Un Amor para Eiji

Pequeña cita

- Fuji... - dijo serio.

Lo conocia muy bien, asique daba por hecho que no se rendiria tan facilmente a la idea de intentar algo con ella. Una vez que se interesaba en alguien era muy dificil sacarle la idea de la mente, a pesar de que alguno de sus compañero tambien este intersado en la misma persona.

- Fuji... - repitio pensativo su amigo - Tambien note sus intenciones... - continuo con preocupacion. Ya se estaba imaginando de ante mano que las cosas entre estos dos se pondrian un poco tensas.

- Que debo hace ? - pidio un consejo. Fuji tambien era su amigo, y no tenia intenciones de pelearse con el, pero sabia lo obstinado que podia llegar a ser.

- Esta claro... si realmente te interesa, debes luchar por ella... no le permitas salirse con la suya. - respondio con certeza. Tambien lo conocia, y a pesar de que sentia mucho respeto por el, en este tipo de cuestiones podia volverse un gran fastidio. No era agradable que Fuji les "robe" a todas las chicas, ni bien oportunidad se le presentaba. No era culpa suya ser atractivo para las mujeres, pero si lo era sacar provecho de ello y esta vez no seria el caso, debian darle una leccion.

- Tienes razon... - finalizo con seguridad. Sus sentimientos por ella eran puros y no permitiria que nadie se entrometiera, ni le hiciera daño.

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Al dia siguiente se levantaron temprano para aprovechar el dia. Por lo que decidieron ir a las canchas callejeras a probar suerte y encontrar a alguien interesante con quien jugar dobles.

Pero antes decidieron ir por Ariana para que conociera el lugar, seguramente quedaria fascinada. Asique en un punto estrategico, cercano a ambas casas, acordaron encontrarse.

- Hola !!... perdon por el retraso. - saludo la muchacha, corriendo hasta su encuentro pues estaba llegando un poco tarde.

- Que raro de ti llegar tarde... - comento divertido Oishi.

- Si, lo siento... es que tube un problema con mi Peque... - se disculpo nuevamente.

- Le paso algo ?? - se preocupo Eiji.

- No... tranquilo... esta muy bien!. Es que queria venir conmigo. Bueno, en realidad cuando se entero que estarias tu, quizo venir... entonces como no sabia a donde iriamos, preferi no traerlo... se quedo llorando pobrecito... - comento con dulzura por la tierna rabieta de su pequeño hermano.

- Pobrecito... lo hubieras traido igual!! - respondio con tristeza Eiji, compadeciendose del pequeño. Adoraba pasar tiempo con el.

- Si ... es que te quiere mucho... - añadio sonriente la joven.

- Con todo gusto lo hubiera cuidado... - respondio con amabilidad.

- Lo se... tienen buena quimica ustedes dos... - comento, mientras lo miraba intensamente.

- No solo con el... - añadio, sosteniendole la mirada haciendose entender. El mensaje fue captado perfectamente por ella, dejando escapar una pequeña risa complice como respuesta.

Oishi se vio obligado a tocer fuerte para resaltar su presencia, ya se estaba sintiendo desplazado, como si esos dos se hubieran olvidado de su existencia. Todabia les quedaba viaje hasta las canchas y no queria perder mas tiempo.

- Perdon que los moleste... pero nos podemos ir ya ? - pregunto en tono ironico.

Los jovenes se sonrojaron levemente por la discreta llamada de atencion de su amigo. Asintieron con la cabeza y emprendieron la marcha.


Una vez llegaron al lugar, se encontraron con un mar de gente. Como eran vacaciones, muchos aficionados al tenis se acercaban a jugar, por lo que se armaban partidos realmente interesantes.

Ariana quedo realmente fascinada con el lugar. Se respiraba un aire amigablemente-competitivo que la motivaba mucho.

- Suichiro!, Eiji!... tiempo sin verlos! - los recibio Ann Tachibana al verlos llegar.

- Hola, Ann !! - saludaron amistosamente.

- Viene a probar suerte en dobles, no? - comento curiosa.

- Asi es... pero veo que hay mucha gente... espero podamos jugar. - comento Oishi mientras echaba un vistazo a las canchas.

- No se preocupen, yo les conseguire un partido... no creo que exista posibilidad de que alguien se pierda la oportunidad de jugar contra el duo de oro de Seigaku. - afirmo con entusiasmo.

