Desde ese beso, la situación entre Chris y yo ha tomado un poco de espacio. En parte porque le he pedido una explicación por eso y me dijo que era un impulso, que con todo lo que ha sucedido y que yo le parezco una chica valiente, lo ha llevado a cometer ese acto. Está bien, uno entiende que con la adrenalina encima es capaz de hacer cualquier cosa, pero tampoco era para llegar a ese extremo.
De todas formas, sacando ese impulso estúpido, cada que nos encontramos de regreso al piso, hablamos de lo más normal. Ya no se muestra con el entrecejo fruncido, se lo ve sonriente. Eso me agrada, porque por lo menos sé que no me va a tirar mala espina, en parte quisiera saber porque se lo ve tan contento. Y no, no es por mí, he estado haciéndome esa idea pero siento que es algo estúpido, tal vez tiene alguna alegría callejera de vez en cuando y por eso anda así.
Bueno, anoche me ha dicho que agradece haber vuelto a su departamento y encontrarse con alguien tan sensacional que vive a su lado; juro que no he parado de sonrojarme en todo lo que restaba de la noche, en verdad ese tipo me tiene como una colegiala, y eso que solo ha sido un beso.
Me levanto de la cama al decidir que debo dejar de pensar en eso, no tengo que hacerme el cuento. ¡Solo ha sido un beso! ¡Solo uno! Bueno, ¿Acaso se necesita solo uno para desatar toda una calamidad en tu cabeza? Al parecer sí, porque él me ha dejado pensando en un montón de cosas desde ese momento, en muchas, bastantes, extensas, incomprendidas. ¡Ves! Ya estás con cualquier cosa.
Levanto la ropa sucia que hay a mi alrededor y los coloco sobre la cama hasta que salga de la habitación, y me voy a dar un baño. Salgo media hora después con una toalla en la cabeza y la bata, decido salir con la montaña de ropa y la llevo al cesto de mimbre en donde acumulo la ropa sucia para lavarla después.
Empiezo a tararear una canción que no recuerdo cuál es pero que de todas maneras la entono, camino por el pasillo a paso tranquilo, pensando en que hoy es fin de semana y debo hacer el aseo para poder tener todo ordenado durante la semana. Ingreso al living y voy abrir la ventana, al hacerlo veo que la de Chris permanece cerrada, tal vez aún sigue durmiendo. Me dirijo a la cocina y comienzo a prepararme el desayuno.
El día se comienza con una buena taza de café y tostadas. Pongo la cafetera y salgo de la cocina quitándome la toalla de la cabeza, la llevo hasta el cesto y voy a servirme el café. Me masajeo el cabello un poco y voy a la mesa con todo lo que necesito para desayunar bien. Lo hago tranquila, las vacaciones me sientan bien en esta época, porque el frío es lo que más me encanta y puedo disfrutar de la nieve sin el apuro que te produce el trabajo.
Cuando termino de desayunar, decido ir a cambiarme para ordenar un poco. Paso por la ventana y me detengo al ver que la del vecino está abierta de par en par, entonces me asomo para saludarle con un grito; me encuentro sonriendo al aire y saco la cabeza hacía afuera: cuando estoy por gritar, ahogo el mismo al ver lo siguiente.
Chris retrocede mientras toma las muñecas de una mujer, ella se ríe y se levanta para besarle los labios, él parece negarse al principio pero luego acepta y sonríe. La tipa lo abraza y Vélez lleva sus manos a sus mejillas, la aparta y le mira a los ojos, se queda mirándola un rato.
Yo ya tengo el ceño fruncido y mis labios tiemblan, ¿Acaso es la novia? Trago saliva, me siento terriblemente confundida y camino para atrás intentando olvidar lo que he visto por la ventana. Parpadeo varias veces queriendo caer en la realidad, tomo un gran respiro y camino hacia la habitación. Entonces... ¿Tiene novia? ¿Es una chica cualquiera? No, no tengo que hacerme drama por esto, él y yo no somos nada, y solo ha sido un beso.
Sí, solo eso, no hay nada más entre nosotros, somos vecinos; así que no hay nada más, nada.
Y yo aquí, pretendiendo que lo que me decía era algo verdadero, ¡Pero claro! Solo eran halagos para caerle bien, o tal vez solo quería hacerse el simpático conmigo como lo hace con todas, ¡Ay, dios! ¡Es que no puedo ser más estúpida!
