La hermana de Cuatro

Tiempo de pelear y un poco de Osadía

La siguiente actividad en el entrenamiento era la practica de lucha, nos enseñarían tanto a pelear como a defendernos en el caso de no tener un arma en nuestras manos, no quedarnos perdidos sin saber que hacer o como defendernos.

CUATRO: Hagan parejas (ordena).

Tris y Christina me miran con aprensión al estar juntas y verme sola pero les sonrió, se que ellas son grandes amigas ahora y el estar sola no me aflige, en realidad estoy acostumbrada a ello.

¿?: Oye chica (me sacude) ¿Quieres ser mi pareja?.

Me volteo hacia una chica, es un tanto mas baja que yo pero se ve un montón más segura, su sonrisa es un tanto arrogante pero no me parece que se crea superior a mi. Su cabello es negro y largo y su piel es levemente morena, sus ojos son café intenso y su barbilla levemente musculosa. Recuerdo vagamente su selección, cuando su rostro era cubierto por unos gruesos anteojos y ahora noto que ni siquiera los necesitaba en realidad, era pura apariencia.

YO: Si, ¿Por que no? (acepte) Soy Mad.

¿?: Yo soy Nuah (se presentó) Nací en Erudición.

YO: Es un placer (asumí seria).

No se parecía en nada a los otros Eruditos, no me miraba con curiosidad corrosiva, ni caminaba con petulancia. Simplemente tenia su gesto usual de Erudición.

CUATRO: PRACTICAREMOS LOS BLOQUEOS (Grito para que todos se callaran y así lo hicimos) dos golpes en cada antebrazo, doscientas repeticiones (golpea sus manos dando la orden de iniciar).

Me voltee hacia la chica que sería mi pareja y ella levanto sus brazos mostrándome sus antebrazos esperando mi reacción, le doy un golpe como Cuatro nos indica; ella da unos pasos atrás, la he golpeado con demasiada fuerza, estuve apunto de disculparme por ello como era mi costumbre pero muy por el contrario regresa el golpe soltando una risa.

No lo entiendo, acabo de golpearla, ¿No debería estar molesta?; esto le divertía, podía verlo en sus ojos, parecía que lo disfrutaba haciéndome pensar.

¿Debería estarme divirtiendo en mi entrenamiento?, ella parecía estar divertida realizando juegos sin alejarse del objetivo de nuestro entrenamiento, ¿podría hacerlo yo también?. Regreso el golpe con la misma fuerza que antes y ella vuelve a reír, empezamos a golpear una y otra vez, regalando risas y comentarios en reto (muchos mas de su parte que de la mía pero también lo hacia). Fue entonces que una mano sobre mi hombro nos detiene.

CUATRO: ¿Que hacen? (serio).

Mi compañera se tensa y se endereza con sus manos a sus costados igual que un soldado recibiendo ordenes de su superior, tensa como una piedra. Tenia que disimular así que no pude evitar imitarla.

CUATRO: Agradezcan que lo están haciendo bien sino las pondría a cargar bloques de cemento hasta el amanecer (su gesto es bruto pero no agresivo) Compórtense o alguien mucho menos piadoso las aplastara.

NUAH: Si señor (su voz notaba su temor).

YO: Si señor (aseguro).

Su gesto de reproche me ataca por unos segundos, trate de detenerme pero no lo logre y le hice un gesto de burla, lo vi morder su labio conteniendo la risa antes de fulminarme casi sin nada de rudeza por hacerlo reír; volví con mi pareja que parece que acaba de salvarse de la muerte.

YO: No exageres (me burlo).

NUAH: ¿Exagerar? (gruño) ¿Vez lo gigante que es ese monstruo? creo que podría matarnos con solo estornudarnos encima.

YO: Lloricona (me burlo).

Ella recupero su humor y con malicia pico mis costillas, salte incomoda, en abnegación no era bien visto que la gente tocara a las otras personas.