Jimin es un chico popular que pertenece a un grupo que se llama BTS, formado por 6 personas más el, pero lo que no saben Jimin y Aitana es que la vida tiene muchas sorpresas...
Después de contarle todo lo de su madrastra por segunda vez a alguien, Mark quedo sorprendido al saber que Aitana estaba pasando por esto.
Mark: Aitana no sabía que estabas pasando por esto. Aitana: No Mark, no es tu culpa tranquilo -dijo ella con una sonrisa- buenooo creo que ya es tarde ¿no? Y mañana hay clases ve a descansar. Mark: ¿Y dejarte aquí sol con esa loca? Ni muerto -dijo el mientras la abrazaba de una manera tierna-. Aitana: No me pasará nada. Mark: -se separa del abrazo- ¿Segura? Porque puedes quedarte en mi casa y yo -fue interrumpido-. Aitana: Tranquilo te prometo que si pasa algo te llamo -dijo ella sonriendo-. Mark: -hizo una expresión de rendido- Vale, pero me llamas -dijo para después darle un beso en los labios- te quiero. Aitana: Y yo.
Después de eso Mark se fue.
Aitana no aguanto más y se tiro en el sofá, estaba muy cansada, y no sabía por qué, pero no le importo mucho ya que pensó que podría ser por no dormir bien. Ella quería ir a dormir por lo cual miro el reloj que marcaba que eran las 21:46, decidió ir a su habitación, se puso el pijama y se fue a dormir...
AL DÍA SIGUIENTE
Suena el despertador, lo cual hace que Aitana se despierte y con mucha pereza mire la hora y...
Aitana: ¡¡MIERDA!!
Era tarde, eran las 7:15, se levantó casi saltando, se fue al baño a darse una ducha corta.
Cuando salió del baño busco algo rápido para poder vestirse, el clima estaba algo frío y el cielo estaba gris, con lo cual indicaba que en cualquier momento podía llover a cántaros, así que se puso algo abrigado.
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NARRA AITANA
Cuando ya estaba lista bajé con mis cosas, cogí las llaves, pero me di cuenta de algo... mi madrastra no llego anoche a dormir, mmmm mejor no le doy mucha atención ya que sé dónde puede estar.
Salí de casa y me dirigí al instituto lo más rápido que mis piernas me lo permitían.
Cuando llegue entre lo más rápido posible y corrí a mi salón pero para mi mala suerte el profesor ya había entrado y Noé quedó de otra que tocar a ver si me dejaba entrar.
Profesor: Oh es ustedes señorita Aitana. Aitana: ¿Puedo pasar profesor? Profesor: Lo siento pero la clase ya empezó y no la puedo dejar entrar, vaya a buscar el permiso y dirección y la reharé entrar. Aitana: Pero... -No me dejo entrar ya que me cerró la puerta en la cara-.
Iba de camino a dirección pero para mi mala suerte por segunda vez en la mañana me encontré con Seulgi.
Seulgi: Peri mira quien es, si es Aitana.
No le preste mucha atención y seguí con mi camino, pase a su lado y ella me detuvo cogiéndome con fuerza la muñeca.
Seulgi: ¿A dónde te crees que vas? Tengo algo que arreglar contigo perra -dijo mientras me empujaba al piso-. Aitana: Déjame en paz -dije mientras trataba de levantarme pero cada vez que lo intentaba ella volvía a empujarme- ¿pero que te e echo? Seulgi: ¿Y lo preguntas? Me quitaste a mi novio y me las vas a pagar -trato de pegarme pero no pudo ya que una chica se cruzó en frente mío y la empujó. Xxx: Déjala no la molestes. Seulgi: ¿Y tú quien coño eres? No te metas en cosas ajenas Mila del copon. Xxx: Me meto si quiero ¿vale? Ahora vete entes de que te desforme la cara de plástico esa que me llevas. Seulgi: No me hagas reír -dijo soltando una risa irónica-. Xxx: ¿A no? ¿Quieres que te lo demuestre? -dijo ella preparándose para soltarle un puñetazo-. Seulgi: Ash no voy a seguir escuchándote -pazo al lado de ella y se paro al lado mío- y en cuanto a ti, no te imaginas la sorpresa que te tengo preparada -dijo y se fue-. Xxx: Esa tía es insoportable -dice mientras ve a Seulgi perderse por los pasillos-. Aitana: Gracias por defenderme -dije sonriendo- ahhh... ¿eres nueva cierto? Xxx: Sí y creo que llegué tarde porque no me dejaron entrar -dijo riendo-. Aitana: ¿Como te llamas? Xxx: Me llamó Victoria ¿y tú? Aitana: Me llamó Aitana -dije sonriendo- encantada de conocerte. Victoria: Igualmente.
De repente me empecé a sentir mal, me dolía la cabeza y me sentía mareada, eso me hizo tambalearme un poco y Victoria lo notó.
Victoria: ¿Estas bien? ¿Te encuentras mal? Aitana: Estoy mareada -dije casi en un susurro-. Victoria: ¿Quieres ir a la enfermería?
Asentí y y ella ma cogió un brazo y lo pasó por detrás de su cuello y yo le indicaba dónde quedaba la enfermería. Cuando llegamos me tumbo en la camilla y la enfermera nos miró preocupadas.
Enfermera: ¿Que te paso? Aitana: De repente me sentí mal, tengo mareos y dolor de cabezas.
Mientras la enfermera me revisaba, Victoria estaba sentada en una silla cerca de la camilla.
Enfermera: ¿Desde cuando no comes? Aitana: Desde ayer por la noche ¿por qué? Enfermera: Porque esa es la causa de la cual tú te encuentras mal, tienes que comer bien así tienes energía.
Cuando termino de revisarme, Victoria y yo salimos de la enfermería nos dirigimos a la cafetería del instituto ya que Victoria me dijo que me iba a comprar algo de comer.
Victoria: Bueno, ¿qué quieres? -me preguntó-.
Esta chica es genial, de lo poco que los conocemos ya le tengo cariño y se preocupa por mi.
Aitana: Lo que sea, esta bien. Victoria: ¿Galletas y zumos? Aitana: Vale.