Ariana estaba impresionada con la joven chica que los habia recibido, pues se notaba que conocia muy bien el lugar. Ademas, tambien le llamo mucho la atencion la fama y reputacion que decia poseer los muchachos.

- Ann !... te presento a Ariana Mori, es una nueva amiga, su familia se mudo este verano e ira al instituto con nosotros. - recordo Oishi presentar a su amiga.

- Mucho gusto!! yo soy Ann Tachibana - saludo sonriente.

- Mucho gusto Ann ! - devolvio el saludo con alegria. En tan pocos segundos de conocerse ya le habia caido muy bien. Presentia que podian llegar a ser muy buenas amigas.

- Ven Ariana... te mostrare el lugar... - dijo la joven Tachibana, tomandola del brazo llevandosela practicamente a la rastra.

Ariana accedio a la insistencia de la joven, pero antes intercambio miradas con Eiji, el sonrio, asintiendo con la cabeza para tranquilizarla. Entonces con mucho entusiasmo se fue a conocer el lugar.

Mientras tanto, los muchachos decidieron recorrer las canchas. Alli se encontraron con compañeros de otras escuelas y demas conocidos con quienes se quedaron conversando, para pasar el rato, a la espera de poder jugar.
Pero les llamo mucho la atencion los gritos que provenian de una cancha cercana, donde un joven muy energico jugaba dobles con un joven prodigio, quienes eran mas bien una pareja "dispareja", pero que a su manera funcionaban muy bien, a veces. Se trataba ni mas ni menos que de sus compañeros de equipo, Momochiro y Echizen.
Este par ya era habitue del lugar, acostumbraban a venir por distintos retos y causar alborotos en el mismo. Se podria decir, que eran unos "busca pleito", pero siempre a nivel tenistico.

- Mira que par mas interesante nos vinimos a encontrar aqui... - comento Eiji.

- Era de suponerse... siempre andan por estos lados... - sonrio Oishi.

- Que te parece si les pedimos el siguiente turno ? - animo Eiji a su compañero. Recibiendo una sonrisa gustosa por parte de este, como afirmacion.


Momochiro y Echizen no tardaron mucho en liquidar el partido que estaban jugando, y ya estaba exigiendo otro:

- Y bien??... alguien mas quiere intentarlo ?? - desafio Momochiro al aire.

- Nosotros quisieramos intentarlo - alzo la mano Eiji para anunciarse.

- Vaya, vaya... que sorpresa ustedes por aca... - se sorprendio gratamente Momo.

- Si. Venimos en busca de un poco de diversion... que dicen ? - continuo desafiante Eiji.

Momo solto una risa divertida por el atrevimiento de su compañero, buscando la mirada de su pareja de dobles para saber si opinion. Obviamente este le respondio con una sonrisa arrogante, escondida detras de la vicera de su gorra, y exclamo:

- Esto va a ser interesante... - se sonrio.

- Esta bien... juguemos - dijo Momo muy motivado.

Pactado el partido, tomaron sus raquetas y se dirijieron a la cancha. A su vez, la gente se empezo a amontonar, acomodandose alrededor de la misma para disfrutar del partido, pasando la voz del acontecimiento. Por lo que, rapidamente dichos rumores llegaron a los oidos de las muchachas, que ni bien se enteraron de lo ocurrido, corrieron hasta la cancha para ganar un buen lugar y asi disfrutar de lo que seria un partido muy interesante.

- Ya los habias visto jugar ? - pregunto Ann con simpatia.

- Si!... me invitaron al primer entrenamiento... ahi los conoci a todos, son excelentes!... Aunque, esta es la primera vez que los vere jugar en dobles - respondio con entusiasmo. Estaba muy emocionada.

- Y, cual te gusta ?? ... - pregunto con disimulo, pues era una pregunta capciosa.

- Que... cual me gusta ???... - repitio nerviosa.

- Si... cual te gusta... como jugador... - insistio mas clara.

- Ah! si... bueno... son todos muy buenos en realidad, y de estilos muy diferentes... es difil elegir solo a uno...- respondio con alivio, tratando de esconder que en realidad se habia puesto nerviosa.

Debido a esta respuesta Ann simplemente le sonrio, le parecio una muchacha muy dulce. Tenia sus sospechas, pues era muy intuitiva, pero prefirio dejar hasta ahi su interrogatorio, solo por el hecho de que el partido daria inicio.


