Cuando Lana se alejó de mi me quedé mirándole pasamada, ella me había besado sin ningún escrúpulo y yo estaba allí, sin poder moverme mientras ella me observaba atenta con sus ojos oscuros. Me levanté y caminé a pasos rápidos hasta la planta baja, por instinto huí de Lana, no sabía que sucedía conmigo ni menos con ella, mi nueva jefa.
Al día siguiente me levanté con cansancio y recordé !hoy era mi primer día de trabajo¡ Iba atrasada, no comí nada y salí disparada hacia el ayuntamiento, rezaba para que Lana aún no hubiese llegado, para colmo me había vestido con la primera ropa que había encontrado y llevaba una corta falda apegada a mis piernas que dejaba ver la mayor parte de mis muslos, mas una camiseta que le faltaba el primer botón. Definitivamente parecía una cualquiera cuando ví me reflejo en el ayuntamiento. Ajusté mis gafas y me amarré mi cabello en una coleta intentado parecer mas decente, subí a la segunda planta donde estaba el despacho de Lana y no veía nadie conocido allí. Espere paciente luego de haber tocado la puerta.
-Adelate-esucho del otro lado de puerta y suspiro antes de entrar. El lugar es simple y acogedor, hay una larga alfombra que llega hasta un escritorio y allí esta Lana, sin prestarme atención mirando unos papeles.
-Llegas tarde Sole...-sube su mirada a la mía y comienzo a sonrojarme al recordar la noche anterior, pero lo que más me avergüenza es que se toma su tiempo para ir subiendo su mirada desde mis piernas hasta mi rostro. Para cuando llega a el veo una mirada oscura y mis piernas se tambalean. Es extraño ser presa de su mirada, se queda largos segundos callada hasta que vuelve en sí y niega con su rostro.
-Necesito que organizes algunos papeles hasta que vuelva, tengo que hacer algunas cosas-dice seria y evita mi mirada la mayoría del tiempo. En menos de cinco minutos sale del despacho dejándome sola y confundida, aún así me fue inevitable mirar su contorneado cuerpo cuando avanza saliendo de por la puerta. Algo en mí esperaba este tipo de acogida, aún a mi mente volvían los recuerdos del beso del cual salí huyendo.
Decidí enofocarme a mis tareas y por al menos un hora completa estuve organizando papeles y mirando a mi alrededor, era evidente que Lana había llegado hace poco tiempo a la cuidad, apenas si tenía algunas cosas en su escritorio y nada decoraba las paredes, quize levantarme para dar algunas vueltas pero justo en ese momento se abre la puerta y me quedo en el mismo lugar.
-¿Has terminado?-Lana sigue sin mirarme y respondo un sí con un hilo de voz, es una mujer despampanante, aún con su ceño fruncido y con su caminar lento me parece increiblemente sensual, cuando su mirada da con la mía aguanto la respiración pero sigo observándola, Lana también lo hace pero me da la espalda y sale de la habitación sin decirme nada ¿Qué rayos le sucede?
Espero praciente unos quince minutos y vuelve para decirme que la acompañe al despacho de Max. Asiento y tomo una libreta mientras Lana me deja avanzar por delante suyo, sé que su mirada está puesta sobre la mía y no sé como logro llegar a la siguiente planta sin flaquear. Cuando entramos Max parece perdido en sus pensamientos, cuando me ve una enorme sonrisa sale de sus labios y se levanta para abrazarme.
-!Sole¡-dice sin dejar de abrazarme-es un placer verte aquí !Mírate lo hermosa que estas¡
Vuelvo a sonrojarme por enesima vez en el día y para cuando Max me suelta Lana nos observa sin ninguna expresion en su rostro.
-Si ya sueltas a mi nueva secretaria vengo a hablar de asuntos importantes-dice cortante y toma asiento sin esperarnos. Max me guiña una ojo mientras toma asiento y yo me quedo levantada detrás de Lana tomando apuntes. Hablan de las nuevas políticas para el pueblo, al comienzo presto mi total atención a su conversación pero luego de una hora me aburro y comienzo a divagar mi mirada por al rededor, mi estómago ruge por unos segundos, Lana y Max me quedan mirando y suelto una disculpa.
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Only You (Temática Lésbica)
RomanceLa llegada de Lana, una de las abogadas más importantes del país al diminuto pueblo de Baser causa estrágos en la pequeña Soledad, quien tendrá qué lidiar con la nueva allegada y los sentimientos que esta trae consigo. Reservado todos los derechos...