Capítulo 11: Treta.

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Akari: Hola por aquí ando de nuevo  y les vengo a dejar la continuación del Emperador de Hielo , espero que lo disfruten :D

Capítulo 11: Treta.

Fue así como había pasado ya una semana desde que María había comenzado a trabajar y B32 se las había ingeniado para convencer al director Bruno de ponerla a ella como su cuidadora. En ese momento eran como las nueve de la noche, Diego y John estaban cenando en la cafetería de la nave, su amigo le pregunta.

- ¿Qué te sucede? has estado de mal humor toda esta semana.

John lo ignora, se mantiene en silencio hasta que Diego da en el clavo.

- ¿No me digas que es por el tal llamado Chris?

John mira a su amigo furioso y responde.

- ¿Qué tiene que ver ese chico con mi estado de ánimo? No seas idiota.

Diego sonríe y dice

-Bien, bien... como digas... pero debes admitir que desde que ese joven está cerca de la doctora pareciera que todo a tu alrededor estuviera a una temperatura bajo cero, para mí se ha hecho complejo acercarme y hoy estás peor que nunca lo sabes ¿Cierto?

John esquiva la mirada, se lleva la comida a la boca y no vuelve a decir palabra durante todo el tiempo que estuvo con su amigo.

Lo cierto es que todo había comenzado ese día a las seis de la mañana, a esa hora María se subía al teletransportador junto a John, durante toda la semana siempre la esperaba fuera de su habitación cada día y la dejaba en las instalaciones y luego se devolvía a la sala de monitoreo. María ya comenzaba a incomodarse con Chris que siempre cuando estaba frente a John hacía algo vergonzoso le tomaba la mano, la abrazaba o era demasiado familiar con ella, parecía que lo hacía a propósito, también se había dado cuenta que Chris sonreía mucho en dirección a las cámaras y hacía cosas osadas que los otros científicos ya le habían llamado la atención, mientras que ella solo quería enterrarse viva. Por eso ese día cuando el teletransportador deja de brillar y ya se encontraban en las instalaciones Génesis María que aún estaba algo mareada le habla cuando John estaba unos pasos más adelante que ella, este se gira hacia ella al escucharla.

-Sabes no es necesario que me acompañes siempre, ya conozco bien el camino, se cómo funciona la plataforma de más adelante. Además...

María mira el rostro de John para verificar que expresión ponía y continua.

-Además creo que ustedes dos no se llevan y es incómodo...

John la interrumpe y le dice.

- ¿Qué es incómodo? ¿Te refieres a ese niño?

María titubea y solo dice.

-Bueno...

John frunce el ceño y dice.

-Así que quieres que deje de acompañarte por ese niño... bien como quieras, en realidad da lo mismo, tampoco es mi obligación el ser tu guardaespaldas.

María ve como este le daba la espalda y comenzaba a caminar, el viaje hacia las instalaciones fue silencioso e incómodo. John en el ascensor se baja un piso antes sin siquiera decir una palabra. María avanza por los pasillos hasta entrar a una de las salas de batalla no era como la que Bruno le había mostrado la primera vez, esta era más pequeña y eran simples peleas entre sujetos de pruebas, estas no eran a muerte, solo se veían las capacidades de cada sujeto, estos llevaban un traje que se ajustaba a la piel, este traje captaba, la presión, la temperatura, los latidos del corazón y medía los segundos de reacción ante un estímulo que en este caso era un ataque, La pelea dura una hora cuando termina los dos sujetos son llevados a distintas enfermerías que estaban unidas a cada domo de batalla.

El Emperador de HieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora