𝙲𝙰𝙿𝙸́𝚃𝚄𝙻𝙾 𝙽𝚄𝙴𝚅𝙴

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o sé si les interese, pero la parte final del capítulo la escribí escuchando A Thousand Years y Demons - Imagine Dragons, me inspiraron bastante. Eso, disfruten ♡♡♡.

No sabía qué hacía ahí, ni siquiera sabía cómo había llegado, pero no podía escapar

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No sabía qué hacía ahí, ni siquiera sabía cómo había llegado, pero no podía escapar. La vampira se encontraba hablando y hablando con las empleadas, ordenándoles que buscaran esto y aquello. Mientras que TaeHyung no podía moverse correctamente por temer romper el traje.

Todo había pasado tan rápido, terminó de tomar desayuno y SeulHee entró en la mansión, llevándoselo al centro comercial sin darle explicaciones de nada, ni siquiera dejándole despedirse de JungKook, quien estaba bastante confundido. Pero el muy maldito no había ido en su búsqueda para saber qué tramaba su hermana.

Y ahora se encontraba en una tienda probándose trajes de novio. Realmente no estaba decepcionado o molesto, pero él no quería usar traje.

SeulHee sólo parloteaba y pedía cosas que a TaeHyung no le agradaban, ni siquiera le entraban. Un movimiento brusco y aquel traje se rompería debido a que era demasiado ajustado. Él quería usar una falda, aunque la idea de usar traje tampoco le desagradaba, sólo incomodaba.

Las empleadas se veían agitadas de moverse de un lado para otro buscando todo lo que la vampira les pedía. Hasta el peliazul se cansaba de escucharla, quería callarla y pedir unas opciones él; SeulHee no le había dejado ni siquiera dar una idea de lo que podría usar. Hasta ahora sólo le traían trajes aburridos de colores aburridos, quería ver si al menos había una falda con un diseño y color llamativo.

Vio el rostro de la castaña enrojecer de furia al escuchar que no quedaban más diseños.

—SeulHee-...

—¿Cómo no tienen más diseños? Necesito que este hombre se vea fabuloso, ¿qué es lo que no entiende? Todos sus diseños son aburridos, no entiendo cómo no tienen algo más llamativo —bufó.

La empleada abrió la boca y se tocó el pecho, indignada.

SeulHee se sentía frustrada por no poder darse satisfecha y por no poder satisfacer al peliazul. Faltaba poco para la boda y ella quería escoger todo con tiempo. Ya faltaba poco para que cumpliera la mayoría de edad, sólo faltaba un mes, estaba emocionado, pero más por el hecho de que se casaría con JungKook. Eso era lo que más le emocionaba y ponía nervioso.

—Seullie, no te estreses, podemos entrar a una tienda y buscar una falda junto con una blusa bonita. Estoy seguro de que habrán muchas —le animó, regalándole una característica sonrisa geométrica. Sí, Kim TaeHyung definitvamente no era el mismo que cuando llegó a la mansión Jeon.

La vampira no se dejaría desanimar, así que asintió con una sonrisa. Encontrarían un maldito conjunto para que el peliazul dejara a todos con la boca abierta, ella se encargaría de eso.

𝑨 𝑽𝑨𝑴𝑷𝑰𝑹𝑬 𝑰𝑵 𝑳𝑶𝑽𝑬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora