Anastacia Romanova

abandono.

En una noche tormentosa una familia decidía el futuro de sus dos hijos. 

- Entonces Lyli, James dejaran a la pequeña Harry con tu hermana Petunia.

- No, es mi hija,  como se te ocurre Albus - dijo una pelirroja.

- James tienen que entender que la niña es Muggle, ni hay magia en ella.

- Lo se pero Daniel necesita a toda su familia junta.

- pero que diera el mundo magico - fue ahí cuando capto la atención de los Potter, esta niña tendrá como primogénita el derecho sobre las nobles casas de Los Potter y Peverell - los tenia, James se puso pálido y Lyli dejo a la niña en la cuna. - Que dirá la comunidad Mágica.

Lo que nadie sabía es que Lyli tenía un secreto con respecto a la niña y nadie debía saberlo, si la niña crecía y se veía mas a él, entonces estaría perdida, y ahora que le brindaban una oportunidad no la desperdiciaría.

- James... Es lo mejor.

- Esta bien.

Esta noche una mujer envuelta en una capa dejaba a una canasta a una bebé.

- Ella me odia, y hará tu vida un infierno como el mió, como el que vivo al saber que el no me ama y los sigue buscando.  

Unos minutos después la puerta se habría y una mujer rubia alta de ojos azules y para ser honestos poco agraciada, y veía con desprecio el bulto que acaban de dejar en su puerta. 

- Petunia que haces - dijo el hombre que venía bajando las escaleras.

- Mi hermana se volvió loca - dijo la mujer cargando al bebe. - pero no criaré a su bastarda - y comenzó a idear un plan.  - sostén a la anormal - dijo mientras iba por un celular y lo ponía a cargar.

- petunia? - dijo el hombre al ver a su esposa. 

- vamos, ve por las llaves del auto, y yo voy por mi nene - dijo y dejaron a la bebe en la canasta mientras se arreglaban. 

En mitad de la madrugada salieron, el señor Dursley manejo toda la noche y parte del día llegando a un orfanato lo mas lejos que pudieron de su casa, solo para dejar ala bebe en la puerta de un convento y dejaron a la bebe ahí.

Una vez en el hotel cercano al convento la señora Dursley hizo una llamada que cambio la vida de la bebe.

5 días después los nuevos padres.  Conocían a la bebe que ellos amarían y sería su princesa.

Desde el momento que la pequeña Harry Rosa James Potter Evans fue dejada en manos de Petunia Drusley y esta fue adoptada por Nikolas la pequeña se convirtió en Europa Anastasia Nikoláyevna Románova la hija del Zar Nicolas II y Alejandra.
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