4- Feather: Good boy

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"Mamá" pensó el pequeño asomándose por la puerta de su habitación, camino y casi chilla al notar lo frío que estaba el suelo y entendió porque sus padres siempre le decían que no caminara descalzo por lo que regresó a la habitación y se puso su zapatillas, casi se tropieza, aún le era difícil acostumbrarse a ellas.

Lentamente camino hasta la sala y se encontró con su madre hablando por teléfono.

-Por favor, necesito tu ayuda no puedo seguir aquí. Tengo que irme- parecía desesperada.

"¿Nos mudaremos?" Pensó el pequeño.¿Irán a otro lugar? ¿Conocerá a más personas? "¿Es por mi cumpleaños?" Pensó recordando que faltaba solo un año más para que oficialmente pudiera decir que tenía seis años y que en pocas semanas entraría en la escuela.

Estaba tan curioso por como sería, ¿tendría amigos? ¿Podría tener mascotas?

-No te preocupes, solo voy yo- dijo la mujer intentando persuadir  a la persona en la otra línea.      -No lo sabe, no planeo llevar a ese niño tampoco- hizo una pausa- Me conoces no te sorprendas, Jungkook es un completo error- dijo dudosa lo último.

"Error...la señora Lee dijo que significa que es algo que no debió haber pasado o está mal...entonces...¿soy malo?" se preguntó así mismo en una confusión y un extraño sentimiento que no sabía cómo manejar.

La mujer termino la llamada y el pequeño se acercó a la sala jugando con sus manos.

La mujer lo miró abstraída preguntándose si la había escuchado.

-Mamá...¿soy malo?- preguntó temeroso mirando al suelo.

-Sí- respondió la mujer en seco más intentando convencerse a sí misma de sus anteriores palabras- Pero no se supone que debas estar aquí, y eso ya es algo malo Jungkook, eres un niño muy malo que hace sufrir a su madre- declaró la mujer sin saber medir sus palabras sorprendiéndose a si misma pero sin corregirse.

-¿Te irás?- dijo el niño viendo las dos maletas en el sillón.

La mujer no contesto en pánico.

-¿Si soy un mejor niño te quedaras con papá y conmigo? ¡Puedo hacerlo!...- dijo concluyendo que el problema era él haciendo que sus manos temblaran.

-Jungkook...-

-¡Lo haré y así no tendrás que irte!...seré un mejor niño...no hay necesidad...convertiré este error en algo que valga la pena  y así ya no tendrás que arrepentirte mamá- dijo dolorosamente esas palabras...le dolía no ser suficiente para su madre...él...él no sabía que había hecho mal pero tenía que compensarlo.

-Jungkook no- La mujer estaba llegando a su límite.

-Lo prometo, valdré la pena- sus ojos empezaban a enrojecer y su respiración era rápida...él solo deseaba ser mejor en ese momento...¿así su madre no tendría razones para irse verdad?

-¡Jungkook para!- replicó la mujer- No importa cuánto lo intentes tú siempre serás un error Jungkook. ¡Eres mi error!...¡No deberías estar aquí, no debiste haber nacido desde un principio!- Explotó, sus lágrimas se hicieron presentes y el pequeño no sabía cómo reaccionar solo sentía un punzante dolor en su pecho y unas fuertes ganas de llorar- Eres malo, eres malo y solo dañas...eres lo peor que me ha pasado en la vida...- la mujer se limpió el rostro, el niño corrió y le dio un pañuelo con las manos temblorosas al igual que sus pequeños pies.

-Por favor no digas esas cosas...no llores- dijo el pequeño al borde de las lágrimas.

-Esto es estúpido- se dijo a sí misma al ver que el niño le extendía el pañuelo.

-Mamá...- "Quédate, quedaté,quedaté...no nos abandones...por favor"

La mujer camino hacia la puerta tomando ambas maletas dejando una nota sobre la repisa.

"Por favor no te vayas...te quiero...te quiero"

-No funcionará de todas formas, no puedo hacerlo...- Decía esas palabras intentando convencerse a sí misma.

Jungkook corrió hasta ella y esta lo detuvo.

-Eres una horrible persona-dijo la mujer más para sí misma pero el pequeño entendió que era para él por lo cual paró en seco y vio como la puerta se cerraba, quiso seguir corriendo hasta ella     pero por alguna razón su cuerpo no le respondía.

Sintió como su respiración se acortaba y su pecho dolía, dolía y dolía tanto que cayó al piso. El piso estaba tan frío...su mirada se mantuvo en la puerta...las lágrimas apenas empezaban a salir.

-Lo...lo siento- dijo esperando en el suelo mientras más lágrimas se deslizaban y él intentaba limpiarlas.

-Soy un niño malo, por eso se fue, por eso se fue...es mi culpa, ¡Jungkook no debes estar llorando...es lo que te mereces- 

Supo que estuvo mucho tiempo así cuando su padre abrió la puerta y se sorprendió al encontrarlo en el suelo llorando.

-¿Jungkook?- el hombre lo envolvió en sus brazos- ¿pasó algo? ¿Te duele algo cariño?

-Ma...mamá- dijo casi inaudible.

-¿Qué pasa con mamá pequeño?- el hombre se afligía.

-Se fue...se fue...no regresará...dijo que yo...era un error y...- el hombre lo abrazo con más fuerza.

Los ojos de su padre dejaron de brillar por un segundo y buscaron algo, encontró un papel sobre la repisa y maldijo al leerlo. Hizo un par de llamadas y solo maldecía más mientras su hijo lo miraba.

 Finalmente tomo una fotografía de él y su esposa en el tercer cumpleaños de Jungkook y comenzó a llorar en el suelo tal y como su hijo había estado haciendo desde hace una hora al parecer.

"Todos están tristes...¿es por mi culpa?...soy...¿soy malo?...eso debe ser, ¿Jungkook ahora que hiciste?" Pensó el niño mientras veía a su padre.

Camino hasta él y se sentó a su lado apoyando su cabeza en su hombro.

-¿Es mi culpa?- preguntó sorbiendo por la nariz sin saber qué hacer. Solo tenía cinco años y no sabía del todo que estaba pasando ni tampoco que debía hacer y cómo debería de sentirse.

-No Jungkook ,no es tu culpa...es la suya por ser tan débil- le corrigió su padre - No eres un error, ella se equivoca...tú eres la mejor cosa que  nos ha pasado...eres lo mejor que me ha pasado en la vida pequeño- ahora su padre le sonreía y Jungkook limpiaba las lágrimas del hombre con el pañuelo que su madre había rechazado anteriormente.

"Y si es así...¿por qué se fue?" Tras pensar eso Jungkook negó con la cabeza y le devolvió la sonrisa a su padre. - Soy la mejor cosa que ha pasado en tu vida- repitió el niño sonriente.

-Eres muy inteligente para tu edad Jungkook- le halago- No olvides tenemos que ir al doctor este viernes- repentinamente saco el tema intentando desviar el origen de la conversación.

Jungkook suspiró, realmente odiaba ir ahí pero no podía hacer nada y se le ocurrió hacerle una mirada de súplica a su padre.

-No me mires así, después te llevaré a por un helado si vas- y solo esa frase vasto para que Jungkook se abalanzara sobre el hombre y chillara de alegría olvidando todo.

-¿Uno doble de vainilla con menta?-

-Uno doble de vainilla con menta- afirmó repartiendo besos en el rostro de su hijo y provocándole cosquillas.

Jungkook se había decidido.

Tenía que ser fuerte y no causar más problemas, tenía que ser un buen chico.

Un buen chico.




Stay AwayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora