Together through the hell - [Standa]

01: Aftermath

Disclaimer: Los personajes son de Marvel/Disney. 

¡Hola a todos! Traigo nueva historia. Y sí, sé que la pareja puede ser medio impopular, no sé, y que Romanogers es la luz, pero me gustan los desafíos. Se habló en alguna oportunidad en el #TeamRomanogers <3 que Steve y Wanda no juntaban ni pegaban, así que se convirtió en mi desafío personal hacer que funcionen xd, espero que haya resultado. La trama está centrada después de Infinity War y he modificado un poco las muertes. Por favor no me odien XD.

Si alguien se anima con un voto o un comentario, me harían muy feliz. ¡Saludos a todos!

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Steve Rogers llevaba mucho tiempo destruido. La guerra, la caída en picada, el congelamiento, el baile que nunca tuvo. El despertar, otra guerra –esta vez la guerra era distinta, acorde a la época en que había despertado –, los Vengadores, Bucky, Sokovia...

Y en al menos la mitad de esas batallas, siempre tuvo a Natasha Romanoff como una constante. La guerra civil al interior de la agrupación no la alejó de él, la vida de fugitivos no la alejó de él, los momentos de necesidad no la alejaron de él...

Hasta que Thanos llegó y trajo las cenizas.

Nunca se había sentido tan destruido, tan desolado, tan incompleto, tan... muerto... como cuando intentó tomar la mano de Natasha y no pudo, porque se iba haciendo polvo a medida que se acercaba. Se arrepintió tanto de no haberlo hecho antes, que sólo pudo configurar una disculpa con la mirada, mientras las lágrimas de estupefacción le anegaban los ojos. Nat sonrió, entendiéndolo todo, y su sonrisa se desvaneció para siempre. El viento se la terminó de llevar.

No era lo mismo que Thanos prometiera eliminar a la mitad del universo, a que eliminara a la mitad de SU universo. No estaba preparado para perderla, no cuando jamás la había tenido.

Agotado de ver desaparecer a todos los que amaba, tomó asiento sobre un tronco, sujetándose la cabeza con las manos. Cerrando los ojos. No se atrevía a abrirlos, no si no iba a ver a Nat delante de él, con una mirada burlesca, preguntándole si la edad no estaría ya pasándole la cuenta. Quería morirse. Estaba pensando seriamente en volver a congelarse, esta vez para siempre, cuando sintió que alguien tomaba asiento junto a él.

Levantó la cabeza muy a su pesar, y descubrió con alivio que Wanda Maximoff había sobrevivido. Al menos no se había convertido en cenizas, porque la verdad es que no tenía cara de sentirse viva. Sus ojos estaban enfocados en el cuerpo inactivo de Visión, derramando lágrimas como una cascada por su rostro constreñido por el dolor, tratando de gritar pero no teniendo las fuerzas. Si su mente ya era débil, si ya había estado invadida por el dolor, si ella ya había sufrido lo suficiente y aún así no estaba preparada para este golpe de desolación a su vida entera, entonces estaba a punto de perder la razón para siempre. Al menos eso veía Steve, tratando de recuperar la compostura.

—Wanda, ¿estás...?

Iba a preguntarle si estaba bien, pero se dio cuenta de que era una pregunta MUY estúpida.

Menos mal no alcanzó a terminar de formularla, porque en cuanto sintió su voz, Wanda al fin pudo gritar.

Y su grito de dolor crudo, abrumador e infinito, de seguro se escuchó hasta en las tierras desoladas de Titán.

.

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Para cuando Wanda volvió en sí, saliendo del cascarón que había creado en su mente para protegerse de ese sufrimiento que le abrasaba las entrañas, se encontró sentada en un sillón mullido, dentro de una habitación que jamás había visto. No reconocía ese entorno para nada, así como tampoco recordaba haber llegado allí por sus propios medios. A pesar de ello no se asustó, porque ya nada le asustaba. Lo había perdido todo: había perdido al hombre de su vida dos veces, había perdido a su hermano, había perdido a la gente que le había dado amor, confianza en sí misma, un lugar al cual pertenecer, había perdido su nación, su libertad, había perdido su mundo completo... ¿a qué podría temer?