Lazos del destino (Nathaniel y tu)

Capitulo 13

-¿Te gusta?-Me pregunto sin mirar-Recuerdo que me digiste que te gustaba apreciar los paisajes-

Después de decir eso tomo su bolso.

-¿No te quedaras?-

-¿Quieres que lo haga?-

-Yo...-Nathaniel me dedico una sonrisa torcida, desordeno mi cabello-No me molestaría...-

-¿Lo dices enserio?-

-Digo, estaran todos en pareja y puede que en la noche haga un poco de frio... No es para que te pases pelicula-

-Esta bien-Dijo dejando su bolso sobre el mueble y sacando un buso de el-Solo lo había tomado para cambiarme de ropa, no pensaba irme a ningún lado, pero es bueno saber tu opinión-

-¿Es un broma?-

-No, ahora si me das espacio, quiero cambiarme, aunque si quieres puedes darme una mano-

Fruncí el ceño y salí de la habitación cerrando la puerta detrás de mi.

Los chicos se encontraban en el balcón, me acerque a ellos, el sol ya había salido sobre nosotros. 

-¿Entonces?-

-Vamos a ir de compras-Dijo Rosalya sonriendo-

-Amor vinimos aqui a olvidarnos un poco de la ciudad y quieres ir de compras-

-¿Qué propones tu?-

-Podriamos bajar a la playa, el día está  soleado, ¿Que les parece cambiarse de ropa mientras preparo unos sándwiches para la tarde?-

-Me parece una genial idea- Dijo Morgan sonriendo-Si quieres puedo ayudar con los aperitivos, yo vengo con el traje de baño puesto-

-Esta bien-

Toque la puerta de la habitación, abrí con cuidado, Nathaniel se encontraba recostado sobre la cama. Tomé mis cosas y salí de la habitación. Por suerte también me había puesto el traje de baño debajo de mi ropa. Nathaniel no tardo en seguirme.

El día estaba agradable, corría una tibia brisa y el sol calentaba lo justo y necesario. Dejamos las toallas en la arena y nos recostamos un rato para tomar un poco de sol. Rosalya me ayudo con el bloqueador. Los chicos se pusieron a jugar con una pelota.

-Me sorprende que este compartiendo-

-A mi me sorprende cada cosa que hace-Dije estirandome- pero es lindo verlo compartir-

-Si, es casi como si lo disfrutara-

Cerré los ojos por unos minutos, el viento recorría mi cuerpo y el calor hacia que mi piel se erizará. El aire era distinto, me sentía tranquila, podía escuchar a los chicos reírse y venir en nuestra dirección. No había mucha gente aún en la playa.

Entonces sin previo aviso sentí unas manos frías tomar mi cintura. Abrí los ojos de golpe, Nathaniel tenía una gran sonrisa en su rostro, no entendía bien que sucedía hasta que oi gritar a Rosalya.

Nathaniel me levanto casi como si fuera una pluma. Llevaba el pecho descubierto. Mire a Rosalya. Leigh la llevaba sobre sus hombros.

-Leigh te juro por Dios que si me tiras, dormirás en el sillón,  ¡asíyan más ha habitaciones!-

-Bueno, dormire con Nathaniel-

-No... No no no- Dije mirando a Nathaniel suplicando-

Note cómo su cuerpo se erizaba al sentir el agua. Me aferre a su cuello con fuerza. Si caigo no lo haré sola.
Nathaniel siguió avanzando a pesar de que su cuerpo se tensara.

Mire sobre su hombro, Leigh le seguía el paso. Cuando se detuvieron el agua les llegaba casi al ombligo.

-Leigh última advertencia, te lo prometo ¡hoy duermes en el suelo!-

-¡Vamos chicos!-

Alexy había llegado a nuestro lado, se dio un chapuzón casi sin pensarlo. Salió delante de nosotros y movio su cabeza, haciendo que nos callera un poco de agua. Entonces mire a Nathaniel.

-Toma aire-

-¿Que?-

Vi como exhalaba así que rápidamente hice lo mismo, entonces en un par de segundos me encontraba bajo el agua, estaba helada, sentí arder mi piel y Nathaniel me soltó, salí casi al instante, pero a diferencia de el, el agua pasaba mi ombligo.

-No sabes cuánto te odio en estos momentos-

Nathaniel sonrió, su cabello rubio caía sobre su rostro y su piel brillaba con el reflejo del sol y las gotas de agua. Mire a Rosalya. Leigh no la había sumergido, pero si la había dejado frente a él, el agua les llegaba un poco más abajo de mi. Y miraba con el seño fruncido.

-Te odio tanto en estos momentos- Dijo-¿Dime de quien fue la idea?-

-Mia- Dijo Alex sonriendo-

Ambas miramos a Alexy, pero nos quedamos en silencio al ver la ola que se había formado, no era muy grande, pero estaba muy cerca.
Sentí la mano de Nathaniel rodear mi cintura y atraerme a el.
Tomamos aire y nos undimos, el peso de la olas nos alejo un poco y Rosalya salió furiosa del mar.
Leigh y Alexy le siguió los pasos, Morgan nos miraba desde la orilla negando con la cabeza. 

-Ven, vamos a dar una vuelta-

Nathaniel tomo mi mano y salimos de la playa, nos acercamos a nuestras cosas, tomo su polera y me miró.

-Toma-Estiro su polera hacia mi-Estas mojada-

-Puedo ponerme mi ropa-

-Si, pero estas mojada y se te pegará mucho, mi polera es más grande, estarás más comoda-