Capítulo 11

333 16 2
                                    

Estamos en el coche yendo a casa de Isco después de haber celebrado con la afición la victoria de la Champions. El poco tiempo que llevo hoy con Irene la he notado extraña.

— Te noto rara. ¿Pasa algo? Ayer estabas muy feliz y desde que hemos vuelto a Madrid...

— Nada — responde únicamente.

— Me puedes contar lo que sea Irene — le digo y ella asiente con la cabeza, entiendo que no quiere decirme nada y lo paso por alto.

Después de cenar Irene se pone a jugar con el hijo de Isco, y mientras yo estoy en la cocina con Carla.

— ¿Sabes por qué Irene está tan rara? — le pregunto a ver si ella sabe algo.

— Ha leído en Facebook una noticia de Marina, que la muy imbécil está escocida porque has rehecho tu vida con alguien mucho mejor que ella claramente — cada día me doy más pena por haber salido con Marina, sabía que solo traería problemas y que su objetivo conmigo era claro.

Cuando acabo de hablar con Carla voy a ver a Irene para irnos, aprovecho el viaje a casa para hablar de ello.

— Carla me ha contado lo de Marina, escúchame no le hagas caso, ella es así, todos sabemos lo que quería, solo forma parte del pasado no siento nada por ella. Y ni caso a lo que digan por ahí. Ves esto es lo que yo quería evitar, que salgan cosas como ésta que afecten a nuestra relación — explico, esto es lo que más miedo me da lo que se pueda decir y afecte a Irene, no quiero que sufra y menos por mi culpa.

— Está bien, sinceramente me da igual haré caso omiso, ni siquiera sé porqué me he puesto así. Perdóname — me dice.

— No te tengo que perdonar nada, incluso te entiendo y también entiendo perfectamente lo que es tener que estar saliendo con una persona conocida al que siempre sacan rumores o cosas de esas.

Al cabo de unos días me llaman para jugar en la sub 21 para jugar la supercopa pero no ganamos ya que Alemania nos ganó 1-0.

Cuando regresamos a España voy a casa de Irene para darle una sorpresa.

— ¡Joder qué susto Marco! — exclama cuando choca conmigo en la cocina.

— Tendría que haberte avisado, Carla me dio su llave para cuando volviera darte una sorpresa aunque creo que en vez de sorprenderte casi te mato del susto, lo siento — le digo y luego le doy un beso.

— Tranquilo. Siento que ayer no ganaseis, os lo merecíais.

— Unas veces se gana y otras se pierde,  a la próxima traeremos esa copa para aquí — le digo y su móvil empieza a sonar.

Es su madre que está pidiendo que vaya a verla y veo como Irene intenta evitar que nos haga ir para presentarme.

— Yo no sé si podrá venir... — le dice a su madre y le quito el móvil.

— Hola. ¿Cómo está? Soy Marco el novio de su hija — explico.

— ¡Qué alegría oírte! Quiero que vengáis a vernos — exige mi suegra.

— Claro allí estaremos no se preocupe. Nos vemos mañana — digo y cuelgo.

— ¿Se puede saber qué haces? — pregunta Irene alterada cosa que me provoca risa.

— Cumplir el deseo de tu madre. Ahora haz las maletas que nos vamos a Valencia. Coge bikini que me vas a tener que llevar a la playa.

— De verdad que no hace falta que vengas puedo decirle que tienes que entrenar o cualquier cosa, querrás descansar e irte de vacaciones a esas islas con el agua cristalina donde vais los futbolistas en verano — me iría donde fuera pero con ella, ahora mismo todos mis planes la incluyen a ella.

— Te prefiero a ti antes que a las playas con aguas cristalinas. Ahora prepárate la maleta yo me voy a hacer la mía. Saldremos mañana a las ocho. 

Ella (Marco Asensio)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora