas nubes, pero corría mucho aire así que las nubes se movían y hacían cambios de formas.

-Me gusta esa.

-Si, es linda parece un elefante.

-Nooo, parece un triceratops

-¿Seguro que vemos la misma nube?

-Eso creo.

-Jimin... Puedes salir, puedes seguir con tu vida, tu rutina.

-...

-Es decir, no es necesario que estés encerrado siempre. Woo dijo que Tae vendrá en la madrugada, puedes salir, pasear, comprar...

-¿No me quieres cerca?

-¡NO! Yo no dije eso, quiero que te diviertas, no te quiero atado aquí conmigo.

-Estoy donde quiero estar.

Jimin se levantó y se paseó por el cuarto, lo había hecho enojar y esa no era mi intensión, me levanté del sillón y me dirigí hacía él, lo abracé por la espalda, estaba tenso y con los brazos cruzados, siempre que se ponía así es porque estaba enojado. Ya lo conocía bien.

-Perdóname, te quiero cerca de mí, pero sin lastimarte, sin obligarte a estar donde no quieres estar.

-Aún no lo entiendes, quiero estar aquí, quiero estar junto a ti, no necesito salir, ni hacer nada, soy feliz estando a tu lado. Aunque eso implique...

-Lo sé y me duele verte así.

Se giró a verme, sabía que iba a besarme, pero simplemente no pude, di un paso atrás, bajé la mirada y me senté en la cama que estaba a un lado de nosotros, Jimin se puso de rodillas frente a mí.

-Sabes que me gustas, sabes que no estoy obligado a quedarme, sin embargo, quiero hacerlo ¿Por qué no me permites acercarme a ti un poco más? Sabes lo mucho que te quiero, tal vez no te lo había dicho, pero te lo he demostrado, y si no lo decía era por miedo a tu rechazo.

-...

-¿Jungkook, sientes algo por mí? ¿O solo es que mi compañía te agrada? Necesito saberlo.

-...No tengo nada que ofrecerte.

-No te pregunté eso.

-Siento todo por ti... no solo me agrada tu compañía, sino que la necesito, pero no quiero que estés conmigo por lástima.

-¿Lástima?

Jimin entre cerro los ojos y después frunció el ceño.

-Aclárame porque podría tener lástima de ti. ¿Por qué un idiota te trata mal? ¿Y tú te dejas? Creo que está claro que no tienes opción.

-No es por eso.

-Entonces dime, ¿Por qué podría tener lástima?

-Porque me ves frágil y porque cada que me miras y curas mis heridas te doy asco, pero gana tu lastima.

-Que poco me conoces Jungkook. Jamás te he mirado con lástima y jamás me has dado asco, si cada que curo una de tus heridas me ves desviar la mirada... es porque...

-¿Por qué?

-Porque deseo besarlas...

Estamos en la recta final y será un final inesperado!
Gracias por leer.

Puro de corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora