~Limón~

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—¿Osea que no les dijiste?— Pregunto mientras guardaba sus libros en su casillero

—No me quisieron escuchar...créeme que me siento más que lista para contarles pero ellos jamás me hacen caso, es más bien como teber supervisores y no padres—

—Bueno, de seguro podremos decirle ambas— Saco de su bolsillo del sueter un labial de color fucsia y lo puso en sus labios —Que gran timo, esto es fucsia brillante, no fucsia oscuro— se quejó para ella misma.

La vio con sorpresa —¿Ha-hablas de ir a mi casa y contarles?— Preguntó nerviosa

Cerro su casillero y asintió —Soy tu novia Jhen, tengo que ayudarte si la cosa se pone fea, además, dudo que ignoren a estrella tan brillante como yo— Se acomodo el cabello y empezó a caminar por los pasillos.

Aveces a Jhen le causaba la arrogancia de su pareja pero esta no era la ocasión, era un tema serio para bromear y no le gustaba para nada.

Aún que si eso resultaba, saldría de todo esto.

(…)

Después de la escuela, Jhen aviso a su casa que invitaría a Alexandra, esperando a que todo aquello funcionará.

Ambas entraron a su casa y fueron al comedor.

—Jhen, ayúdame a ordenar la mesa para el almuerzo—

La mencionada tomó de la mano a Alexandra y la llevo a la cocina —Mamá, ella es Alexandra—

La mayor vio a ambas y sonrió —Mucho gusto Alexandra—

—El gusto es mío señora—

—Estaremos en mi habitación en lo que esta todo el almuerzo— Se llevo a Alexandra fuera de la cocina y subió las escaleras para irse a la habitación de Laurens.

Una vez ambas en la habitación con la puerta cerrada, primero que nada, Jhen le mostró toda su habitación.
Era muy artístico todo, ella misma pinto sus paredes con una esencia al mar, a Jhen le encantaba el mar, también las tortugas. Tenía muchas tortugas pequeñas pintadas en la pared y adornos relacionados con cierto animal.

—¿Y porque no tienes una tortuga de verdad?— Pregunto curiosa mientras se acostaba en la cama

Su pareja se acosto a su lado y tomó uno de sus peluches de tortuga —Mi padre no me deja tener mascotas...y a mi madre no le gustan su cara, sus patitas y eso...—

Ella fruncio el ceño —Que injusto— La abrazo —Yo te compraré una, y sera la mejor tortuga de la vida— Aseguro con firmeza.

Jhen se sonrojo y sonrió —Gracias Alexa— Correspondió al abrazo

La mencionada tomo de las mejillas a su novia y la beso con dulzura.
Aún que el beso tenía el proposito de ser dulce como todos, una situación incómoda lo volvió amargo.

Una cosa que le enojaba a Jhen, era que sus padres no respetaban su privacidad, ni siquiera cuando habían visitas.
Jhen había llevado a chicos a su habitación pero jamás hizo nada con ellos y justo cuando tenía una pareja para nada sospechosa, su madre tuvo que descubrirlas en el momento más incómodo.

La adulta se sorprendió, quedo decepcionada y le dio un ataque de enojó —¡Jackeline Jhen Laurens!— La mencionada se separó con vergüenza —¡Quiero una explicación para este acto tan...tan...tan abominable de parte tuya!—

—Mamá...yo, y-yo se los iba a contar—

La mayor nuevamente la interrumpió —Osea que tú...¿¡Eres una marimacha lesbiana!?— Vio a Alexandra con el mismo odio y se acerco a ella tomandola del brazo con fuerza —¡Tú la insitaste a esto! ¡No quiero verte maldita maniaca!— La jalo del brazo hasta sacarla de la casa

Alexandra ponía la mayor fuerza posible para no salir pero fue inútil —¡Jhen!— Grito desde afuera

—¡Vete de aquí! O juro que voy a llamar a la policia— Amenazó y sin más que decir le cerro la puerta.
Notó que su hija la había seguido hasta abajo a la puerta —Espera a que le diga a tu padre que clase de persona eres ¿¡Que hice mal!? ¡Todo este tiempo me esforze para que te comportaras como una señorta! ¿Para qué? Para que al final te terminarán llenando la cabeza de ideas estúpidas—

—-¡Yo amo a Alexandra! ¡Más que nada en esta vida, ni tu, ni mi padre, me prohibiran verla!— Le respondió entre lágrimas pero fue callada inmediatamente con uan bofetada.

Su madre nunca la había golpeado pero esta vez no tenía motivo para hacerlo.
Se fue a su habitación corriendo mientras lloraba y se encerró en ella. Si así reaccionó su mamá, no quería imaginar como reaccionaría su papá.

Pero ¿Porque?

Ella no estaba haciendo nada malo, estaba amando como cualquier persona, amando a su modo y su intención era contarles.
Lastimosamente, había gente que no entendía eso aún.

Besos de sabores [Genderbend Lams] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora