Ordinary Girl ••• Owangle [FNAFHS]

•••Capítulo 1•••

—¡No saben que paso despues de eso! —dijo con algo de orgullo una rubia de ojos amagenta que se encontraba sentada en una mesa del comedor con sus amigas.

  Quienes eran de las faciles o de las exageradas de la moda, excepto Meg que se encontraba entre ellas.

  Las chicas se vestian con el uniforme algo inapropiado: pollera corta, camisa algo desabrochada, accesorios de pelo, anillos, aros, collares, medias cortas y zapatillas de colores unicos.
   Mientras que Meg se vestía simple: pollera algo larga, camisa bien abrochada con el moño adecuado, zapatos negros, medias largas y como extra un suéter negro.

—¡Él dio el primer paso! Se sentia bien~ —dijo entrecerrando los ojos con algo de picardia mientras se mordia el labio inferior levemente.

  Él resto de las chicas solo soltaron un sonoro y atrevido comentario... Este tipico "uh~". Todas se reian mientras debatian de la ultima "cita" de Chica, excepto Meg, quien se encontraba cruzada de brazos con algo de molestia.

"Lo peor es que esta hablando de mi hermano"

  Pensó. Ella sabia bastante bien que Fox, realmente estaba enamorado de Chica pero ella no se merecia su amor.

  Estaba solto un suspiro un algo fuerte, algo que llamo la atención del resto del grupo.

—¿Solo bien? —con firmeza miraba a los ojos de la rubia.

—Claro —contesto la rubia con tranquilidad.

—¿acaso no escuchaste, Meg? —comento con algo de ironía una japonesa de dos coletas.

—¿Nada mas? —sin mas que esperar apoyo con fuerza su mano sobre la mesa haciendo que todas se sobresaltaran.

  Pero no solo eso, tambien habia logrado llamar la atención del resto de la secundaria, entre ellos estaba su supuesto hermano.

—Ay Meg, que cambio de carácter, eh~ —comento sin arrepentimientos la desteñida mientras cruzaba de brazos con gracia.

  Pudo sentir como algunas risas se escuchaban a sus alrededores. El enojo de la albina estaba sobrepasando sus limites.

—Si, tampoco que fuese el mejor... Ya qu--

  No logro terminar debido a que Meg sufrió un vaido: esta solo le derrame un batido de arándanos sobre el pelo, lleno de broches y trabajo duro, de Chica, quien simplemente se estremeció y se levanto junto a un jadeo algo exagerado.

—No es necesario expliques mas, maldita... No vales la pena —con molesta y con acto final aplastó con sus propias manos el vaso de plástico para luego ponérselo en su boca— ¿no es lo suficiente grande, verdad?.

  Sin mas se alejo de la mesa, para luego recuperar su coincencia y ver como el resto del comedor la miraba con una mirada de asombro o enojo, ella no lograba diferenciarlas...

"¿Que acabo de hacer?"

  Lo que ella no sospechaba era que eso solo era el comienzo de una guerra de acosos y problemas.