Tener un partido de dobles contra el duo de oro, no era algo que sucedia todos los dias, asique Momochiro y Echizen disfrutaron al maximo cada instante que duro. Aprendiendo lo mas que podian y perfeccionandose ellos mismos como pareja de tenis. Mas alla de las bromas arrogantes que pudieran decirles, sentian gran respeto por ellos.
Al igual que el publico, despertando euforia en los presentes debido al talento de los cuatro jugadores, dando lo maximo en cada jugada. A ninguno le gustaba perder.

Entre la multitud de gente, se escuchaban los gritos de Ariana alentando a sus nuevos amigos, pero sobre todo a Suichiro y Eiji. Ann tambien se sumo a los gritos de ella para apoyarlos, se sintio contagiada de su energia tan alegre.
Pero, tanta algarabia llamo la atencion de personas indeseables. Unos muchachos que estaban presenciando el partido, desviaron su atencion en ellas, sobre todo uno en particular que parecia ser el "lider" del resto, quien se acerco a Ariana con ciertas intenciones:

- Hola preciosa... estas sola? - saludo interesado. Recibiendo una simple mirada de indiferencia por parte de ella. - Vamos... no seas asi, solo quiero charlar... - se acerco aun mas.

- No, no esta sola... - interrumpio Ann. Percatandose de sus intenciones.

- Oh! lo siento... dos hermosas jovenes solas?. Debe ser mi dia de suerte... quien se resistiria a tan agradable compañia... podriamos hacer algo muy interesante - se deleito con ambas.

- Disculpa... estamos viendo el partido - se puso seria Ariana, no le gustaba nada ese tipo.

- Son perdedores... yo puedo enseñarte cosas mucho mas interesantes... - volvio a acercarse peligrosamente.

Ariana lo miro de forma amenazante, y Eiji lo noto. A pesar de que estaba muy concentrado en el juego, no la perdio de vista, y no le gusto nada de lo que estaba viendo. Oishi y los demas tambien se dieron cuenta.

- Hermosa... no te pongas celosa... yo estoy para ti... podemos conocernos y pasarla muy bien - se acerco otro a Ann.

- Lo dudo mucho... los unicos perdedores aqui son ustedes ! - respondio indignada Ann.

- Niña tonta... sera mejor que cooperes, o las cosas se pondran dificiles... - dijo atrevidamente tomandola fuertemente de la muñeca, para doblegarla.

- Que demonios haces idiota!! - se sobresalto Ariana en defenza de Ann. Empujando al tipo lo mas lejos que pudo.

- Que miedo... la gatita saco las garras... me encantan las chicas como tu...- insistio con ella, el "lider" del resto. Tomandola ahora a ella por las muñecas, acercandola a la fuerza. Ariana sin pensarlo dos veces, lo golpeo en el pecho con todas sus fuerza para sacarselo de encima. Despertando la furia de este, por haberlo "ofendido".

La gente a su alrededor empezo a irse, pues estos tipos ya tenian mala fama de andar molestado a las jovenes y eran francamente pesados. Como ninguna de las dos se dejo intimidar, estos sujetos empezaron a insultarlas descaradamente. Llamando la atencion de los muchachos.

- Ni te atrevas a volver a ponerme una mano encima... - amenazo Ariana.

- O que... - se burlo con arrogancia el sujeto.


Eiji no aguanto mas, y con una pelota estrujada con rabia en su mano, la lanzo al aire y la golpeo con todas sus fuerzas, directamente a la cara de aquel patan. Detras de aquella pelota le siguieron otras tres, provenientes de sus compañeros, pero dirijidas a los demas que lo acompañaban.

- Dame solo una razon mas para que te destroce el rostro... escoria. - amenazo Eiji desde la cancha apuntandolo con su raqueta, con la mirada seria y penetrante.

- Maldito... - maldijo este en voz baja, tomandose la cara por el golpe.

- Tu y tus despreciables amigos... larguense! - ordeno sin mas opciones, ya no le quedaba paciencia alguna. Solo lo queria ver lejos de ella, a toda costa.

- Y si no quiero... que vas a hacer, flacucho... - se atrevio el mismo sujeto con arrogancia. Creyendose mas fuerte que el.

Sin mas opciones que dar, Eiji elevo varias pelotas en el aire y cada una fue golpeada con gran habilidad, dandole la potencia suficiente como para impactar fuertemente en todo el cuerpo del sujeto. Los demas muchachos, sin pensarlo demaciado, se sumaron a la lluvia de pelotas destinadas a los demas tipos.
Entre esta lluvia de violentas pelotas, se encontraban las muchachas, pero ninguna pelota llego a rozarles, lo que demostraba una gran tecnica y excelente control por parte de ellos.

A estos patanes no les quedo otra que salir huyendo del lugar por su integridad fisica, llevandose con ellos el abucheo de la multitud, ademas de multiples moretones. Los muchachos en cambio, recibieron una calida ovacion por parte de la gente debido al acto heroico que acababan de hacer. Eiji no tomo en cuenta esto, solo corrio hacia ella para ver si se encontraba bien.

- Estas bien? ... - se inclino para verla, pues ella y Ann se habia encojido en el suelo para evitar las pelotas.

- Si... estoy bien. - respondio un poco confundida por lo ocurrido.

Eiji la abrazo con fuerza, realmente estaba muy preocupado por ella, habia actuado sin pensar, solo queria deshacerse del tipo ese, no vio la posibilidad de que pudiera salir herida en el ataque de pelotas. Los demas tambien se acercaron para corroborar que ambas estuvieran bien.

Por la interrupcion, el partido devio darse por terminado, ya no habian animos de seguir jugando. Entonces prefirieron irse del lugar, ya no habia nada que hacer ahi. Tal vez en otra ocasion retomarian el partido pendiente.


Momochiro y Echizen acompañaron a Ann hasta su casa. Mientras que Oishi, Eiji y Ariana se fueron por otro camino.

- Lo siento muchachos... - se disculpo con tristeza Ariana.

- No... yo lo siento, fue mi idea venir aqui... - se sintio culpable Oishi.

- La culpa no es de nadie... es de esos tipos... no puedo creer que exista gente tan desagradable... - dijo Eiji, apretando un puño con ira.

Ariana y Oishi se miraron con tristeza, pues Eiji realmente estaba enojado y aun no se le pasaba el disgusto. Entonces a Ariana se le ocurrio una idea, le hizo una seña a su amigo, para que les permitiera estar un momento a solas con Eiji, sin que este lo notara. Oishi la entendio perfectamente, lo dejaria en sus manos, marchandose lentamente.

- Eiji... - dijo tomandole con suavidad el rostro - ... estoy bien. - le sonrio para calmarlo.

El la miro con asombro, por la delicada reaccion de la joven. Le devolvio una ligera sonrisa, pero enseguida volvio la mirada al suelo con tristeza.

Ariana al notar que su primer esfuerzo no dio resultado, lo tomo de la mano con fuerza y le pidio que la siguiera. El accedio, pero enseguida se dio cuenta que faltaba su amigo:

- Donde esta Oishi? - pregunto extrañado, su amigo no estaba y era raro se que fuera sin despedirse.

- No te preocupes por el... solo sigueme... - lo calmo, sonriendole pidiendo que confiara en ella.

- Donde vamos?... - se extraño, no entendia que sucedia.

- Ya veras... - respondio la joven con misterio.


Despues de caminar unas cuadras, pasando un pequeño bosque, llegaron a la orilla de un bello rio.

- Llegamos !!- le informo contenta.

- Es hermoso!... pero que hacemos aqui ?... - seguia extrañado.

- Quieres tener una cita conmigo? - le pregunto con la tipica sonrisa que le encantaba a Eiji.

- Una cita ?... - estaba sorprendido.

- Si, una cita... bueno... si no quieres esta bien... - añadio con modestia, soltandole la mano.

Eiji recien en ese momento se habia dado cuenta que durante todo ese tiempo habian estado tomados de las manos, y ni bien ella lo solto, fue estimulo suficiente como para hacerlo reaccionar.

- Perdon! si, si, claro que si... - acepto con todo gusto, tomandola nuevamente de la mano. Se sintio desprotegido cuando lo solto, y le gustaba esa calida sensacion que le transmitia. Ariana sonrio por eso, el era tan dulce y atento, y eso le encantaba.

