Cazadores Nocturnos 6: Renacer

Capítulo 23

-Liz ha hecho un hechizo de seguimiento y ha descubierto que Anabelle está en el claro del bosque- informo a mis compañeros-. Es nuestra oportunidad de derrotarla.

-Hagamos lo que sea necesario para traer la paz a este mundo- añade Daniel, abrazando a su chica y depositando un beso en su cabeza-. Haremos que nuestra lucha no sea en vano.

-Todos hemos perdido mucho a lo largo del camino, pero también hemos ganado- continúa la vampira de cabello dorado-. Hemos ganado una familia para siempre.

-Una familia que pemanecerá unida hasta el final- promete Cormac.

-Aunque el final no existe para algunos- bromea Samuel.

Nos damos un abrazo grupal, en el que algunos no pueden evitar emocionarse y derramar alguna que otra lágrima de felicidad por haber llegado hasta aquí después de todo lo ocurrido por el camino.

-Nos dividiremos en dos grupos- propone Elián-. Cormac, Daniel, Ashley, iréis por el camino de la derecha, mientras Samuel, Abby, Ariana y yo tomaremos el sendero de la izquierda. Nos reuniremos en el claro en diez minutos. Ante cualquier problema, avisad e iremos de inmediato. Tened los ojos bien abiertos, esa víbora es muy escurridiza.

Un equipo toma una dirección mientras el otro se pone rumbo hacia la opuesto. Todos y cada uno de los integrantes de los grupos llevamos armas en ristre, a pesar de contar con poderes especiales dadas nuestra condición como criaturas sobrenaturales. Yo, por ejemplo, sujeto entre mis manos una pistola cargada con balas de madera, a pesar de tener mis colmillos a modo de defensa. Elián lleva consigo una estaca de madera, Abby un machete y Samuel una pistola con cartuchos con verbena. Avanzamos hacia el frente con sigilo, aunque en alguna que otra ocasión hacemos algo de ruido al caminar sobre las hojas secas que yacen sobre la tierra húmeda.

-Percibo el olor a madera quemada- informa Sam-. ¿Creéis que Anabelle estará de acampada?

Abby le da un codazo.

-¿Y si está quemando algo importante?- pregunta la chica.

-Espero que en ese caso sea así misma porque no veas los dolores de cabeza que nos ha dado durante todo este tiempo- replica el vampiro.

Elián les chista, pidiéndole que guarden silencio. Aprovecho el silencio sepulcral que se ha originado para agudizar el oído con tal de dar con algún dato importante, aunque lo único que logro descubrir es el crujir de la madera al ser quemada y unos pasos que van de un lado hacia otro. El vampiro de ojos verdes parece darse cuenta de este hecho, de forma que nos indica con la mirada que nos ocultemos tras los troncos de unos árboles y nos prepararemos para atacar.

Compruebo que mi pistola esté cargada y a punto para disparar antes de mantenerme a la espera de recibir una señal por parte de Elián. Mientras decide el mejor momento para actuar, me limito a agudizar el oído y mirar de reojo la escena que se desarrolla a pocos pasos de mi posición, aunque no consigo ver más allá de una mujer avivando unas llamas.

-Ahora- anuncia Elián. Todos los presentes salimos de nuestro escondite y apuntamos a Anabelle, quien sonríe ante nuestra llegada-. Ríndete ahora. No tienes escapatoria. No esta vez.

-Me preguntaba cuando íbais a venir- comienza a decir, sonriendo-. Tenía muchas ganas de anunciaros que ya no vais a tener que seguir tras la pista de la última bruja- señala a sus espaldas, donde está Anya atada a un palo de madera, en llamas-. Está fuera de combate- simula rebanarse el cuello con el dedo índice.

-¿Pretendías que viniéramos para ver cómo acabas con una de tus víctimas?- cuestiona Elián-. Porque no me ha sorprendido nada. Esperaba más de ti.