Me golpeo la frente con la palma de la mano y produce un sonido bastante idiota. Me caigo en la cama pesadamente, tengo que dejar de armarme el cuento antes de que me lo destruyan. Luego de haber visto eso, me encierro en mi departamento por unas seis horas; cuando mi hogar está reluciente debido a la extensa limpieza, me siento conforme y decido tomar un poco de aire nuevo ya que el polvo y la basura acumulada me hacen sentir una vieja.
Una hora después, salgo del departamento impecable. Voy para el centro, necesito distraerme con algo o voy a perder la cordura. Me detengo en la esquina para saber qué voy a tomar; si el bus o un taxi.
— ¿Vas alguna parte? —volteo y me encuentro con el amigo de Christopher, me sonríe y se la devuelvo. — ¿A dónde vas sin mi amigo?
—No tengo ninguna relación con él, así que no me vincules. —le digo adrede, él enarca una ceja y se acerca hasta ponerse frente a mí. —Oh... Lo siento. Estoy por ir al centro, necesito despejarme un poco. ¿Tú?
—Pensaba visitar a Chris. — ¿Acaso no tiene otra cosa que hacer que frecuentar el departamento de su amigo? —Pero... veo que tú necesitas algo de contención, ¿O me equivoco?
Le quedo mirando seria, ¿Cómo se dio cuenta? Me sonríe y yo bajo la mirada, sintiéndome apenada y avergonzada de ser tan obvia con mis expresiones. Accedo a su propuesta, entonces empezamos a caminar, el centro no queda tan lejos pero yo decía de tomar el bus para hacer camino corto.
— ¿Qué es lo que te atormenta? —pregunta Erick mientras me observa, yo tomo aire y decido mentirle, aunque esos rumores estaban algo cerca de la verdad. — ¿Es Chris?
Me río por eso, niego con la cabeza y hacemos contacto visual. —No es eso, pero debo decir que él jamás descansa para las fiestas íntimas. —me mira sin comprender. —Me refiero a la compañía.
Él hace la expresión de haber entendido mi mensaje, yo pienso que después de esto mi vecino se va a enterar. A la mierda, no estoy diciendo nada malo, aunque también quisiera preguntarle a Erick si sabe sobre sus relaciones sentimentales, si tiene novia o alguna chica por ahí. Pero luego lo pienso mejor, no tengo porque pedir explicaciones, es su vida y yo no soy nada para él; solo ha sido un beso impulsivo, nada de declaraciones de amor o matrimonio.
—No siempre ha sido así. —me dice. —De hecho, Chris siempre cae en esos jueguitos de acompañantes cuando lo está pasando realmente mal.
Le miro confundida, ¿A qué se refiere con eso? Nos detenemos en otra esquina debido al cambio de semáforo y yo corro algunos mechones de mi rostro que me obstruyen la vista.
—No entiendo. —digo con curiosidad.
—Cuando sabe que es algo realmente grande y que en verdad lo siente, necesita ponerse a prueba; no lo sé, es como si quisiera jugar con su mente para ver si su cabeza lo está traicionando, no sé si me entiendes. —Yo miro adelante, asintiendo, intentando comprender lo que me quiere decir con eso. Puede ser que Chris esté seguro de algo pero se pone a prueba con situaciones como esas, pero... ¿De qué quiere estar seguro? —No entiendo como es que no lo sabes.
Volteo a mirarle luego de cuestionarme. Él me sonríe y sus ojos claros me hacen sentir algo mejor.
— ¿Saber qué? —pregunto aún más confusa, se ríe y camina.
Veo como se aleja y me concentro en su nuca cuando está lejos, gira su cabeza y me mira por sobre su hombro, me hace una seña con la misma para que le siga y yo, con la intriga y el suspenso encima, lo hago para buscar una respuesta más concreta.
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Departamento A [ADAPTACIÓN | CNCO | CHRISTOPHER X Lectora]
FanfictionEsta historia es una ADAPTACIÓN. Lamento si en algunas partes no coincide con el Real Chris. A petición de mi prima CNCOWNER, les traigo una historia de Christopher (al final me terminé enganchando jajajaj)