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Me despierto y me encuentro con una figura familiar cargando a mi hija . Entre cerré los ojos para poder visualizar mejor y me di cuenta que había regresado .

- Hola Nora - dijo él sonriente como siempre , miró a Leah y agarró su pequeña mano - Bienvenida al mundo pequeña.

- ¿¡ Cómo hiciste para ... ?! - pregunté emocionada .

- Tuve que mandar algunos tipos para que entretengan a tu marido - rodé lo ojos ante lo último que dijo y rió. - Ya sé , no se casaron . Mira el lado positivo , no estás completamente atada a ese hombre .

- Quizás - respondí en suspiros , me siento cansada. - Te extrañe Elliot.

- ¿ Te acuerdas que te prometí , sacarte de esa terrible cárcel ? - asiento con melancolía .

- Pensé que te habías muerto allí - respondí a punto de llorar .

- No fui exactamente yo , pero si murió alguien . - suspiré triste y él se acercó a mi para entregarme a la niña . - ¿ Cómo se llama ?

- Decidimos que si era hombre , se llamaría Oliver y Leah si era niña .- respondí sonriente mientras jugaba con la manito de la pequeña . 

- Oh ya veo , entonces se llevan mejor - dice algo fastidiado ,  asentí algo insegura .

- Es lo mejor  no me voy a poder librar de él , además no quiero que Leah nazca en un hogar con odio , no me lo perdonaría . Ella es la única que me da fuerzas .

- No lo hagas más - pidió agarrando mi mano , lleve mis ojos a los suyos y me sentí como aquella vez cuando no tenía apoyo y apareció él , luego Beca y...  se fueron , al menos él regreso .- Quédate junto a mi , y las protegeré - musitó y besó la frente de la niña . - Piénsalo.

- Es imposible Elliot  - dije con seguridad , ya había intentado huir y eso me sirvió de experiencia.

- Ya no lo es , tengo a muchas personas de mi lado , nada malo . Solamente quiero que me sigas , y nunca más volverás a ver a Archie . Hazlo por Leah . 

Miro a Leah con detenimiento , y pienso que quizás tenga razón , ¿ Que clase de vida le puedo dar en un hogar sin amor ? . Ahora dirijo mi mirada a Elliot quién sonríe esperanzado , el sonido de la puerta abrirse de golpe nos interrumpe . 

Era él.

ObsesiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora