Capítulo 10.

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La confusión. (P.2)

Después de un par de horas platicando con Camila y Ally la puerta fue tocada con mucha fuerza.

-Yo abro. – Dijo Ally mientras caminaba hacia la puerta.

- ¿DÓNDE CARAJOS ESTÁ CAMILA? – Alguien gritaba.

Camila se levantó del sillón, su cara expresaba un terror inmenso, sus ojos comenzaron a llorar, su labio inferior temblaba un poco, su cara era de una niña asustada.

En ese momento la detuve. -Puedes quedarte aquí, Ally se encargará de traer a él idiota de tu marido.

-No...o lo in...in...insultes.

- ¿Qué mierda? Si ese maldito te a insultado, y mira solo como te tiene, estás llorando Camila, ese idiota no merece ni la más mínima demostración de respeto, al menos no de mi parte.

Ally venía caminando, su rostro era inexpresivo, pero logré observar un poco de preocupación, enojo y terror al mismo tiempo, cuando logré ver al marido de Camila supe exactamente por que ella tenía esa expresión en su rostro.

Los recuerdos comenzaron a llenar mi mente.

FLASHBACK.

- ¿Amor estás en casa? – pregunté cuando entré a casa. Era muy extraño, normalmente ella siempre esta en casa a esas horas. - ¡AMOR! ¿DÓNDE ESTÁS?

Mis gritos no fueron respondidos. Busque a mi mujer por todos lados, ella estaba en la ducha, lloraba, algo había pasado.

- ¡Mierda! ¿Amor que pasa? – Toque su hombro para ver si reaccionaba.

- ¡NO ME TOQUES ALÉJATE! – Alicia comenzó a llorar sin consuelo, se alejaba de mí mientras repetía las mismas palabras, estas en susurros no me toques.

Comencé a llorar, no tenía idea de lo que le pasaba a mí mujer, ¿Qué mierda la puso así? Necesitaba respuestas.

Después de salir del baño y esperar pacientemente a que mi mujer saliera de la ducha, ella decidió hablar del tema.

-Hoy en la... - Las lágrimas en sus ojos comenzaron a salir. – cuando salía del trabajo... camine hacia... - Lágrimas y más lágrimas, su voz no se entendía, estaba entrecortada. – el punto es que en el estaciona... estacionamiento mi je...je... mi jefe me alcanzó, él... él... me dijo que hoy me veía muy linda, que... me dijo que... le gustaba mucho y... y... y que no podía creer que fuera lesbiana, él me tomo del brazo y me... - su llanto fue más fuerte, dejo de hablar.

Intenté abrazarla, pero lo único que conseguí fue su rechazo y una vez más las mismas palabras NO ME TOQUES. Comencé a llorar, la mujer que más amaba me había rechazado, no quería que la tocará.

Sus lágrimas seguían cayendo. – Bueno... él me tocó, le pedí que parara, pero él... - Comenzó a llorar mucho más, dejo de hablar unos segundos. – él no paró, él seguía, le pedí con lágrimas que me dejara, pero el solo siguió besándome y tocándome, él... él... él me violó, Lauren, me obligó a tener relaciones sexuales con él... - Sus lágrimas eran muchas, se lanzó a mis brazos, yo no sabía cómo procesar lo que había escuchado, sus palabras me dolieron como una paliza, esto fue demasiado para mí.

Al final la abrace fuerte, lloremos como niñas pequeñas. Traté de mirarla a los ojos, pero simplemente no lo conseguí, intenté besarla, pero una vez más ella no me lo permitió. - Amor, no sé cómo, pero saldremos de esta, tienes todo mi apoyo, te amo y te apoyaré siempre. - Trate de tomar su rostro con mis manos, pero ella simplemente me rechazo, mi corazón con cada rechazo se partía más, la amo y me parte el alma está situación.

Ese maldito me las pagará, no sé cómo, pero lo hará.

FIN DEL FLASHBACK.

-Camila vámonos de aquí.

