"-Your pleasure belongs to me, if you do not give it to me, I'll take it."
Ares, el Dios de la guerra había abierto una brecha entre dos mundos, provocado catástrofes y horrores por doquier, alimentándose de la ira y de las sanguinarias luchas que s...
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—Eres azúcar, en serio. Demasiado para mi pobre corazón. —suspiró el pobre chico. Cassiopea sonrió.
—¡Aigoo, Kookie Oppa! No sé por qué dices eso. —cruzó sus brazos fingiendo indignación, sin embargo el punto de tope para él, fue el "Kookie Oppa"
—¡Agh, estás buscando que sufra, eres mala! ¡Ven aquí! —la chica corrió huyendo de él, sin embargo no sirvió de mucho. Atrapó a Cassiopea en sus brazos.— Al menos déjame abrazarte. —pidió.
—No te preocupes, oppa. —fue a besar sus labios, no obstante ella amagó y aquel gesto se dirigió a su mejilla.
—¡JUNG CASSIOPEA!
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Dejó sus pensamientos a un lado cuando notó que alguien acarició su cintura y después a cada lado se posó una mano que la agarraba con fuerza. Alzó la cabeza casi dislocándose el cuello y se topó con una respiración agitada y unos labios que tomaron iniciativa de besarla. Esa delicada manera de besar que alteraba su organismo y los toques en su cadera destapaban al culpable. ¿Cómo se las podía apañar para siempre estar ahí? La morena continuó con el beso. El rubio sonrió a medias y la otra también, por puro efecto dominó. Era tan contagioso.
—Deja de aparecer siempre en todos lados, es molesto. —Separó sus labios y giró para estar en frente de Jimin.— Me duele el cuello estúpido. —Se fijó en sus labios rojos y no pudo evitar soltar una risilla.
—¿Molesté? —La intentó coger de la mandíbula pero ella apartó su mano, estaba roja y él supo que el rechazo fue por eso.— No tengo la culpa de que me anheles tanto y me siguieras el beso, solo tenías que apartarte, ¿No lo has hecho así siempre?
—¡Qué dices! No me hubieras soltado, no seas estúpido y admite que me hubieras presionado para qué-
—Estás roja.
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—Eres un ángel. —susurró Taehyung a su espalda.
—¿Eh? —giró la cabeza arqueando las dos cejas curiosa.
—Que eres una pervertida. —le dio un pequeño golpecito en la frente.
—¡No es cierto! —se ruborizó tocándose la frente.
—¿Ves? Estás poniéndote roja de nuevo, te lo estás imaginando. —se burló el íncubo de ella.
—¡Que no! —lo golpeó ella en el hombro.
Taehyung alza a Rossie en brazos.
—Mi preciosa nena. —la valquiria gimotea escondiendo el rostro en el cuello del mayor mordisquendo con travesura.
—¿Porqué lo haces tan difícil?—La aprieta más contra él acariciando su cabeza.— Solo voy a salir un momento... —La rubia muerde con más fuerza su cuello haciendolo reír.
—Mi pequeña y traviesa bebé... —apretujándola contra su cuerpo le roba besos duros y dolorosos a la par que placenteros mordiéndo sus hinchados labios rosas.
—Prometo volver antes de que mamá esté ahí. —Taehyung bufó asintiendo.— Cuidado con Jimin, eh, no le hagas daño.—dijo ella, el íncubo permaneció rezumando calor.
—¡Como sigas hablando de Jimin no sales de aquí, en serio!
