5. "Reía como idiota, con los otros idiotas."

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— Bueno chicos.. — comenzó a hablar la bruja. — ¿Y su otro compañero Félix? — preguntó, cómo si nosotros tuviéramos la menor idea en donde estaba.

Me encogí de hombros, y al igual lo hicieron los demás. En realidad, ¿donde estará Félix?

— ¡Hey! — exclamó alguien, llamando la atención de todos en la oficina.

Fruncí el ceño, y luego me di la vuelta para ver quien había entrado a la oficina. En cuanto lo hago noté a un Felix sonriendo como un idiota.

El cerró la puerta tras de el, y luego fue directo hacia los asiento que tenía la directora frente a su escritorio. Se sentó en una de ella, para luego trepar sus piernas encima de el escritorio.

Era el único sentado. Ya que nosotros aún permanecimos parados pegados a la pared.

— Sandman, baje sus piernas de mi escritorio, y siéntese como un estudiante debe sentarse. — afirmo la directora, mientras lo fulminaba con la mirada.

Félix bajo sus piernas lentamente, mientras a la vez reía como un loco.

Noté como Omar y Olly tenían ganas de reír, y nunca parar, pero se contuvieron.

— Ya, ya.. — alargó Félix riendo.

La directora aún continuaba fulminándolo con la mirada, y en ese mismo instante Omar y Olly estallaron de risa.

Ellos reían a carcajadas, mientras Preishariz y yo solo los observábamos sin entender.

Félix igual se unió a sus risas.

Hombres..

— ¡Ya callensen! — exclamó la directora.

Todos quedaron en tremendo silencio, y dejaron de reír. Toda la oficina quedó en silencio total debido al gran grito de la directora.

Odio los momentos silenciosos.

— Bueno.. — comenzó a hablar la bruja. — Por fin puedo comenzar.. — añadió.

Nosotros sólo la observábamos.

— Chicos, les haré una pregunta, y ustedes sólo me contestarán con la verdad. — afirmó.

Nosotros sólo asentimos con la cabeza.

Mierda.

Estamos fritos.

— ¿Quien de ustedes cinco, escribió una de las paredes de la high school? — preguntó. — Y lo más importante, el mensajito que me dejaron allí. Estuvo muy bonito. — añadió, mientras nos fulminaba con la mirada.

Mierda.

No fui yo. Pero tampoco podía delatar a los chicos. Son mis mejores amigos.

Todos permanecimos en silencio, y ninguno pronunció palabra alguna.

La bruja sólo nos observaba, esperando alguna respuesta de nosotros. Pero nada de nada.

— ¡Respondan! — exclamó nuevamente.

Nosotros sólo intercambiamos miradas uno con los otros.

Mire a Omar y Olly, quienes se notaban muy nerviosos, y sus ojos estaban súper abiertos. Mientras Félix, pues no se como andaba, ya que andaba sentado aún en el asiento frente a nosotros.

— Bueno.., ¿piensan responder? — preguntó nuevamente la bruja.

Aún seguíamos callados. Ninguna palabra salía de nuestras bocas.

Mentir Para No Herir. {Editando}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora