Everytime

p; 4

Para la sorpresa de pocos, el campamento terminó en un abrir y cerrar de ojos y era hora de regresar a la universidad. Aquellos pequeños gustos eran de los últimos que la universidad le podía otorgar a los próximos héroes, y es que, en un pestañeo los estudiantes de al clase A estaban a un paso de la graduación. A sus diecinueve años de edad ya estaban más que listos y preparados para salir al mundo exterior y enfrentar crisis diarias.

La mayoría de los estudiantes de la clase ya tenían un departamento de héroe al cual ir gracias a sus largos servicios y prácticas, además de los festivales deportivos en los cuales podían demostrar lo especiales que eran cada uno de los Quirks. Pero, era claro, no que todos aquellos terminarían trabajando para algún departamento, y Midoriya era uno de ellos. De manera independiente, igual que su mentor, quería proteger la cuidad de los villanos... pero de uno en especial; año tras año la policía a intentado miles de veces de localizar el paradero de Shigaraki Tomura, pero cada vez era más difícil. Tomura sabía su secreto y eso lo ponía en peligro a cada instante, desde la destruction del All For One había perdido la razón y la cordura creando un caos en la ciudad, aquel odio y rencor que guardaba era peligroso. Tomura, el nieto de la mentora de All Might aún seguía suelto y causando destruction en las calles y era trabajo del nuevo portador del One For All detenerlo.

— ¿En que piensas? – la pregunta lo saco de sus pensamiento.

— En nada, solo... – soltó un suspiro y sonrió — No puedo creer que estemos a nada de graduarnos.

— ¿Te preocupa? – preguntó Katsuki mirando cada una de sus expresiones.

Midoriya miró hacia otro lado, no podía mentir, le preocupaba: — Si, una vez que estemos fuera de la protección de UA los villanos vendrán – apoyo su rostro con una de sus manos para después mirar el cielo por la ventana del autobús — Ha sido complicado estos últimos meses.

— Si es por Shigataki Tomura... – la voz de Bakugou cambió de tono a uno más serio.

— No solo es él, – miró a su compañero a los ojos — es como... si algo malo fuera a suceder.

Bakugou reaccionó a esas palabras y frunció el ceño: — Nada malo te sucederá, tenlo por seguro.

Midoriya sonrió de manera sincera, estaba feliz de que Bakugou se expresara abiertamente con él. De regreso a las casas de acampar Midoriya no podía soltar la mano de Kacchan, como si fuera un niño perdido sintió esa cálida y fuerte protección. No podía negar aquel sentimiento que había florecido, quería vivir en carne propia las caricias y el amor de su amigo de la infancia.

— Eso me reconforta mucho, gracias – tomo su mano apoyando su cabeza en su hombro; la verdad de Midoriya era que no había podido dormir toda la noche de la emoción de ser besado por Katsuki.

Dentro del autobús todos los estudiantes permanecían dormidos en parejas, y ellos no serían la excepción, por primera vez para Bakugou en mucho tiempo esto lo reconfortaba, desde la ultima vez en la enfermería no había tenido la dicha de dormir cómodamente sin que los sueños lo persiguieran; Katsuki sabía que al estar tan cerca de Midoriya creaba una paz interna que hacía que todas sus preocupaciones se alejaran.

[. . .]

— ¿Qué? – su rostro se destruyó en mil pedazos, sus cejas se arquearon hacia arriba y cerró los ojos por varios segundos dejando que el aire abandonara su cuerpo.

— El Joven Bakugou – mencionó su maestro a cargo desde primer año — A renunciado a la universidad – cruzándose de brazos soltó aire — Por tú expresión supongo que esto también es nuevo para ti.

— ¿No dijo por que? – preguntó rápidamente Midoriya al no encontrar una razón para que su compañero saliera de la escuela de manera tan repentina.

— El dijo que no había una razón en particular – Aizawa se levantó de su asiento dirigiendo a Midoriya hacia la salida de la sala de profesores — Fue decisión de él y quiere que la respetemos.

Midoriya se quedó plasmado fuera del salón de profesores tras las palabras de su maestro.

Sin poder creerlo corrió directo a los dormitorios, conocía bien como entrar al cuarto de Bakugou sin que nadie se diera cuenta de aquello, puesto que eso era ocasional para ellos. Temiendo en abrir la puerta se encontró con la verdad: Katsuki lo había dejado.

[. . .]

— ¡Es hora de levantarse! – se escuchó el grito de Present Mic por todo el autobús. — ¡ES HO-

— Es suficiente, queremos que sean útiles y para ello necesitan sus tímpanos – Aizawa callo con un golpe a su compañero de trabajo.

— Uno ya no se puede divertir como antes con los niños – Present Mic bajo del autobús acompañado del chofer.

Midoriya miró a Katsuki con el ceño fruncido, internamente estaba enojado con él por haberlo dejado en su sueño.

— ¿Sucede algo? – preguntó al ver la expresión del chico.

— Kacchan... – entrecerrando los ojos acercó su rostro al de él, Bakugou no se alejó ni un centímetro y sintió la cercanía que tenía uno del otro. — Si llegas a dejarme... me enojare demasiado contigo que iré a buscarte incluso bajo las rocas.

Katsuki lo miró un poco sorprendido y después sonrió, como hacía mucho no había sonreído, con arrogancia sujeto el cuello de la playera de Midoriya con fuerza evitando que se alejara de él: — Esa debe ser mi línea, nerd.

Midoriya se sorprendió por la respuesta a su amenaza, por unos segundo miró los ojos rojos y estos demostraban determinación, sonrió con alegría sujetando la mano de su compañero con fuerza, Bakugou soltó su agarre, dándose cuenta que la mayoría había bajado ambos optaron por tomar sus cosas y seguirles.

Katsuki lucia mejor de cuando había salido de la academia y eso lo había notado toda la clase: — Deberíamos sacarte a pasear más seguro Bakugou – río Eiji y los demás de la clase lo siguieron — Te ves mejor, hermano. – Kirishima dio un pequeño golpe al hombro de Bakugou pero este solo ignoró la acción.

— Préstenme atención, – Aizawa llamó la atención de todos los presentes — U.A a planificado actividades que deberán seguir dentro de la universidad después de mucho tiempo, les recomiendo que descansen lo que resta del día. Las siguientes semanas serán agotadoras para ustedes. – mirando entre sus estudiantes encontró al rubio ceniza —En especial para ti Bakugou. Eso es todo, pueden regresar a sus dormitorios.