Último día :')
Yei.
....Miguel se removió en la cama. Un rayo iluminó la habitación y una extraña criatura se pareció ver sentada en un sillón.
Miguel se hizo bolita y se trató de cubrir con las mantas hasta la cabeza.
Un horrible chillido, como el llanto de una mujer se empezó a escuchar saliendo del armario.
Empezó a temblar.
¿Qué chingados andaba haciendo la Llorona en Sanfransokyo metida en su pinche closet?
No lo sabía y tenia miedo de descubrirlo.
¿Como era posible que el puto de Hiro no se despertaba con la amenaza de una mujer fantasma y el chamuco sentado cómodamente en el sillón?
Prum
Un trueno lo hizo saltar levemente, los quejidos se hicieron mas fuertes y la manta con la que se cubria parecía ya no ser un buen refugio.
Se volteo solo para hacerse bolita del otro lado, abrazando fuertemente una almohada, hundiendo su rostro en la misma.
Pasaban las horas, o tal vez eran minutos.
La verdad es que fueron segundos.
Los chillidos se hicieron mas fuertes.
Algo esta empezando a arañar las puertas del closet desde dentro, como intentando salir.
Una mano huesuda se vio a través de su mantita, con la ayuda de un rayo que ilumino el cuarto.
Miguel empezó a temblar, algunas lágrimas salieron de sus ojos que terminaron cayendo y mojando a la pobre almohada.
Cuando era un niño, Miguel le tenia miedo a la obscuridad, y la ventana de su habitación que reflejaba la figura de miles de manos gigantescas y deformes tratando de atraparlo no ayudaba, esa terrible sensación era la que sentía ahora.
Paf.
La mano le tocó uno de sus costados y fue subiendo, Miguel apretaba lo más fuerte que podía la almohada.
Los rasguños en el armario se volvieron más fuertes.
La mano llegó hasta su cabeza buscando quitarle la manta, el llanto se empezó a volver tan agudo y castrante que tuvo que taparse los oídos y cerrar sus ojos.
Temblaba a medida que la manta se despegaba de su cuerpo sintiendo el golpe de un horrible frío que le caló hasta los huesos.
Y luego…
— Miguel ¿Estás bien?— Preguntó un preocupado pero adormilado Hiro.
Miguel sintió un gran alivio al ver al mitad asiático y no al chamuco tratando de llevarse su alma.
— E-estoy bi-bien
—¿Seguro que estás bien? ¡Miguel, estás llorando!— Los ojos de Hamada se abrieron y abrazo preocupado al Rivera.
Casi al mismo tiempo un rayo iluminó la habitación y un estruendoso trueno hizo saltar al mexicano.
—¡Allí!— Dijo el mexicano apuntando con el brazo temblando al sofá. — ¡Allí hay un monstruo!
—Miguel, es la ropa sucia.
— ¿Por qué la ropa sucia tiene una forma tan aterradora?
—No lo sé, tiene forma de ropa sucia. ¿Qué tienes Miguel? ¿Le temes a la oscuridad?
Miguel negó suave.
—No, cuando era niño si. Pero ya-ya no.
— ¿Entonces qué te pasa?— Hiro le hizo “pat pat” en la espalda, buscando ver sus ojos marrón, a pesar de la oscuridad.
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HiGuel Week #TeamMexChi
FanfictionAquí habrá algunas pequeñas historias sobre la pareja del HiGuel con el motivo de la Higuel Week e un lindo grupito hermoso. Si no sabes que es Higuel es la pareja de Hiro Hamada de Grandes Héroes y Miguel Rivera de Coco. Si no te gusta esta parej...