Capitulo 43: El fallido Touché

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Él era un buen mentiroso.

Hace muchos años había hecho demasiadas travesuras para ser contadas pero siempre lograba salir con una dulce mentira. Porque eso era una de sus armas letales… ser un buen mentiroso.

-No es necesario que hagas todo esto- remarco Mathew Humprey con sus rasgos árabes sumamente preocupados. Este tipo era alguien bueno jodido por una familia dañada.

-Por supuesto que lo es, no debemos permitir estas situaciones. Demuestra el poco control que tiene la Presedia con los futuros ocupantes y simplemente no habla bien de nosotros- Gregory llevo las manos a su espalda –Esta habitación contiene documentos de alto nivel, Brown. Por alguna razón solo nosotros tenemos derecho a verlos, de ser lo contrario hasta tendríamos un museo de ellos-

Derek casi pudo reírse en su cara.

-¿Qué tipo de secretos esconden aquí, Tayne?- fue una pregunta de la que sabia la respuesta –Digo, voy a ser un Presedio algún día. Lo lógico sería que me enseñen los sucios secretos que le voy a esconder a la gente-

Rápidamente el hombre mayor se puso tan tenso como para tener una contracción muscular.

-En todo hay un secreto y una mentira, si quiere jugar al sincero podría decirme que tipo de relación hay entre su alteza y usted porque puedo ser un viejo fuera de moda sin embargo no soy estúpido-

Ese fue el momento en que Mathew se metió en la conversación alegando que no deberían llevar esa intensidad al conversar. En un segundo Derek y Gregory subieron el calor de la conversación hasta el punto de ponerse un poquito dispuestos a darse de golpes pero el mediador los detuvo rápidamente.

-El irrespeto hacia un miembro de la Presedia es penado por la ley, Derek. Tenga en cuenta eso la próxima vez que hablemos- la amenaza de Tayne ni la sintió.

-La próxima vez que hablemos debería tener más respeto por mi y créame cuando le digo que yo no voy a detenerme-  esto tenía una clara traducción: Si se me acerca le rompo la nariz.

Lo odiaba con todo su corazón, principalmente por lo que le había hecho a su relación con Lara.

-Señor…- un guardia del instituto Marconi interrumpió la calurosa conversación. Era un guarda joven de cabello negro que parecía más nervioso cada segundo.

-¿Qué sucede, Swartz?- el guardia se puso un poco pálido moviéndose en sus pies.

-El señor McFellow acaba de irse y no acepto la revisión del solar- Tayne abrió mucho los ojos y luego aparento tranquilidad.

Los solares son automóviles que utilizan los Visionarios amables con el ambiente que funcionan con paneles solares sumamente potentes a diferencia de los paneles hechos por el ser humano. Trataban de convivir con el ambiente sin destruirlo.

Gregory Tayne pasó su mano en su pobre cabello.

-¡¿Cómo diablos lo dejaron marcharse?!- grito de pronto. Sip, ya no era sereno y tranquilo.

-Señor, se puso histérico y se marcho. Nosotros no podíamos… casi atropella a uno de los nuestros…- El líder de la Presedia lo callo con la mano. La boca de Derek cayó abierta.

Algo que siempre caracterizo a Uriel McFellow era su increíble paciencia y pacifismo con todo el mundo. Cuando Derek se enojaba tanto que quería partir el mundo en dos, siempre estaba Uriel calmándolo como un buen segundo padre y enseñándole muchas cosas de la vida.

El hombre que Swartz describía no era Uriel.

-No quiero escuchar excusas de su parte, pongan el código naranja en movimiento. Discutimos con el equipo la misión Águila así que póngalos en acción- el guardia asintió y se marcho rápidamente.

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