Entonces ambos se sentaron a la orilla del rio, para sentir el ruido del agua correr, la brisa fresca del viento, el sonido de los pajaron, en definitiva sentir la mismisima tranquilidad. Logrando porfin apaciguar la tristeza y enojo de Eiji.

- Ya te sientes mejor? - pregunto con delicadeza.

- Si...gracias... - respondio en un suspiro de alivio, con calma ya mas relajado.

Se sintio agradecido por el gesto de ella, entendio que su plan era hacerlo sentirse bien para que dejara de preocuparse por cosas que no tenian importancia. Le parecio increible que en tan poco tiempo, ella supiera o por lo menos imaginara que hacer en una situacion como estas, para que se sintiera mejor.

Ya ambos mas relajados y olvidado aquel asunto desagradable, disfrutaron del momento, mirandose con ternura, tomados de la mano, observando el hermoso paisaje que los rodeaba. Estaban solos, sin interrupciones.

- Te puedo hacer una pregunta ? - pregunto de repente Eiji.

- La que quieras... - respondio con una sonrisa.

- Porque me trajiste precisamente aqui ?... - se sentia intrigado.

- Ya te dije... para que tengamos una cita. - respondio divertida.

- No deberia ser yo el que te pidiera una cita primero ? - continuo con el tono divertido.

- Puede ser. Pero esta vez lo decidi yo... es mas bien una "cita de emergencia" - añadio pensativa.

- "Cita de emergencia"? - se extraño Eiji por el termino inusual.

- Si... es que, tenias una mirada muy triste, con rabia... y no me gusta verte asi... asique se me ocurrio esta idea. Me encantan los lugares como estos, me traen mucha paz, y pense en traerte aqui... ademas... queria pasar tiempo a sola contigo. - explico, de la forma mas clara y dulce posible.

- Si, lo siento... es que no podia soportar que ese odiota... te hiciera daño... - volvio a retomar su mirada triste al recordarlo.

Ante esto, se acerco y lo abrazo con fuerza. Luego le dio un tierno beso en la mejilla, diciendole al oido:

- Gracias por cuidarme... - aun manteniendo sus brazos al rededor de su cuello.

- Juro, que no dejare que nada malo te pase... - dijo mientras la tomaba del rostro, mirandola fijamente a los ojos, hablaba enserio.

Ante semejantes palabras, mientras lo mantenia abrazado del cuello, acorto la distancia hasta que la punta de sus narices estuvieron cerca, y dijo:

- Te quiero... - mientras, por fin, lo volvia a besar.

- Te quiero... - le respondio el, bensandola de igual manera.

Pero, este simple y tierno beso pedia mas. La intensidad aumento, haciendose mas pegado y duradero. Por lo que Eiji lentamente la fue recostando sobre el pasto, y una vez encima de ella ese largo y pegado beso, se fue haciendo apasionado. Abriendo mutuamente sus bocas para conocer al fin la cavidad del otro, de forma ritmica y lenta, acariciando sus lenguas.

Cuando por fin se despegaron, para respirar profundamente, recien en ese instante se dieron cuenta de lo que estaba ocurriendo. Riendose por lo ocurrido, ambos se volvieron a sentar como al inicio, mirandose intensamente.

- Vayamos lento, si... - pidio con dulzura. Mientras le acariciaba el rostro.

- Lo intentare... - bromio el, mientras le tomaba la misma mano con la que acaricio su rostro, para besarla. Provocando la risa en ella.


Aprovechando que aun era temprano, se recostaron sobre el pasto abrazados, mientras charlaban, reian y disfrutaban del resto del dia.

Cuando empezo a caer el sol, decidieron volver. Entonces Eiji la acompaño hasta su casa, tomados de la mano. Una vez llegaron a la puerta, se detuvieron un instante:

- Gracias por acompañarme... - agradecio dulcemente.

- No es nada, por ti lo que sea... solo pide! - bromeo alegremente.

- Lo que sea, eh?... - jugueteo divertida.

- Lo que sea... - afirmo, acercandose cada vez mas, mirandola de forma intensa.

Era un hecho que para Ariana, cada vez que Eiji se ponia insinuante, se volvi muy irresistible y le era dificil evitar la tentacion. Mordiendose el labio inferior, mientras sonreia con picardia. Eiji sonrio complacido por la reaccion provocada en ella.

- Creo sera mejor que entres... quien sabe que pudiera pasar... - interrumpio el momento, en tono misterioso.

- Es verdad... mejor entro... - continuo con el juego insinuante.

- Pero antes... ya que esta fue nuestra "primera cita"... me darias tu numero ??... quiero volver a verte... - continuo divertido con el juego, simulando recien conocerse.

- Ah cierto!... con todo gusto. - dijo entre risas.

Ambos se sentian fuertemente atraido por el otro. Era como si hubiesen estado predestinados el uno para el otro y por fin se hubieran encontrado. Se llevaban muy bien, compartian muchas cosas en comun. Perfectos el uno para el otro.
Pero lo que mas compartian, eran esas miradas entre silencios, como si no tuvieran nada mas que decirse o mas bien, entre miradas se entendian perfectamente, podrian estar horas asi sin darse cuenta realmente. Y esto en realidad se volvia peligroso, porque empezaban a desearse cada vez mas.

- Bueno... me voy. Que descances hermosa. - se despidio finalmente Eiji, dandole un beso bien marcado en la mejilla. Era respetuoso, sabia que estaban en la puerta de su casa y no era el lugar indicado para expresiones de otro tipo.

- Nos vemos lindo. - se despidio igualmente, pero con un "semi-beso", ella fue un poco mas osada. Eiji la miro como diciendo "eres mala". Ella respondio con una hermosa sonrisa, disfrutando de la reaccion provocada, obviamente habia sido a proposito.


Una vez se despidieron, Eiji se marcho a su casa mas contento que nunca, nada podia sacarlo de su alegria. En el camino recordaba todo lo sucedido y sonreia por eso, podria llegar a soñar lo ocurrido de lo contento que estaba.
Mientras, Ariana subia a su habitacion, con una sonrisa igual de grande que le era imposible de esconder, por suerte no se habia cruzado con sus hermanos, pues de haberlo hecho seguramente la hubieran empezado a molestar y sobre todo a interrogar, pues eran bastante celosos aunque no lo parecieran.
Ya en su habitacion, y despues de tomar una ducha, se cambio de ropa lista para descansar, habia sido un dia largo y estaba exhausta, pero en su mente seguia dando vuetas Eiji. Lo atento que era con ella, como la habia defendido y lo protector que podia llegar a ser, lo cariñoso y sobre todo, sus besos, todo en el le gustaba.
Pero antes, bajo a la cocina a servirse algo que comer antes de irse a dormir. Ya estaba un poco mas calma y no tenia tan marcada esa sonrisa babosa, asique le dio igual si se encontraba con los muchachos o no. Efectivamente los encontro en la cocina, con las mismas intenciones que ella de servirse algo que comer, disputandose una rebanada de queso, tonterias tipicas en ellos. Asique entro con total despreocupacion.

- Que hacen Gemes... - saludo normal.

Estos al verla entrar, notaron algo diferente en ella, por lo que se miraron extrañados, para luego cambiar a una expresion de intriga.

- Donde estuviste toda la tarde... hermanita ... - pregunto con misterio uno de ellos.

- Sali con Suichiro y Eiji... - respondio sin mas detalle.

- Mmm... estas rara... que hicieron? - insistio uno.

- Fuimos a las canchas callejeras... conoci mucha gente... y ahora me siento cansada... es todo. - siguio sin levantar sospechas, mientras preparaba un sandwich.

- Mmm... bueno, esta bien... - no le creyeron realmente, sabian que algo habia pasado, algo especial.

En eso, sono su celular. Pues lo traia encima, inconcientemente o por ansias de que Eiji le pudiera llegar a mandar un mensaje. Asique abrio el mensaje con entusiasmo. Los Gemes la observaban con atencion, intentando decifrar que era lo que la ponia tan feliz.

El mensaje decia: " Ariana, desde el primer momento que te vi me pareciste una chica muy interesante y quisiera conocerte mas. Te parece si nos vemos mañana... " - Ariana no podia seguir leyendo de la emocion, no habia pasado ni una hora desde que se habian visto y Eiji ya la estaba invitando a salir denuevo - "...Por favor, responde este mensaje con tu respuesta. Los esperare ansioso. Syusuke ".

Ariana se quedo en silencio, mirando sin entender el mensaje, luego reacciono:

- SYUSUKE !!... - grito con espanto, olvidando la presencia de sus hermanos que la observaban con aun mas intriga.