—Gracias, muchas gracias.
—Disfrutela es toda suya —la mujer salió de mi nuevo apartamento, han pasado casi tres años desde la última vez que me vi con Jimin, hemos hablado por Skype, videollamada pero para ambos no es suficiente, todos los peluches que él me ha enviado desde Corea es lo más cercano que me recuerda a él, claro, después del collar que compartimos, terminé mis estudios y hace un tiempo me mantuve pagando las cuotas de mi apartamento hasta que finalmente ayer pagué la última dando por terminado el contrato y convirtiéndose en completamente mío, mi mamá, ella me ayudó con dinero y de alguna manera se lo devolvere asi ella deje claro un no. Guardo las llaves de mi acogedor y pequeño apartamento, está alfombrado así que me quité los convers y me mantuve en medias, me vestí de nuevo con un short de jean y una camisa negra de tiras, me deje el cabello suelto, me quite los accesorios excepto nuestra cadena, abrí las cortinas, conecté los parlantes a mi celular y puse música al azar. Comencé a ordenar todo, los sofás, las lámparas, la gran bolsa llena de peluches la deje en mi habitación, que a propósito solo hay una, mi biblioteca y todos los libros, decore las paredes con fotos, recuadros y por ahora mis dos diplomas, seguiré mis estudios con una especialización, pero primero tendré que conseguir dinero suficiente. Bueno, retomando, eran las 4:55 de la tarde y ya le había enviado algunos mensajes a Jimin, pero no le llegaban, quiero traerlo algún día y que se quede aquí conmigo por lo menos una semana. Ya había adelantado el orden en el apartamento, así que, ya conectada la nevera, me hice sandwich frio y jugo de lulo con hielo, es verano y hemos llegado a 40°C, para suerte mía, mi pequeño penthouse viene con aire acondicionado y calefactor. Todo incluido. Solo me hace falta el chico ¿no? Que digo.
—Hola mamá.
—Hola mi niña, ¿ya puedo ir a verlo?
—Quiero que esté ordenado mamá, prometo que iré a traerte cuando esté listo.
—Hija, me siento orgullosa de ti.
—Y yo de ti mamá, eres la mejor.
—Chao mi niña, mañana me llevas.
—Lo prometo, te amo —colgué y seguí con mi sandwich, encendí mi diminuta televisión, no soy de ver mucha tv, pero mi mamá insistió en que lo llevara, según ella, es bueno saber lo que pasa en el país. Y si ella lo dice entonces es verdad, pasaban comerciales acerca de viajes a buen precio para familias, comerciales de comidas y restaurantes exclusivos, toda clase de publicidad que vende a toda costa sus productos y servicios... en fin. El sonido de notificaciones me distrajo de la televisión, lo tomé y sentí como mis mejillas subieron de temperatura. Chim me había contestado, no entiendo por qué pero hablamos seguido, lo conozco bastante y aún me siento nerviosa hasta cuando pienso en él, como acto reflejo tomo la cadena cuando leo su mensaje y lo siguiente me quita la sonrisa que tenía en mi rostro generando gotas de sudor en mi frente a pesar de que está el aire acondicionado encendido.
—¿Quieres que te ayude a terminar con tu apartamento? —mamá ¿por qué le dices todo a Jimin? Se supone que eres mi cómplice... bueno asi te amo. Ahora ordenemos la situación, Jimin me pregunta que si yo quiero que él me termine de ayudar con el desorden que tengo, supongo que es una broma quizas —ven y me abres que muero de calor —esto realmente tiene que ser una broma. Por pura curiosidad me dirigí hacía la entrada, y me preparé para recibir las risas de Jimin vía Whatssap, lo que no me esperé fue recibir esas risas en frente mio, apenas abrí la puerta, Jimin estaba frente a mi -perdóname por no avisarte.
—Jimin espera ¿es real?... ¿estás aquí? es decir... como... aish... —tengo los ojos aguados, no lo creo, hace tanto tiempo que no lo veo que hasta ahora me di cuenta que en serio me hizo falta durante estos tres años.
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𝑫𝒆𝒔𝒅𝒆 𝑵𝒊ñ𝒐𝒔 𝒕𝒆 𝑸𝒖𝒊𝒔𝒆 [TERMINADA]
FanfictionJimin y tú se conocieron en un jardín de niños. Tú siendo la niña más pila del salón le enseñaste muchas cosas a Jimin. Se separan durante mucho tiempo pero una compra en tu almacén cambia el rumbo de tu vida.