5

66 10 1
                                        

Mi memoria se hace vieja junto con mi cuerpo pero tu recuerdo sigue siendo el mismo de ayer.

Me llamo Harr... ese noche no pude terminar la oración ya que estaba encima de él y unos guardias del barco llegaron en mi búsqueda, me hubiese gustado seguir contemplando esos ojos, pero el dueño de esos ojos estaban siendo esposados por mi imprudencia así que tuve que detenerlos y decir que él me había salvado de morir trágicamente. Ellos lo soltaron, y me llevaron junto a mi madre y mi prometida, ambas fingian preocupación y yo sólo quise saber si el hombre que vi aún estaría ahí, jamás me había perdido en unos ojos, jamás me había parecido alguien tan atractivo, y tampoco jamás pensé que esos ojos los tendría un hombre.

En esos tiempos la homosexualidad no era bien aceptada, incluso era repudiada por todos los ciudadanos del mundo, pero yo no pude dejar de pensar en él en toda la noche. Mi prometida notó que estaba realmente raro y yo sólo la ignoraba, pues no me interesaba lo que ella pensará. Mañana buscaría a ese caballero, hablaría con él. Estoy seguro que el también sintio lo mismo.

Y fue así, a la mañana siguiente fui a buscarlo, primero por la clase alta, busque en cada habitación a alguien llamado Louis, pero ninguno era el correcto, ya estaba perdiendo las esperanzas hasta que recordé que aún me quedaba ver la clase baja, mis padres definitivamente me matarían no porque sea hombre sino por su clase social, aunque a mi realmente no me importa.

Cuando lo vi, el se acercó y me dio la sonrisa más hermosa que nunca haya  visto antes.

Hola, yo no pude escuchar tu nombre ayer y realmente quiero saberlo, aunque esto suene extraño, sólo me gustaría saber tu nombre. -Dijo él realmente nervioso.

Mi nombre es Harry Styles, y vine a agradecerte por haberme salvado la vida, realmente gracias. -Lo mire con cierta vergüenza ya que por algún motivo todo mi cuerpo reaccionaba de manera nerviosa.

-Aceptaré tu agradecimiento si tú aceptas almorzar conmigo, por favor.- me regaló una hermosa sonrisa de nuevo y yo realmente morí un poco de amor en ese momento.

-Acepto, Louis.- Sonreí como nunca antes, porque nunca antes fui tan feliz.

Nuestro amor fue precipitado, yo quien no creía en el amor a primera vista puedo decirles que existe. Sólo lo sientes sin importar quien sea o como sea, sientes la necesidad de permanecer a su lado y no irte jamás.

Con él el tiempo pasaba rápido, conversabamos de todo y de nada. Él era de Londres y yo de Inglaterra, definitivamente el destino tiene las piezas totalmente armadas en el momento justo.

La titanic versión larryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora