Though I Can't See You (Chaennie G!P)

Capítulo 15

Al volver a casa, lo primero que hice fue llamar a Jisoo para contarle sobre mi reciente noviazgo con Jennie. Al principio dudé si decírselo por miedo a cómo reaccionaría, pero después de todo es mi mejor amiga y necesitaría darle una explicación sobre la inclusión de Jennie en la salida de mañana, y no quería mentirle; además, tampoco planeaba esconderme de ella. Al principio se sorprendió por el repentino cambio de opinión de Jennie y me advirtió de que tuviera cuidado debido a su aparente bipolaridad. Luego del típico sermon ya esperado de su parte, soltó un par de gritos fangirls de felicidad por nosotras y nos deseó lo mejor. Luego de quedarnos hablando un par de horas, se despidió de mí hasta mañana en la noche, no sin antes decir que si se enteraba de que Jennie me hacía daño iría ella misma a producirle otro tipo de discapacidad (un poco agresiva de su parte, a fin de cuentas la bipolar es ella, pero bueno, así es Jisoo y así la quiero).

Aquella tarde invertí casi todo mi tiempo en arreglarme.

Había elegido un vestido blanco holgado y corto de piernas para verme un poco más alta de lo que en realidad era. Tenía que trabajar el metro sesenta que medía.

Me ricé el pelo meticulosamente y lo cepillé para crear ondas suaves.

Nunca se verían como las preciosas ondas de Dahyun, pero no se veían tan mal. Me delineé los ojos por la línea de las pestañas de arriba y me puse máscara para pestañas, coloqué rubor rosa en mis mejillas y un bálsamo labial de color rosa pálido.

Me di un vistazo antes de ponerme las zapatillas plateadas de tacón que había comprado en una rebaja hacía casi un mes.

Lucía bien. Tenía mucho tiempo sin conseguir verme bien y aquella noche, estaba segura que podría arrancar un par de cumplidos de Jisoo.

Ella siempre lucía espectacular.

Era el tipo de chica que, así usara unos vaqueros roídos y nada de maquillaje, lucía bien.

- ¡Rosé!, ¡Jisoo está aquí! - gritó mi madre desde la planta baja.

- ¡Ya voy! - respondí mientras tomaba mi chaqueta de mezclilla y mi bolso.

Besé las mejillas de mi padre al verlo sentado en la sala escuchando la tele.

- Diviértete, corazón. No llegues muy tarde - me dijo con una sonrisa tímida en los labios.

- Claro, papá - dije sonriendo.

Caminé hacia la entrada y pude ver a mi madre charlando cómodamente con Jisoo.

- ¡Dios!, ¡Estás preciosa Rosé! - chilló mi amiga al verla.

Una sonrisa tímida surcó mis labios mientras me ruborizaba.

Mi madre me entregó la llave del candado de la entrada y me deseó suerte. Salimos por la puerta y pude ver el jeep rojo oscuro que conducía Lisa.

- ¡Diviértanse! - gritó mi madre desde la puerta.

Subí al coche y pude ver a Lisa sentada del lado del conductor.

- ¡H-Hola Lisa! - tartamudeé intentando sonar tranquila.

- Buenas noches Rosé - dijo ella amablemente mirándome por el espejo retrovisor.

Jisoo subió a su lado y arrancamos rumbo a casa de Jennie.

Comencé a darle indicaciones a Lisa sobre cómo llegar pero ella sonrió mientras decía - He ido a casa de Jennie antes.

Me ruboricé por completo. Era obvio que había estado ahí antes pero ni siquiera me había pasado por la cabeza.