-si como tú digas.

- ¿Qué mierda haces aquí en mi casa?

-Solo vengo por mi mujer, la puta pregunta aquí sería ¿Qué mierda hace mi mujer aquí?

El tipo se me acerco, no le tengo miedo, ese maldito es el culpable de todas mis desgracias, ese maldito me arrebato lo que más amaba en la vida.

- ¿Qué intentas? ¿intimidar me? Nunca me has dado miedo, solo eres un maldito vio - el tipo tomo el cuello de mi camisa y me alzo con sus dos manos, mis pies ya no tocaban el suelo. – ¿Qué mierda haces?

-Solo di una maldita palabra más y juro que te reventare a golpes, será la paliza de tu vida. – Él se acerco más a mi rostro.

Camila se metió entre los dos, Ally me tomo por la espalda y me alejo de aquel maldito.

-No me digas ¿Ya superaste a la zorra de tu mujer? ¿Tan poco era el amor que le tenías?

- ¡CON MI MUJER NO TE METAS MALDITO!

- ¡Ups! Le di donde más le duele, para tu información te diré que lo disfrute como no tienes idea, fue increíble, y por la manera en que ella gritaba también te puedo decir que lo disfrutó. – sus palabras fueron tan fuertes que mis lágrimas comenzaron a recorrer mi rostro. – No sé que tanto le lloras si ella era una zorra.

- ¡DEJA DE HABLAR MIERDA DE ELLA! – Me zafé de los brazos de Ally, me puse enfrente de ese idiota. - ¡LÁRGATE DE MI PUTA CASA! O ¿prefieres qué le llame a la policía?

-Me voy pequeña zorra, pero no sin antes decirte que no te quiero ver cerca de mi mujer ¿Entendiste?

-Solo lárgate.

Camila tomo del brazo a el mal parido de Matthew. – Amor, solo salgamos de aquí.

Él se zafo de su agarre. – No me toque maldita zorra.

-Como tu digas, pero vámonos. – Camila comenzó a llorar.

-Esta bien salgamos de aquí.

Solo vi como Camila salía con la cabeza agachada, el idiota de Matthew salía con una sonrisa de victoria. Cuando estaba a punto de salir el maldito voltea a verme. - ¿Sabes? Tu mujer era una maldita provocadora, merecía lo que le paso, además ella lo pedía a gritos, alguna vez viste como me movía el culo, ella quería que me la fo...

Sin aviso alguno me lancé encima del él, comencé a golpear su rostro. – No vuelvas a hablar de esa forma, ella era una dama, tú solo eres un maldito violador. - El bastardo no tardó en reaccionar.

Volteo su cuerpo, me coloco a bajo de él, comenzó a golpear mi rostro. – Eres una maldita zorra, debí hacerte lo mismo.

Algunos de mis vecinos al escuchar los gritos salieron, uno de ellos me quito a Matthew de encima.

Ally me tomo del brazo y me jalo lejos de Matthew. – eres un maldito hijo de puta, me las pagaras, no sé como mierda, pero lo harás. – Mi cara estaba llena de sangre, de mi boca salía mucha sangre.

Matthew y Camila subieron rápidamente a su carro. – No puedes hacerme nada, recuerdas que ya lo intentaste, soy intocable. – y sin más condujo rápidamente.

-La policía ésta a punto de llegar. – Dijo uno de mis vecinos.

-Gracias, pero no es necesario, ellos no harán nada, no contra ese maldito.

Entramos a la casa. Ally tomo el botiquín que estaba en el baño, comenzó a curar mis heridas, tenía lagrimas en sus ojos. – solo mira cómo te dejo ese maldito. La verdad me dolió mucho lo que dijo.

-Creme me dolio más a mí.

La policía llego después de unos minutos, pero al igual que la ultima vez no pudieron resolver nada.

NOTA:

Bueno... creo que esto es todo, nos leemos pronto, adiós.

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⏰ Última actualización: Jul 05, 2018 ⏰

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